You make me strong.

Capítulo 30.

Kimberly llega a casa y da un portazo. Su prima está en la cocina, contemplando las instrucciones del horno, y esperando algún tipo de milagro para saber cómo funciona. Observa a Kimberly detenidamente. 

-¿Dónde estabas? ¿Te encuentras bien? - su tono no es de enfado, sino de preocupación, y eso desconcierta mucho a Kim. 

-¿Se puede saber qué cojones está pasando?

-¿No te acuerdas de nada de lo de anoche?

-De absolutamente nada. 

-Pfff...-Dacota se levanta y se coloca en frente de su prima. - Abigail, Denise y Abbey te echaron algo en la bebida. Y... Bueno... Te acostaron con Sven, para que Ashton pensara que tú... Ya sabes...

-Soy una estúpida. 

-No, no fue culpa tuya, no...

-Soy una puta estúpida. -Kimberly sube las escaleras, y se tumba en la cama. Llora, aunque no todo lo necesario. Solo quiere volver a España. Eso le recuerda a Marco. Seca sus lágrimas y enciende su portátil, con la esperanza de poder hablar con él por Skype. En cuanto lo ve conectado sonríe. 

-Hey, no te veo tan mal.- él está en pijama, Kim ni reconoce esa casa, no es la de Marco, desde luego.

-Eso es porque no estás en Irlanda.

-Ojalá estuviera allí. ¿Has llorado?

-No. ¿Y tú?

-Sí. - Marco suspira, y mira hacia abajo. 

-¿Dónde estás?

-En casa de mi abuela. ¿Sabes que mis padres ahora me quieren mandar a Escocia?

-Es de locos. Somos sus problemas, y nos mandan a otros países. 

-Ya ves, ¿me vas a decir por qué has llorado?

-¿Te acuerdas del chico que me gusta? Vale, pues cuando mejor estábamos, aparecen tres hijas de puta, y ahora piensa que lo engaño con su mejor amigo y... ¿Me vas a decir por qué lloras tú?

-Mis padres están oficialmente divorciados. Mi hermano, a mi hermano lo mandan a un internado, y a mí con mi primo.  

-No estamos en nuestro mejor momento, eh.

-Nunca lo hemos estado, ¿no?

-¿Qué tal Anne?

-No he vuelto a ver a tu madre. Creo que está de vacaciones con tu padrastro por Francia o algo así, ¿no hablas con ella?

-Lo evito. Si hablara con ella, estaría de peor humor todavía.

-Ya. Barcelona es distinta ahora, ¿sabes?

-¿En qué sentido?

-Ni tú ni yo estamos, así que...

-Idiota. 

-¿Está tu prima por ahí?

-Está abajo. Mi tía se pasa el día fuera, trabajando, me siento como en casa. 

-Por lo menos...

-Por lo menos, a ellas les importo, no como a Anne, ¿no?

-No, no quería decir eso, Kim. 

-Lo sé, hoy no es mi día. 

-¿Cuándo es tu día?

****

Ash abre los ojos. Se tapa hasta la altura de la nariz, y se da media vuelta. Una vez más, su primer pensamiento, va hacia Kim. Lleva una semana sin verla. En una semana, los hoyuelos de Ashton no han sido descubiertos. Ni siquiera ha salido de casa. Se levanta y se viste. Oye cómo su hermana baila sin ninguna preocupación en el piso de abajo. Baja las escaleras poniéndose la camiseta, y se sirve su café.