Romero | KookTae

03.

ADVERTENCIA: Presencia de comentarios machistas tanto de personajes como de lectores.
...

Jungkook ingresó a la cafetería y se quitó la capucha del abrigo que estaba utilizando, el cual se encontraba mojado debido a la fuerte lluvia de aquella tarde. Ni siquiera las tormentas impedían que Jungkook fuera a aquel café cada lunes, se había convertido en algo rutinario para él.

Se sentó en el mismo lugar de siempre luego de haberse quitado el abrigo, colgándolo en el respaldo del asiento, frotó sus manos y esperó a que fueran a tomarle el pedido. Una camarera se acercó a él, dedicándole una cálida sonrisa al igual que siempre, él le devolvió el gesto.

-Hola Momo -saludó Jungkook, frotando sus manos ya que estaban muy frías debido a la lluvia.

-Hola -saludó también ella-. Vaya día, ¿verdad?

-Sí, parece que no dejará de llover -el castaño miró hacia un costado, mirando a través de las ventanas-. Pero lo bueno es que no hay tanta gente por el clima.

-Sí, la verdad es que eso es un alivio -la chica suspiró-. Comenzar un lunes con poca concurrencia nos relaja un poco.

-Lo imagino, debe ser agotador para ustedes -Momo asintió ante lo que Jungkook acababa de decir-. ¿Te cortaste el cabello?

-Un poco -la castaña elevó sus hombros, sin darle mucha importancia-. Tu cabello luce diferente también.

-Sí, lo aclaré un poco.

-Te queda genial, también vi que Jimin cambió el color del suyo a uno rosa.

Jungkook asintió con la cabeza -Deberías haber visto la expresión de Yoongi hyung cuando lo vio así.

-¿Acaso no le gustó? -Preguntó sorprendida-. ¡Se ve genial así!

-De hecho le encantó, incluso se sonrojó -explicó él-. Creo que eso fue lo que le molestó.

-Éste chico... No demuestra mucho sus sentimientos -Momo suspiró-. Aún así, me gusta mucho la pareja que hace con Jimin, no entiendo porqué aún no son novios.

-Ni siquiera yo los entiendo.

Momo miró la libreta que estaba entre sus manos, recordando que debía tomar la orden de Jungkook -En fin. ¿Qué ordenarás hoy?

-De hecho... Voy a esperar a Hoseok.

-Entendido, volveré cuando él llegue.

Jungkook asintió con la cabeza, estando de acuerdo, y Momo se dirigió a tomar el pedido de otras personas que aún no habían sido atendidas.

Jungkook comenzó a revisar los mensajes que tenía en su celular para pasar el tiempo, respondiendo algunos y entreteniéndose demasiado con la conversación acerca de zombies que había surgido en el grupo que tenía junto a sus amigos, no pudiendo evitar reír de vez en cuando.

La campana que indicaba que alguien había ingresado sonó en el lugar, y Jungkook al divisar a la persona agitó su mano, indicando dónde se encontraba.

-Hola -saludó Hoseok, ubicándose en el asiento libre que estaba frente a su amigo-. ¿Te hice esperar demasiado?

-No mucho.

Al ver que Hoseok había llegado, Momo se acercó a ellos para anotar sus pedidos. Ella se sorprendió mucho al ver que Hoseok también había cambiado el color de su cabello a naranja, y ellos les explicaron que habían ido todos juntos a la peluquería. Momo los felicitó por el cambio, diciéndoles lo geniales que se veían y provocando sonrisas por parte de ambos chicos.

Los dos pidieron café, Jungkook prefirió que fuese sin azúcar, y también ordenaron un muffin de tamaño grande para cada uno.

-Lamento haber tardado en llegar.

-No te preocupes, hyung -el castaño le sonrió, intentando aliviarlo-. No esperé mucho tiempo.

-Eso me hace sentir mejor -suspiró Hoseok-. Es solo que... tuve un problema, y cuando me fijé en el horario vi que estaba llegando tarde y me apresuré en llegar para que no te marcharas.

-¿Un problema? -Jungkook frunció el ceño-. ¿Qué sucedió?

-Mi ex -Hoseok recostó su espalda en el respaldo de la silla, echando la cabeza hacia atrás. Claramente estaba cansado-. Fue a mi casa, y me pidió que regresara con ella.

Jungkook se quedó un momento en silencio, analizando la situación -¿Y tú que le dijiste?

-Claro que le dije que no, la muy zorra me engañó.

Ambos continuaron hablando de la perra ex-novia de Hoseok, él había decidido llamarla así. Momo regresó con sus pedidos para luego marcharse y seguir trabajando. Luego de hablar de los problemas que Hoseok había atravesado con su ex, Jungkook decidió contarle que había decidido mudarse con Jin, por lo que su amigo lo felicitó y se alegró por él.

La campana sonó, y Jungkook y Hoseok estaban tan sumergidos en su charla que ni siquiera se habían fijado en quién acaba de llegar.

-Hola -saludó una voz gruesa a ambos, interrumpiendo la conversación.

Ambos miraron al portador de aquella voz, y Hoseok se alegró al ver a la persona, mientras que Jungkook se sorprendió. Era el chico que le había dado el sobre con dinero a Jimin, el chico del aroma a romero. Su cabello estaba algo mojado debido a la lluvia, la cual acababa de cesar un poco.

-¡Taehyung! -Exclamó Hoseok, tan sonriente como siempre-. ¿Qué haces aquí?

-Vine a comprar un café para llevar -respondió el chico, luego miró a Jungkook, provocando que éste tragara saliva, nervioso-. Disculpa, tú estás ayudando en Matemáticas a algunos alumnos, ¿verdad?

Jungkook asintió con la cabeza -Sí.

-Estoy teniendo algunos problemas con esa materia. ¿Podrías ayudarme tú?