Lady Escarlata estaba revisando sus estados de cuenta desde su laptop, números iban y venían en su pantalla, estaban los retiros que habían sido realizados por las compañías de servicios e incluso esa gran suma que había pagado por un lindo vestido para la noche del viernes que se aproximaba.
No había ningún ingreso desde hacía dos semanas en esa cuenta, debería empezar a ahorrar, ya que su belleza por la que tanto pagaban en ese momento, algún día se terminaría.
Cerró su computadora ya cansada de hacer cuentas y se dirigió hacia el cuarto de tv de su apartamento.
Encendió la pantalla que usaba en muy pocas ocasiones y se dispuso a ver el noticiero de la noche.
Una bomba en siria.
Una nueva tontería de la boca del nuevo presidente electo en su país. Ella había votado por Hilary.
Desfiles de moda.
Premios.
Y por fin, algo interesante...
"La empresa de publicidad mas grande de Estados Unidos Marketing In Pro. anuncia el evento del año, la presentación de la marca de ropa de Sekemoto Company."
Claro -pensó Lady escarlata -Esa es buena publicidad.
"Este evento estará a cargo de nuestra querida Scarlet Black, gran amiga de esta cadena y será su primer evento como relacionista pública de la empresa de su familia.
Fotos de la joven publicista empezaron a desfilar en la pantalla, y la mano de Lady escarlata apretó con fuerza el control remoto.
"Esa no es la única noticia de la familia Black -continuó uno de los presentadores -Se rumorea que ya empezaron los preparativos de boda del hijo mayor del clan, ¿Será que Jason Jr. empezará a agrandar la familia?"
Una imagen del clan Black en la pantalla fue la gota que derramó el vaso, Lady escarlata lanzó el control remoto al otro lado de la habitación justo después de apagar la tv.
No soportaba nada que tuviera que ver con los Black, tenía años detestándolos y viéndolos ser tan felices que cada que sabía algo nuevo de la gran familia, se sentía como una manchita diminuta en el universo y eso la molestaba.
Aún recordaba la primera vez que había visto una foto de la menor, la había odiado desde ese momento.
Ella era mucho mejor, había construido una vida con sus propios medios y no andaba presumiendo lo que tenía, era amable y nada prepotente como esos pedantes ostentaban ser.
Caminó en la oscuridad de su piso, iba directo a su habitación pero recordó que había dejado el móvil junto a la laptop y lo necesitaría para levantarse a la mañana siguiente.
Fue por el, pero la curiosidad la tentó a buscar más información de Scarlet Black.
Abrió su ordenador y se dirigió a Google "Scarlet Black" escribió y rápidamente apreció una página en wikipedia, noticias recientes y fotos de la muchacha.
Dio click en una de las imágenes, y la observo detenidamente.
Ni si quiera era tan bonita -se dijo a si misma – Todo lo que tenía era por que mami y papi se lo daban; la escuela, el auto, el trabajo... Nada era suyo.
Lady Escarlata se consideraba una mujer educada, no había crecido en una jaula de oro, ni mucho menos había ido a la universidad.
Eso era lo que más detestaba de la "señorita" Black, y de todos los niños ricos en general, que nunca habían sentido la necesidad de trabajar para llegar a donde estaban, ellos simplemente había nacido ahí.
De nuevo cerró su computadora y fue a acostarse en su cama.
Una lágrima cayó por su mejilla pero rápidamente la limpió.
No necesitaba de un apellido para ser alguien, quizá su empleo no era el mejor reconocido pero era algo que la mantenía como una princesa.
Una princesa sin reino.
Por ahora.
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Lady Escarlata
ChickLitScarlet Black... ¿Necesita un hombre millonario? Para nada, ella puede trabajar y lo hace de maravilla. ¿Necesita un hombre obsesivo y dominante? ¡Ja!, ella solo obedece a sus padres (a veces) ¿Necesita un Playboy "todas mías" con aires de grandeza...