Sobre tu mirada •|profesora y alumna|•

Regreso inesperado

Gire nerviosa para toparme con la persona que menos pensé ver en ese momento

-¿Luisa?- pregunté fría por la situación, me sonrió igual que como lo hacía siempre, se deben de preguntar ¿quién es ella?, Luisa es mi ex novia, "mi primer amor" yo creía estar enamorada de ella hasta que un día sin ningún motivo se marchó sin decirme nada, llore por días completos, la metí demasiado en mi vida y ella simplemente se marchó sin decir ni un adiós, la llegue a odiar por haberme dejado así, pero con el tiempo se fue borrando de mis pensamientos hasta que llegue a ya no lamentar su ausencia, no puedo creer que la tengo justo enfrente después de estos dos años, cuando ella se fue yo tenía 15 años y ella tenía 19, no puedo negar que se ve mucho más atractiva ahora, su cabello es ahora más corto pero igual de negro, sus ojos verdes tienen algo diferente pero no distingo que, estuve estudiándola por un momento cuando a mi mente vinieron todos los días que sufrí por ella, llego a mi mente la escena de cuando llegue a su departamento a buscarla para ir a cenar y el dueño del edificio me dijo que se había marchado del país, todos los días que no soltaba mi celular para nada esperando una llamada de ella, sentí como la furia se extendió por todo mi cuerpo, le regale mi peor mirada y me puse de pie para alejarme de la barra y buscar a mi amiga con la mirada, no veía muy bien a parte que las luces y la gente no apoyaban a mi búsqueda mis ojos estaban a punto de derramar lágrimas y solo alcanzaba a ver borroso, vi a Claudia bailando con un tipo en la pista, la iba a sacar de ahí y me iba a odiar ni modo, cuando empecé a caminar directo a Claudia sentí unos brazos apretarme de la cintura con fuerza

-Perdóname por favor Danna, yo tuve que irme nunca quise dejarte de esa manera, no sabes cuánto te he extrañado, te pienso día y noche mi amor- dijo Luisa en mi oído, pero yo estaba muy dolida no quería escucharla, aparte sus brazos bruscamente y gire a verla, estaba llorando ¿Qué fue lo que me perdí, si ella se largo no yo?

-¿Qué es lo que quieres?, no entiendo cómo puedes acercarte a mí después de la mierda qué hiciste- hable con enojo -Tienes idea los días que pase después de haberte ido a buscar y enterarme que habías salido del país por no sé qué razón, las noches invadidas de tus recuerdos lastimándome como si estuvieras ahí presionando justo en la herida que más me dolía, tu ausencia, tu forma de irte sin avisar, sin importarte lo que yo sentía- le solté todo y me sentía más relajada, todo esto era algo que seguía cargando y solo me lastimaba, Luisa se veía arrepentida y sus ojos no paraban de derramar lágrimas yo la miraba atenta como si intentara descifrar cuál era la razón de su partida, me mantuve pensando sin importar las personas a mi alrededor, la música fuerte, las luces de colores y la chica que fue mi primer amor justo frente a mi llorando como niña pequeña, empezó a calmarse poco a poco y me tomó del brazo decidida me arrastró fuera de ese lugar. Cuando llegamos fuera del sonido la mire confundida

-¿Se puede saber, qué mierda te pa- no pude terminar porque sus labios me lo impidieron, me besó con desesperación y aún que mi cerebro me estaba obligando a que la empujara, no lo hice, deje que me besara y se sentía exactamente como antes, me sentía la misma chica inexperta de hace dos años, me estaba maldiciendo mentalmente porque después de haberse marchado estuviera permitiendo que me bese de nuevo, el beso termino y yo estaba muy confundida, tenía miles de sentimientos en el pecho y ahora no sabía reaccionar

-Déjame explicarte porque me alejé de ti de esa manera, solo escúchame y si después de haberme escuchado sigues decidiendo que no quieres verme, de nuevo me alejare, ¿si?- preguntó y puso un mechón de cabello detrás de mi oreja, aparte su mano y asentí, aún que no quiera escucharla la duda del porque se fue me invade aún

-Voy a avisarle a Claudia que me iré- asintió -¿Puedes llevarme tu a casa?-

-Si, si yo te llevo descuida Dan- me tense al escucharla llamarme Dan, aún me cuesta un poco tenerla aquí, cualquier muestra de afecto me descarrila, al parecer lo notó porque se disculpó. Entre buscando a mi amiga con la vista, estaba en la barra con el mismo chico con el que bailaba hace rato

-Claudia me voy, me topé con una vieja amiga y me llevara a casa, estoy un poco casada-

-¿Qué amiga?- me vio con los ojos entrecerrados como si estuviera celosa, me reí de ella -No te rías idiota, pobre de ti que me cambies, por esta vez te perdono pero me llamas en cuanto llegues a tu casa ¿si?-

-Si descuida yo te marco- me giré para salir de aquel lugar

-Ah Dan espera- mire a mi amiga esperando a que dijera algo -no te presente a mi amigo- dijo sonriente -el es Mauricio- dijo señalando a su "amigo" le sonreí y me presenté con él, se ve buena persona espero que sepa valorar a Claudia si no yo me encargo de cortarle lo que trae en el pantalón. Salí de el lugar ya cansada de la gente y los gritos, me encontré con Luisa esperándome recargada en su auto, me hizo señas con las manos para que me acercara a ella mientras abría la puerta del copiloto para que me subiera

-Gracias- dije fría

-No me las des- dijo sonriendo y cerrando mi puerta para ella tomar su lugar justo al lado de mi, duró al menos 5 minutos en silencio me imagino que organizando todo lo que tenía que decirme

-Lo hice por ti- habló de repente

-¿Por mi? ¡Oh! Gracias Luisa que considerada siempre quise que me rompieran el corazón- solté con sarcasmo y asesinándola con la mirada

-Espera, escúchame no me interrumpas- me miró sería y yo simule un cierre en mis labios

-Mis pensamientos estaban tan revueltos, te miraba y confirmaba que en definitiva estaba enamorada de ti y tú sabes que yo no era de esas chicas enamoradizas que están dispuestas a vivir una perfecta historia de amor, yo era una completa perra que solo se acostaba con las chicas y las mandaba al caño, pero cuando descubrí lo que sentía por ti me asuste, no supe reaccionar, me aleje porque me conocía y tenía miedo lastimarte- suspiró, yo la veía pensativa -se que fue cobarde de mi parte y fue una acción estupida porque me alejé para no lastimarte y aún así lo hice- me miró con lágrimas en los ojos, se notaba que era sincera ya no siento el mismo enojo que sentía hacia ella pero yo deje de amarla, con el tiempo todo se pasó -se que fui una completa imbecil pero, créeme que estoy arrepentida, entiendo que no quieras nada conmigo pero por favor solo perdóname, por favor- dijo casi como suplica, ya sentía mis mejillas húmedas por las lágrimas que salían sin permiso de mis ojos

-Fueron momentos difíciles y no lo voy a negar si fuiste una imbecil, pero todos cometemos errores- hice una pausa, las dos mirábamos al frente -algunas personas errores más grandes y pendejos- dije dirigiendo mi mirada hacia ella, volteo hacía mi un segundo ya que iba manejando pero su mirada era de disculpas, me reí de ella y vi confusión en su rostro -pero si te perdonó aún que seas idiota-

-No sabes cuánto me alegra escuchar eso- paró el carro en frente mi casa y giro en su asiento para verme y darme una sonrisa

-Bien, me voy porque muero de sueño- le di un beso en la mejilla, abrí la puerta del auto y cuando iba a salir me jaló del brazo

-No, espera ¿podemos ir a comer el lunes?- me preguntó con temor

-Si, pasa por mi cuando salga de la escuela- respondí sonriendo, le di mi número, ella imitó mi acción y ahora sí salí del auto, cuando iba a entrar a mi casa voltee, le dije adiós con la mano y entre a mi casa.

Estoy ya en mi cama después de llamarle a Claudia y decirle que había llegado sana y salva, pensando en todo lo qué pasó y fue muy extraño, últimamente mi vida aburrida y rutinaria a tenido cambios drásticos desde que conocí a mi profesora, que por cierto con todo lo qué pasó hoy no tuve tiempo de pensarla, es raro que solo con pensarla siento un cosquilleo en mi estómago, ahora estoy más confundida que antes, aparece mi primer amor totalmente arrepentida de sus actos en medio de mi conflicto con la mujer que me vuelve loca y tengo dudas de que hacer, seguir caminando sobre la cuerda floja hacia mi profesora o permitirme reanudar algo con Luisa, caí en sueño profundo pensando en las dos mujeres que se alojan en mi corazón.

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