-Bien -dijo Kayla una vez más -En realidad si conozco a Maximilian de antes.
Por fin había accedido a explicarle a su hermana media verdad sobre Max, quizá eso ayudaría a que dejara de hostigarla con tanta pregunta.
-¿Y por que no me dijiste lo mismo la primera vez que pregunté? -la voz de Scarlet sonaba fastidiada y cansada -Estoy harta de que todos me oculten lo que saben de él.
-Es que en realidad él no es tan malo, es su padre el problema.
-¿Por que?
-¿Recuerdas que te hablé de un hombre que era mucho más poderoso que Urda?
-Es el padre de Max -dijo Scarlet -¿Cómo es que Max oculta algo así?
-Él no lo sabe -aquí vienen las mentiras -Lo último que supe de Max con su padre es que estuvieron un tiempo controlando sus empresas desde Europa, por que William no podía estar en Estados unidos.
-Quizá de ahí lo conoce Jason, el hizo su maestría en el extranjero.
-Bueno, pero aunque Maximilian no sepa de que van algunos de los negocios de su padre, no es bueno que estés cerca de él.
-Bueno, ahora que se un poco más, tal vez tengan razón, pero si Max no esta involucrado, ¿de donde lo conoces?
Kayla se quedó pensando.
-Lo vi en algún periódico a lado de su padre, por eso sé quien es.
Scarlet no creía del todo las palabras de su hermana, pero si juntaba la información que le habían dado sus hermanos -que era casi nula -Y lo que ahora le decía su hermana, entendía mejor la preocupación de todos, pero Jason, ¿como podría enterarse de algo así?
-Es por eso que William le dejó la empresa a Max, por que el ya no podía regresar.- Finalizó Scarlet. -Ahora debo irme corriendo a la oficina, debo hablar con mi hermano.
-Esta bien, yo esperare a que lleguen mis cosas, se las pedí a mi ama de llaves ayer por la tarde.
-Trataré de llegar temprano, tengo que terminar de planear una fiesta que daremos la semana que viene.
-¿Para Hiro Sekemoto? -cuestiono Kayla
-Si, ¿Cómo lo sabes?
-Lo vi en las noticias, Hiro ha ido un par de veces al Palace, pero nunca he estado con él, es muy viejo.
-Tienes que contarme más de ese negocio tuyo, me has dicho muy poco.
-Algún día. -dijo Kayla sonriendo.
Scarlet salió y ella se dio una ducha.
Eran las seis de la tarde de un viernes, si fuera un viernes común se estaría preparando para ir al Palace, pero no podía ir, seguro Urda estaría ahí esperándola.
Miró la caja de madera que le había hecho llegar Olga y la abrió, observo su antifaz de encaje, a pesar de no haber sido la ocupación que cualquiera hubiera elegido, se sentía orgullosa de lo que había logrado.
No quería perder su negocio, pero no sabía como recuperar su vida.
Se puso el antifaz y camino hasta ponerse al frente de un espejo, tantos empresarios que seguro conocían a Scarlet habían pasado la noche con ella, ¿pensarían igual que Matt?, que en realidad Scarlet Black se vestía de gala todos los viernes para ir a acostarse con un hombre a cambio de dinero.
Incluso eso podría haberle quitado su hermana.
Enojada con lo que veía en el espejo, la cara de Scarlet burlándose de ella, gritándole que nunca tendría un nombre, una cara para ella sola.
Tomo el teléfono que había en la habitación, Scarlet aún no llegaba, tendría que estar planeando su gran debut como publicista.
Marcó.
Espero tres timbres hasta que la voz de un hombre que no conocía la sacó de sus pensamientos.
-Diga.
-Quiero hablar con Urda -dijo poniéndose un pañuelo en la boca para modificar un poco su voz. -Es sobre Morgan.
-Un minuto -dijo el hombre y se escuchó a través de la línea como la comunicaban.
-Urda al habla.
-Su chica estará en la fiesta de Marketing In Pro. Para Hiro Sekemoto.
Cortó la llamada de inmediato, estaba hecho.
Las manos le temblaban pero no podía dar marcha atrás, cambiaría a Scarlet por su libertad, eran idénticas, podría fácilmente usurpar la identidad de Scarlet.
Ahora debía hacer que la llevara a ea fiesta, miró una vez mas su antifaz, ya sabía como hacerlo.
Si quieres saber mas sobre mi y mis otras obras, únete a nuestro facebook.com/groups/loslibrosdeValenWattpad/
ESTÁS LEYENDO
Lady Escarlata
ChickLitScarlet Black... ¿Necesita un hombre millonario? Para nada, ella puede trabajar y lo hace de maravilla. ¿Necesita un hombre obsesivo y dominante? ¡Ja!, ella solo obedece a sus padres (a veces) ¿Necesita un Playboy "todas mías" con aires de grandeza...