Sin batería #Parte1

Capítulo de mala suerte.

Estaba la puerta de casa abierta. Se oía a mi padre hablar con alguien.

Seguramente fuera por teléfono y de trabajo.

Entré haciendo un vago saludo para que me oyera y antes de ir a verle, me dirigí escaleras arriba hacia mi habitación para arreglarme un poco.

Me duché, y bajé al salón.

Para mi sorpresa, con quien estaba hablando mi padre era con... Trey.

No puede ser.

Mis ojos se abrieron tanto como mi boca que hicieron una 'O' gigante. Tampoco era capaz de articular palabra.

-Adel, siéntate. -Me ordenó papá. Yo hice caso cual soldado cerrando la boca y sentándome tan recta y seria como podía. La verdad es que no tenía ni idea de como actuar.

Miré a Trey. Tenía los ojos rojos. Seguramente había estado llorando.

-Me contó todo. -Se aclaró la garganta. -Trey me contó todo.

¿Qué? ¿Contó a papá que me pegó? ¿Y como está él tan normal?

Os juro que esto no me puede estar pasando a mí.

Entonces tuve mi reacción.

-Me pegó. -Dije levantándome mirandolos a los dos. Trey miró hacia otro lado con rabia. Vi como apretó sus puños.

Se giró otra vez hacia a mí mordiéndose el labio. -Intentó abusar de ti. Un amigo mío lo intentó y no me lo dijiste. -Cada vez alzaba más alto la voz. -No quería que tú salieras herida. Ni lo más mínimo. -Se acercó más a mí y me agarró de la mano. -Te amo, Adel.

Mis ojos se encharcaron en segundos. Estaba claro que él era lo único en lo que pensaba.

En el amor hay baches, muchos. Y todos se deben de superar, ¿no?
Además, él no me vio cuando lo hizo, por supuesto que no lo habría hecho de ser así.

Quiero a Trey. Él ha sido valiente de haberle contado todo esto a mi padre. Ni yo hubiera sido capaz. Y si no le ha echado de casa, es porque sabe que de verdad me quiere. Creo que esto merece la pena.

-Trey... Yo... -Temblaba, pero no de miedo, si no de nervios. -También te amo.

*********

*Llamada entrante de: Marcos*

-¿Sí?

-¿Adel? Dime que no tienes planes para mañana. -Mierda, no le había contado nada.

-He...-Me temblaba la voz. Me daba verdaderamente miedo su reacción. -He quedado con Trey. -Dije de una vez firmemente.

...

Solamente se oyó suspiro.

-¿Marcos? ¿Estás ahí?

Resopló. -Haz lo que quieras. Es tu vida y tus errores. Pero te digo una cosa, voy a estar siempre que lo necesites, pero ya está. Me rindo. No quiero ser tu segundo plato, Adel. Lo siento mucho.

Eso me dolió. Ya no tendría a Marcos. Y la verdad es que estaba empezando a sentir algo, pero ni comparación con Trey.

Maldito Trey. Deja de ser mi punto débil.

-Gracias Marcos. Eres un gran amigo. -Y colgué.

Dios, ¿he dicho eso en serio? ¿Gran amigo?

Marcos, pérdoname. No quiero hacerte daño.

20 de Junio de 2012

Bajo las escaleras. Papá trabaja hoy, pero se oyen ruidos.

-¿Papá? ¿Estás ahí? -Dejan de oírse los ruidos. Nadie contesta.

Tengo miedo, bueno, no sé. Se podría decir que soy una chica valiente, pero, es que, buah. ¿Quién narices es valiente cuando oyes ruidos raros en tu casa?

Me asomo en la cocina. Está la ventana abierta. De repente un gato blanco y negro sale de un armario y se va corriendo a la calle. Del susto pego tal grito que me habrá oído hasta el vecino.
En medio del grito, alguien por detrás me tapa la boca. ¿Pero qué?

Ahora sí que tengo miedo. Pero como ya he dicho, tengo un carácter fuerte, por lo que muerdo la mano y al soltarme, me giro y sin pensarlo lo doy un puñetazo en la cara.

Se toca la nariz, está sangrando. Me mira y sonríe. -Ya estamos en paz, ¿no?

-¿Trey? ¿Qué haces aquí?

-Si me das hielo, te lo contaré.

Una risa salió de mí. Le di una bolsa de croquetas congeladas para que se la pusiera en su nariz, y papel para que se la taponara. Fuimos al salón y nos sentamos frente a frente.

-Repito, ¿qué haces aquí?

Él estaba con la cabeza echada para atrás para dejar de sangrar. Entre eso y las croquetas en la cara, la verdad es que la situación era bastante graciosa.

-Pues, hablé con tu padre, y me dio una llave para que entrara mientras dormías y poder hacerte el desayuno. Pero como te despertaste antes...

Og, que mono. Incluso con sangre goteando está sumamente sexy.

Nota de la autora: Perdonar por la brevedad del capítulo y lo que he tardado en actualizar, pero no he tenido tiempo de nada. Disculparme de verdad :(

Y sinceramente, tampoco he tenido mucha inspiración... Así que seguramente os parezca aburrido, culparme, sí, lo merezco