Romero | KookTae

19.

Jungkook se llevó el café que Momo le acababa de entregar a los labios, observando el lugar donde se encontraba. Estaba en el estudio donde Namjoon y Yoongi trabajaban, ya que luego de que sus amigos le insistieran tanto, al fin había aceptado grabar una canción para ellos. Quizás, si eso funcionaba, sería el rostro del proyecto que sus mayores estaban preparando.

En dos días acabaría el colegio, así que ya no tenía nada de tareas, y en su tiempo libre había comenzado a ir al gimnasio como pasatiempo. Además, al no tener nada programado para su futuro, trabajar prestando su voz para dar vida a las canciones de Namjoon y Yoongi no sonaba nada mal.

Las risas de sus amigos llamaron su atención, así que volteó para verlos. Jimin estaba de pie, charlando animadamente con Hoseok y Momo, quienes estaban sentados juntos en un sofá negro. Ambos estaban allí sólo para pasar el tiempo, ya que luego se marcharían juntos y cuando los demás habían preguntado si se trataba de una cita, ambos lo negaron rotundamente.

-Jungkook, ya puedes pasar a grabar la canción -lo llamó Namjoon, quien estaba sentado junto a Yoongi frente a un tablero lleno de cosas que él desconocía acerca de sonidos.

Jungkook dejó su café en una pequeña mesita que había allí donde también había algunos dulces que habían comprado para pasar el tiempo que estarían allí.

-Recuerda que es sólo un cover, estamos probando tu voz -habló Yoongi una vez que el menor había ingresado a la cabina de grabación, haciéndose oír a través de unos parlantes que se encontraban en el pequeño lugar-. Intenta agregarle tu propio estilo, como ya habíamos hablado.

Jungkook sólo asintió con la cabeza, colocándose los auriculares. Pudo ver a través del vidrio que todos sus amigos se quedaban en silencio para oírlo cantar, y eso hizo que se pusiese un poco nervioso.

Cuando oyó que la canción comenzaba, su voz sonó casi como un susurro debido a los nervios, y cerró los ojos, intentando ignorar todo a su alrededor.

Cuando estuvo más relajado, se notó en su voz ya que comenzaba oírse con más confianza. En un momento abrió los ojos, encontrándose con que al otro lado del vidrio se encontraba Taehyung, saludando a todos ya que al parecer acababa de llegar al lugar. Cuando sus ojos se encontraron, Jungkook le sonrió y el otro le devolvió la sonrisa, agitando su mano en forma de saludo.

Jungkook cantó con más energía cuando supo que todos sus amigos estaban allí, oyendo su voz, muchos por primera vez. Le agradó ver los rostros de todos, concentrados en la forma en la que él cantaba, bastante asombrados. Vio a Momo decirle algo a Hoseok mientras señalaba al menor, ella parecía realmente sorprendida por su talento.

Cuando la canción acabó, todos comenzaron a aplaudir y él se sintió un poco avergonzado mientras se quitaba los cascos. Aún así, no dejaba de sonreír.

-Muy bien hecho, Kook -lo felicitó Jimin apenas salió de la cabina de grabación-. Es una lástima que Jin hyung esté trabajando, pero aún así grabé todo para él.

Jungkook asintió con la cabeza, luego miró a Taehyung, quien se había acercado a él con una gran sonrisa en el rostro.

-Eso fue muy bonito -le dijo el mayor.

-Gracias... No sabía que vendrías.

-Ni yo, Hoseok me avisó y vine lo más rápido que pude -elevó los hombros-. No quería perderme tu comienzo en el ambiente musical.

Jungkook rió, empujando levemente al chico frente a él. Antes de que ninguno de los dos pudiera decir algo, Hoseok y Momo se acercaron, al parecer estaban un poco apurados.

-Gran trabajo, Kook -Hoseok lo rodeó en un cálido abrazo-. Lo hiciste muy bien -se separó del muchacho, mirando a la castaña junto a él-. Nosotros debemos irnos, pero antes queríamos oírte cantar, y en serio valió la pena.