Twelve

465 55 39
                                    

Pov Eun Jo

25 de Septiembre del 2015
6.00 PM

Miraba la tela negra con odio y curiosidad al mismo tiempo, era el mismo color el que me incitaba pero que seguramente me llevaría al inminente peligro.

Lancé mi cuerpo hacia mi cama de nuevo renegando conmigo misma.

¡Ni lo pienses!

Casi podía escuchar un grito en mi cabeza.

Justamente esa noche era la fiesta de bienvenida de Tao en la empresa, él cual había prometido al piso completo de una barra libre, bocadillos y un excelente ambiente.

Tendría que ser idiota para querer asistir a aquel evento.

¿Pero qué hacía en ese momento?

Contemplaba un putivestido colgado en mi closet ideando la forma de ir sin que todo acabara siendo un desastre.

Bien podía quedarme en mi cuarto sin generar ningún problema sin embargo si me quedaba más tiempo encerrada era probable que acabara haciendo algo peor...

*
9.00 PM

Suspiré y apreté mi pequeña bolsa mientras mis tacones hacían ruido en pasillo decorado con un exceso de cristales y luces al fondo dejando ver personas de igual forma.

Imprudente
Irreverente
Estúpida

No se me ocurrían otras palabras para describir la clase de persona que era en este momento.

El lugar estaba rebosando de personas, pero aun así no me tarde nada en encontrar las mesas reservadas y al resto de la oficina. El piso era completamente de cristal simulando peceras, añadiendo que había varias tarimas con mujeres bailando con vestuarios exóticos, un lugar de lo más bizarro que había visto.

Antes de llegar Baekhyun reparo en mí y pude sentir su mirada de desaprobación, la cual pasé por alto y salude a mis compañeros que también me miraban confundidos.

- ¿Tú quieres morir verdad? - preguntó Baek

- Cálmate. - le dije rodando los ojos mientras tomaba un vasito de la infinita mesa de alcohol. - Ten, tomate un chupito.

- Eun Jo eso no... - intentó decir, pero puse un shot en su boca.

La mejor manera de callar a Baek, el alcohol.

Después de unos minutos, mi mirada viajó cuidadosamente alrededor de todo el establecimiento sin encontrar señales del motivo de esta fiesta, había algo definitivamente extraño y no era debido a Tao.

Tomé un chupito restándole importancia.

Quizás estaba demasiado sobria.

- Raro, el jodido de tu jefe no ha hecho aparición. - añadió So Min antes de darle un trago a su cerveza.

- Ya debería estar aquí empinándose una botella. - bufo Baek ya con las mejillas rojas de tanto vodka.

- Lo mejor sería que nunca llegara. - dije esperando a que mis palabras por una vez en la vida se cumplieran.

En ese momento llegó una señorita con un martini depositándolo con cuidado enfrente de mí.

- Esto es para usted señorita Kang. - esta hizo una reverencia.

- Yo no ordene ninguna bebida. - la detuve antes de se fuera.

- El señor Kim la envía a usted. - dijo finalmente, quise decirle que se llevara la copa, pero ya se había ido.

Die 死 Chen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora