Cap. 18 -He seguido las tuyas.

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14 de Julio de 2012

No me quiero mover de la cama. No vuelvo a trasnochar.

Me encuentro sola en la cama, tal vez estén ya todos abajo desayunando. Pero, ¿Trey no me ha despertado?

Bajo y... ¡Exacto! -Buenos días chicos. -Digo algo molesta ya que absolutamente todos están desayunando.

Me siento al lado de Trey, que hay un sitio libre. Le doy un beso en la mejilla pero él sigue comiendo su tostada como si nada. Puede que esté molesto por anoche... Pero, no hice nada, no es justo. O seguro que son tonterías mías. Sí, será eso.

******

-Bueno, ¿entonces que hacemos hoy, chicos? Derek y yo queremos una tarde para nosotros... -Dice Alizz mirándole y guiñándole el ojo. No se cortan ni un pelo.

-Ya... Pero Sofía y yo no tenemos posibilidad de hacer tantas cosas como vosotros, parejita. -Añade Axel.

-¿Cómo que no? -Salta enseguida Trey. -Nunca es tarde para empezar una relación.

-Buag. -Responden al unísono Sofía y Axel mientras se miran mutuamente con cara de asco.

-Además, a mí me gusta otra persona. -Prosigue mi amigo del pueblo.

-¿Y quién es? -Vuelve a saltar Trey un poco más alterado.

Axel simplemente se queda callado, me mira y mira al suelo sin ser capaz de levantar la cabeza. Estaba claro.

En ese momento Trey se pone de pie enfadado, nos echa una mirada de odio a los dos y sube escaleras arriba.

-¿Qué acaba de pasar? -Mi mejor amiga tan ingenua como siempre, aunque parecía que los demás tampoco lo llegaban a entender, solo nosotros tres. Y lo prefiero. -Será mejor que sigamos mi plan. Derek y yo vamos a investigar el bosque de al lado del lago, ¿vale?

-Como queráis. Hay juegos de mesa en el ático. Axel y yo probaremos para que juguemos todos esta noche. -Sigue Sofía.

Me levanto y me voy a la habitación sin decir nada, donde suponía que encontraría a mi querido novio.

Llamo a la puerta. -¿Trey? -No hay respuesta y abro por mi cuenta.

Está sentado en la cama mirando a la ventana.

Me acerco, y le acaricio la espalda. Se gira agarrándome de la mano que posaba sobre él. Me mira directamente a los ojos. Los tiene llorosos. -Dime que eres solo mía. - Le miro. Está sin fuerzas. Yo no puedo verle así.

-Adel Isabella Williams es todo tuya. -Susurro.

-¿Isabella? ¿En serio ese es tu segundo nombre? -Se echa a reír. Parece que todo se le ha pasado de golpe.

-Idiota. -Le doy un pequeño puño en el brazo y me echo a reír con él. Su risa es pegadiza.

Tras un suspiro paramos de reír quedándonos a un centímetro de distancia. Nuestros labios se juntan como si fuera la primera vez. Nos acariciamos, nos metemos bajo nuestras sábanas y creo que fue lo mejor que hice nunca.

-Gracias. -Respondo mientras estábamos tumbados los dos en la cama y abrazaba su gran cuerpo desnudo y definido.

Me sonríe y me besa la frente. -Gracias a ti.

*****

Cae la noche, y nos juntamos todos de nuevo en el salón. Sofía y Axel han estado toda la tarde probando todo tipo de juegos que había, y al parecer, han escogido "lo más divertidos". Lo digo entre comillas porque me estaba aburriendo como una ostra.

-Oye, ¿Y si jugamos ahora a Mímica? -Propone Alizz algo cansada de dibujar con el Pictionary, o de perder, ya que ni Derek ni ella tenían ni idea de dibujar.

-¿Y qué os parece el Caso Caos? -A mi chico siempre le han gustado las investigaciones y asesinatos.

Sofía tiene cara de idea, y de momento no era que me gustaran mucho las que tenía. -¡Y podríamos cambiar de parejas de juego! ¡Sería tan guay! Hacemos papelitos con nombres, y cada uno cogemos uno. ¡Yo los hago!

Lo que yo decía...

-Yo quiero ser la primera, que me hace ilusión. -Dice Alizz. Coge un papelito y... -Uy, me ha tocado con... Axel.

Él me mira y con cara de 'lo que me ha tocado'. Yo disimulo y miro a otro lado evitándole. No quiero más problemas con Trey, aunque él parece contento y sigue la iniciativa. -¡Me toca! - Coge un papel. Lo abre, ya que está doblado. -¿Derek? -Parece que no le ha gustado mucho la elección al azar.

-Mmmm está bien, entonces nos ha tocado juntas, Adel. -Sofía me sonríe. Creo que me va a dar un subidón de azúcar con tanta dulzura.

Comenzamos el juego. Axel lee el caso. -Bien, aquí pone que tengo que elegir un asesino, así que cerrar todos los ojos y a quien toque, será.

Cierro los ojos, pero no, no me toca.

-Ya podéis abrirlos. La pareja uno somos Alizz y yo, la dos vosotros chicos. -Señala a Derek y Trey. -Y la tres Sofía y Adel. Según esto, a una persona de la pareja tres la toca elegir el lugar de la casa donde pasó. ¿Quién de vosotras quiere, chicas?

Sofía y yo nos levantamos y nos vamos a decidirlo para que los demás no sepan quien de nosotras lo elige. -Adel, elígelo tú que yo soy muy mala para estas cosas. Además, prefiero no saberlo e investigarlo. Me encanta investigar. -Yo asentí sin más.

Tras algún tiempo y pistas de juego, cada uno individualmente y por reglas del juego, estaban investigando por la casa. Yo me encontraba en la cocina, porque era el lugar que había elegido de asesinato.

El primero que apareció por allí y tan pronto que me sorprendió, fue Axel.

-¿Cómo has hecho ya todas las pistas para llegar aquí? Es muy pronto. -Pregunté sorprendida.

Él sonrió. -No he seguido las pistas del juego.

-¿Entonces?

-He seguido las tuyas. -Mi cara era una interrogación. -Sofía es mi mejor amiga, y sé de sobra que la encanta averiguar las cosas. No querría pedirse elegir lugar. Por otro lado, la cocina me trae recuerdo de anoche, de nosotros.

En realidad, no lo había elegido por eso, por nada en especial.

-Oh. -Fingí que sí.

-Adel, lo siento. No quiero que te metas en problemas con Trey por mi culpa.

-Axel, no impor...-Me interrumpió.

-Déjame terminar. No quiero que te metas en problemas, pero me gustas. Y eso no puedo ocultarlo.

-En serio Axel para. Solo fue un fin de semana.

-No digo que esté enamorado ni nada de eso. Y... No te conozco de un fin de semana. Me crié contigo, Adel. Éramos novietes. -Nos reímos.

-Será mejor que vayamos con los demás. No quiero seguir jugando.

-Adel...

-No.

Llamamos a los demás, y les conté que lo sentía mucho pero me encontraba demasiado mal como para seguir y era tarde. En realidad era una excusa.

-Uf, menos mal, porque yo era la asesina y lo estaba pasando verdaderamente mal. Me pongo muy nerviosa. -Confiesa Alizz.

Sin batería #Parte1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora