Tuya, hoy y siempre

¿Vamos para Neverland?

Cora bajó las escaleras hacia la parte baja del castillo, cerrada y escondida gracias a su magia. En cuanto llegó abajo, siguió caminando en línea recta por un pasillo hasta llegar a una zona oscura en la que había un guardia dormido sentado en una silla

« ¡Inútil!» dijo ella mirándolo con desprecio y moviendo sus dedos. Al hacerlo, él se convirtió en un insecto que aplastó rápidamente con el pie.

Después, abrió la puerta y pasó dentro, donde había algunas celdas. Se dirigió hacia una completamente oscura, llena de ratones y telas de araña. Era un sitio horrendo, como si escondiese animales allí dentro.

«Hola, querida» dijo dirigiéndose a la oscuridad, en la que, si esforzabas mucho la vista, se podía ver a una mujer de cabellos castaños enredados y con un vestido todo rasgado, de rodillas y con la cabeza sobre estas. Como respuesta solo hubo el silencio «No pareces muy cómoda...»

«¿Qué haceis aquí...?» pregunto ella siguiendo en la misma posición

«Vine a ver cómo estabas...sé que hace tiempo que no baja nadie...» contestó sarcásticamente Cora.

« ¡QUICE AÑOS! ¡ME LO ARREBATASTEIS TODO HACE QUINCE AÑOS!» gritó la mujer mientras se levantaba y avanzaba hacia los barrotes con rabia.

«Si lo piensas bien, no es tanto tiempo, querida... bueno...pero pensándolo bien, es tiempo suficiente para que Rumpel se enamorase de mí, después de tu terrible "muerte"» respondió ella subrayando la última palabra.

« ¡Monstruo! ¡No existe un pedazo de bondad en vos! ¡No tenéis corazón!»

«Oh, querida...tan ingenua... ¡pues claro que no tengo corazón! Solo sirve para destruirte a ti...por eso mismo sigues aquí, encerrada, ¡sin tu amor, sin tu hijo! Es un destino peor que la muerte...y aún peor...con tu corazón, destruyéndote poco a poco por no haber podido criar a tu hijo, o al menos poder decirle a Rumple que aún lo amas»

« ¿DÓNDE ESTÁ MI HIJO? ¿QUÉ HABÉIS HECHO CON ÉL? ¿Lo...lo habéis matado?»

« ¡Ah, no, no...no te preocupes...dejé que los cocodrilos de Neverland hiciesen ese trabajo por mí!»

« ¡No...NO, NO!» gritó Belle en llanto « ¿CÓMO PUDISTEIS...? ¡SOLO ERA UN BEBÉ! ¡DESGRACIADA!»

« ¡Contén tus palabras conmigo, sucia sirvienta! Mereciste todo eso, porque después de todo lo que pasé, realmente Rumpel me gustaba...y ¡apareciste tú para ESTROPEARLO TODO!»

« ¡RUMPEL Y YO NOS AMAMOS! ¡Y siempre vamos a amarnos! ¡No importa lo que habéis hecho para separarnos! Y cuando él lo descubra, vendrá a rescatarme y acabará con vos... ¡VOS SOIS UNA FALSA, EGOISTA Y NUNCA SABREIS LO QUE ES EL AMOR DE VERDAD!»

« ¡CIERRA ESA BOCA!» gritó Cora levantando una de las manos, haciendo que Belle comenzase a quedarse sin aire, sin ni siquiera tocarla. « ¡Él nunca lo va a descubrir! ¿Sabes por qué? ¡Porque vas a pasar el resto de tu vida en aquella maldita isla...sufriendo por no tener a nadie a tu lado! Disfruta de los ratones, en momentos como estos, son buenos amigos» dijo ella bajando la mano, haciendo que Belle volviera a respirar. Y se fue de allí cerrando la puerta con fuerza.

« ¡NO! ¡TE ODIO, TE ODIO! Quiero a mi hijo...» dijo ella desesperadamente, llorando, dejando que su cuerpo cayera en el suelo. «Rumpel, mi hijo...¡no!»

Flasback on

« ¡AAAAA! ¡Me duele mucho!» gritó Belle echada en la celda con una sirvienta delante de ella, en medio de sus piernas.

« ¡Empuja! ¡Solo un poco más! ¡Ya casi está fuera!»

« ¡AAAA....No, NO QUIERO QUE MI HIJO NAZCA ASÍ! ¡NO EN UNA PRISIÓN!» dijo ella llorando mientras hacía fuerza.