El calor de tu sonrisa [TERMINADA]

Capítulo final

Una semana después Ana ya estaba totalmente recuperada, todavía tenía alguna pesadilla pero lejos quedaban ya esos ataques que le daban. La herida también le había cicatrizado, aunque todavía le dolía un poco. También habíamos hecho las presentaciones oficiales como pareja ante nuestras familias. Ambas quedaron encantadas con la noticia y nos felicitaron con mucha alegría. Todos nos decía que pegábamos mucho y qie se notaba que nos queríamos.

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Casi cinco años después de aquello puedo decir que soy plenamente feliz. Ana y yo nos casamos hace unos meses, ahora estamos esperando nuestro tercer hijo. Tenemos una niña de cuatro años, Dana, y un niño de un año y medio, Lucas. Todavía recuerdo cuando Ana me dijo que estaba embarazada y después ya solo recuerdo tener a Dana en brazos, es la viva imagen de su madre. Y el pequeño está todo el día de un lado para otro. Ahora Ana no está trabajando para ocuparse de los niños, solo de vez en cuando hace alguna actuación y yo tengo dos obras de teatro en marcha. Nunca pensé que pudiera ser tan feliz, tengo la mejor familia que podría tener. A mi lado tengo a la mujer más maravillosa, mi compañera de vida, mi verdadero amor, la mujer de mi vida... No sé como he podido estar tanto tiempo sin ella, Ana me aporta muchísimas cosas. Me apoya, me comprende, me hace reír en los peores momentos y se encarga de regalarme los buenos. Admito que no todo ha sido de color de rosa, hemos tenido nuestras peleillas y nuestros desencuentros, pero lo importante es que los hemos superado y gracias a eso la relación se ha afianzada. No todo puede ser bonito siempre, tanto ella como yo sabemos que muchas veces discutiremos pero será mayor el número de veces que nos reconciliemos. Por suerte siempre uno acaba cediendo y acabamos arreglando las cosas, a veces a las dos horas de discutir, a veces tres días después.. pero siempre encontramos el momento para ponernos en el lugar del otro y entender su posición. Siempre encontramos el equilibrio y la paz para que todo siga funcionando a la perfección.