Marco entra en casa después de despedirse de Abbey. Kim sonríe. Conoce esa cara.
La cara de "acabo de conocer a una chica".
Suena el teléfono. Dacota corre a por él. Kim está sentada en la mesa. Todavía sonríe. En frente, está Marco, aún más sonriente.
-¿Cómo se llama?
-¿Quién?
-La chica.
Dacota los interrumpe.
-Chicos, mi madre no viene a casa hasta dentro de dos días, ha habido un accidente múltiple en Hefire.
-Hago yo la cena.- Marco intenta cambiar de tema, aunque Kim lo sigue mirando de la misma forma, expectante. -Mejor voy a cambiarme de ropa, estoy calado.
Dacota los mira interrogante, y se sienta al lado de Kimberly.
-Kim, ¿puedo pedirte un favor?
-Mientras esté dentro de mis posibilidades...
-Verás... Drake me ha invitado a cenar esta noche en la playa con él, y...
-No hay problema, cenaremos Marco y yo. Pásatelo bien.
-¡Genial, voy a ver que me pongo!
-¡Pero si faltan casi tres horas...!- Dacota ya ha subido las escaleras, y se ha metido en su cuarto.
Kim decide aislarse por un momento, y sube a su habitación. Coge un libro y se tumba en la cama. Sin querer, sus párpados se caen poco a poco, y se acaba quedando dormida.
****
Abbey está sentada en el salón, en completo silencio.
Reflexiona sobre lo que ha hecho.
Ha besado a un desconocido, bueno, se llama Marco, pero es un desconocido. Es tan mono, tan atento, tan. "Para, Abbey". Entra en un conflicto interior, y no llega a nada en claro. Maldita adolescencia, malditas hormonas.
Ash está cansado. Tiene la tabla de Kim prácticamente acabada. Sube a su habitación, para despejarse. Se deja caer en la cama. Cae en la cuenta de que Kimberly está dormida. Salta la ventana sigilosamente, con complejo de pantera.
Es tan adorable cuando duerme. Se tumba junto a ella. Kim se da la vuelta, y lo abraza, aún dormida. Él sonríe. Estaría así toda la vida, desde luego.
Kimberly abre los ojos por fin. Siente la respiración de Ash muy cerca, y eso la relaja. El chico la abraza aún más fuerte, y sonríe.
-¿Sabes qué?
-Sorpréndeme.
-Esta noche te podías quedar a cenar, mi prima no está y mi tía no volverá hasta dentro de dos días.
-Vale, mi madre trabaja, y paso de estar solo con mi hermana.
-Ash, ¿todavía no has hablado con ella?- la chica se apoya en su pecho, y habla con voz melosa.
-Es que...
-Tráela esta noche a cenar con nosotros.
-Nos cortará el rollo, Kim.
-No importa, Marco también está.
-¿Marco? Ah...
-Ashton...
-¿A qué hora?
-A las ocho y media, si quieres.
-Claro, aquí estaremos.
ESTÁS LEYENDO
You make me strong.
Teen FictionLa madre de Kimberly la obliga a quedarse al menos un año en Irlanda, en el pueblo de su familia. Pese a que Kim no quiere dejar atrás Barcelona, y a su mejor amigo, acaba por ir. Allí se encuentra con un pueblo dividido en dos bandos, y un chico...