08.

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Jungkook estaba sentado en el sofá, jugando con su celular mientras que Seokjin cocinaba y Namjoon miraba la televisión. Habían invitado a Yoongi y Jimin a almorzar, pero ellos llegarían en unos minutos porque debían ir a comprar algunos alimentos que se les habían acabado.

–Kookie –Jin habló desde la cocina–. ¿Has visto otra vez a ese chico?

Jungkook frunció el ceño, pausando su juego –¿Qué chico?

–Al que estabas ayudando, el que tuvo un accidente automovilístico –se explicó el mayor–. No recuerdo muy bien su nombre.

–Taehyung. Se llama Taehyung –aclaró Jungkook–. Y sí, lo he visto. ¿Por qué la pregunta?

–No lo sé, es sólo que...

–A Seokjin le impactó mucho su historia –habló Namjoon, sin dejar de mirar la televisión–. No ha dejado de pensar en él.

–Es sólo que... Es algo difícil, ¿entiendes? –Seokjin apareció en la sala, dejando una olla en la mesa–. Son cosas que no se superan fácilmente.

–Te entiendo –Jungkook asintió con la cabeza–. Pero no debes preocuparte, hyung, Taehyung parece estar muy bien.

–Sí, pero estaba pensando en que... Quizás podríamos invitarlo a cenar –Seokjin sonrió ampliamente, y los otros dos chicos se miraron entre ellos, incrédulos.

–¿Es en serio? –Namjoon elevó una ceja, su atención había dejado de estar en la televisión para pasar al mayor–. ¿Quieres invitar a un completo desconocido?

–No es un desconocido –mientras Seokjin hablaba, la puerta del departamento de abrió, ingresando luego Yoongi y Jimin–. Es amigo de Hoseok y de Kookie.

–No es mi amigo, apenas lo conozco –dijo Jungkook.

–¿De quién hablan? –Preguntó Jimin, acercándose a sus amigos seguido de su novio.

–Taehyung –respondió Namjoon.

–¿Otra vez ese chico? –Yoongi se sentó en una de las sillas que se encontraban rodeando la mesa, dejando una bolsa sobre la mesa.

A ninguno de los que vivían en aquel departamento les había importado que Jimin y Yoongi hubiesen ingresado sin siquiera tocar, puesto que tenían muchísima confianza. Cuando Seokjin, Namjoon o Jungkook querían ir al departamento de Yoongi y Jimin lo hacían, y viceversa, siempre y cuando la puerta no estuviera con llave, en esas circunstancias sí que tocaban.

–Seokjin hyung quiere invitarlo a cenar –explicó Jungkook–. Pero ni siquiera lo conoce.

–¿Y eso que tiene de malo? Sólo sería una cena.

–Al fin alguien que me comprende, gracias, Jimin –Jin rodeó los hombros del chico de cabello rosado–. No es como si lo estuviera invitando a una orgía o algo por el estilo.

Yoongi rió un poco ante lo que el mayor acababa de decir.

–Ese no es el punto, Seokjin –Namjoon se puso de pie–. No puedes andar invitando a cenar a cualquier persona que se te plazca.

–¿Por qué no? Es mi departamento –en el momento en que Jungkook estaba por decir algo, Jin lo cortó–. Luego hablaremos de esto, ahora hay que almorzar.

A pesar de que a Jungkook le agradaba Taehyung, no le parecía correcto invitarlo a cenar. Es decir, no lo conocía lo suficiente, y aunque parecía ser un buen chico, en realidad aún no sabía la clase de persona que realmente era. Además, Taehyung sólo era uno de los tantos estudiante a los que Jungkook ayudaba, quizás él le resultaba más agradable que el resto, pero no podía tomarse la libertad de invitarlo a su casa de un día para el otro.

Sin embargo, Seokjin tenía razón, ese era su departamento y Namjoon y él sólo eran sus inquilinos a pesar de ser sus amigos, podía invitar a quien quisiera.

–¿Qué hay dentro de la bolsa? –Señaló Jungkook cuando la tensión del momento había acabado.

–Jimin quiso traer postre –Yoongi sonrió.

–Es helado, así que hay que guardarlo en el refrigerador –ante las palabras de Jimin, Seokjin caminó rápidamente y sujetó la bolsa entre sus manos para luego dirigirse a la cocina y guardar el helado.

–Genial, ¿hay sabor a chocolate? –Preguntó Namjoon, a lo que Jimin asintió.

–Yoongi hyung no quería traer el helado aquí, y quería dejarlo en nuestro departamento para no compartirlo con ustedes.

–Me haces quedar mal frente a nuestros amigos, ChimChim –Yoongi palmeó la silla que estaba a un lado de él, indicándole a su novio que se sentara. Jimin comprendió y sentó–. Pero es cierto.

Jungkook y Namjoon rieron. El celular del menor de los presentes sonó, indicando que tenía un nuevo mensaje.

Taehyung: "Me fijé el pronóstico meteorológico para el lunes y parece que no lloverá, al fin el clima está de nuestro lado" 

Jungkook sonrió inconscientemente. 








Romero | KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora