4. Discusión.

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Elise Peters.

Cuando empecé a maquillarme me di cuenta que tenía una marca en el cuello de lado izquierdo, en el mismo lugar que Blake me besó.

Me hizo un gran chupetón.

Intenté ocultar la marca pero se notaba, y si la tapaba por completo se notaba mucho el maquillaje, así que la cubrí lo más que pude y me dejé el cabello suelto.

Blake se había ido antes a la empresa por petición mía, cuando yo me fui para la empresa pasé por el desayuno a la cafetería de enfrente, compré dos cafés y dos rosquillas, me dirigí a la empresa y después de saludar a Hayley subí al elevador y presioné botón del décimo piso, al llegar me dirigí a la oficina de Blake y abrí la puerta, encontrando a Vincent sentado frente a Blake.

—Hola —dije mientras caminaba hacia Blake.

—Hola —sonrió y se puso de pie.

—Te he traído algo —extendí los cafés y las rosquillas y las agarró.

—Gracias —se acercó y besé castamente sus labios—. Vincent, ¿gustas algo? —preguntó en su dirección.

—No, gracias, acostumbro desayunar eso en mi cama —dijo con burla.

Luché con todo para no voltear a verlo y hacerle notar que su comentario estúpido me había molestado.

—Bueno. Ven, sientate —dijo lo último viéndome y se movió para que me sentara en su silla.

Blake jaló la silla libre que tiene frente a su escritorio y se sentó a mi lado, giré la silla hacia él y me extendió un café y una rosquilla.

—Gracias —dije y empezamos a comer.

Vincent aún sigue aquí, siento como su mirada esta fija en mí hasta que Blake dice algo y él voltea a verlo.

—Te ensuciaste —dijo Blake y señaló mi hombro izquierdo.

Volteé hacia abajo y vi que había algo de pan en mi cabello, lo sacudí y me lo eché hacia atrás del hombro para sacudir mi blusa.

—¿Ya no tengo más? —pregunté y Blake negó con la cabeza.

—Con su permiso —dijo Vincent de la nada, usando un tono bastante molesto y se puso de pie para después salir de la oficina.

Blake frunció el ceño ante la actitud de Vincent, volteó a verme y me encogí de hombros.

Terminamos de desayunar y poco después Hayley llamó a Blake y le dijo que había alguien buscándolo, le pregunté a Blake sobre quien era y me dijo que era la clienta con la que está cerrando un trato.

Cuando él se fue, me senté en el sillón y agarré mi celular para distraerme, cosa que no duró mucho ya que la puerta de la oficina de Blake se abrió y pensé que era él, pero era Vincent y se veía bastante molesto.

—¿Qué se te ofrece? —pregunté aún sentada.

Él empezó a caminar hacia mí y me puse de pie, rodeé la mesa de centro y corrí hacia la puerta, agradeciendo que no me traje tacones, pero aún así me alcanzó antes de que pudiera abrirla.

—¿A dónde ibas? —me volteó hacía él, me acorraló contra la puerta y se agachó hasta quedar cara a cara.

—Me estás lastimando.

—No te estoy tocando —me di un golpe mental al darme cuenta que era verdad.

—¿Qué quieres?

—¿Qué mierda traes en el cuello? —fruncí el ceño—. No te hagas la tonta,  Elise —y caí en cuenta de que me había descubierto el cuello cuando me sacudí la blusa.

Mi único amor. [Sin editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora