Lapidot- Mostrandote Un Nuevo Mundo

¿Me das permiso?

Estábamos en la granja, yo y Lazúlis nos encontrábamos arreglando los agujeros que habían, una vez que terminamos decidimos salir a admirar el paisaje y se nos ocurrió una idea a ambas.

-¡Cultivemos algo!- comenzamos a reírnos.

-Bueno no es época de cultivos pero pronto se acerca primavera y podremos cultivar...- dije pensativa.

-Si, ufff, iré un momento a la playa, siento que han pasado meses desde que no voy pero fui hace un par de semanas.-dijo dándome un sonrisa ladeada, era raro sentía que conocía a Lazúlis como la palma de mi mano pero cada vez que la veía de nuevo sabía que no era así, a penas la conocía y seguramente no la conocería nunca...

Mientras observaba a Lazúlis irse a la playa, decidí ir a caminar un poco, necesitaba despejarme, en tan pocas semanas habían pasado tantas cosas.

-Hola Peridot.- me giré algo sorprendida al escuchar mi nombre, al girarme observe a Alan.

-Hola Alan, ¿qué haces aquí?- dije algo a la defensiva.

-Caminar y me encontré con una linda sorpresa.- sonrió coquetamente, me sentí incómoda, sentía la sensación de correr pero a la vez quería estar con él.

-Mmm, esta bien... Debo irme, me necesitan en casa.

-Oh, te acompaño, me enteré de que estas viviendo en una granja, eso es cool.- me sobresalte al escuchar eso, absolutamente nadie lo sabía a excepción de Steven y Connie, y supongo que las Crystal Gems.

-¿Qué sabes tú de eso?

-Oh, se me escapó, no te preocupes y dime... ¿Cómo es vivir con Lapis lazúlis?- había algo en su tono que no me gustaba, me paré y lo observé.

-¿Cómo es qué sabes?- me sentía como la presa y el depredador.

-No te preocupes, se un par de cosas que ni tu sabes.- hizo un gesto desinteresado con la mano- pero no te preocupes, no pasa nada. Vamos sólo estoy tratando de entablar una conversación.

-No pienso hablar contigo, no puedo creer que sepas tanto sin ni siquiera yo a verte dicho esto, es tan inapropiado.- lo observé con disgusto- me voy.

Comencé a caminar rápido pero él con un par de pasos me alcanzó, ahora odiaba ser baja, me tomo de la mano y me detuvo colocando su mano en mi cintura.

-¡Dejame!

-No, vamos, no te enojes... Por favor.- me miró con una cara de suplica.

-Te dijo que la soltaras, sueltala Alan.- mire hacia atrás, se encontraba Lazúlis apoyada en un árbol con las manos cruzadas en el pecho, me sentí por un lado salvada pero por otra no mucho ¿qué de suponía que hacía Lazúlis aquí?

-Vete, nadie te llamo, aparte ella tendrá que darme un beso si quiere que la suelte.

-Ni en sueños.- dije como pude, lo empuje del pecho pero él no se dio.

-Vamos Alan, no seas pesado.- ahora el tono de Lazúlis era uno de molestia, podía notar como estaba apretando los puños.

-Mmm... No.- me observó y puso boca de pato, realmente quería que lo besara, no me lo pensé más y le di un golpe en la boca, eso lo dejo aturdido, se quejó y me dejó caer, caí de trasero observé como el levanto la mano para golpearme, pero Lazúlis fue más rápida y le dio un golpe en las costillas y me tomo de la mano para salir corriendo, mientras corríamos llegamos a un lugar que era campo, estaba tan agitada y cansada que me doble y apoye mis manos en las rodillas para tomar aire.

-¿Estas bien? ¿No alcanzó a hacerte nada?- la observé, era raro verla tan preocupada, sobretodo conmigo...

-Si, gracias por aparecer, ¿pero no estabas en la playa?

-Bueno, no pude ir a nadar observé a Jasper sentada en la arena y de camino a la granja los vi.- al sólo escuchar el nombre de Jasper sentí como los pelos se me paraban, me dio un escalofrío.

No sabía que decir, estaba tan cansada, me tiré en el pasto observando el cielo de distintos colores, se estaba atardeciendo y creo que no sería seguro ir a la granja, estaba harta de huir, sólo quería estar en mi cama y con... Lazúlis... Ella también se tiró al lado mío pero ella apoyo su cabeza en mi pecho y me observó, me sentía algo avergonzada.

-Hey Peridot observame.- me sentía tan avergonzada que no quería verla a la cara pero igual lo hice.- Eres tan linda... Me dan ganas de... Besarte.

-¿Por qué no lo haces?- al instante me sonroje, eso lo había pensado en voz alta, ella sólo me sonrió de lado.

-¿Me das el permiso?

-¿Desde cuándo pides permiso para eso?- de nuevo pensé en voz alta y ella volvió a sonreír, se sentó y posicionó sus brazos al lado mío y me beso lentamente, se sentía tan refrescante, sentía como sí toda ella fuera agua y yo estuviese bebiendo de ella, me sonroje al pensar eso, Lazúlis comenzó a introducir su lengua en mi boca, ya no estaba pensando, sólo estaba sintiendo, sentí que su mano me tocó el cuello y comenzó a acariciarlo, su mano comenzó a bajar y cuando estuvo apunto de posicionarse en mi pecho derecho la subió, de cierta manera me sentí aliviada y frustrada...

Hi! ¿Cómo están?
Realmente lo siento por no actualizar :c estuve muy ocupada y me anduve algo triste y no tenía ganas de escribir absolutamente nada, aunque todavía sigo triste les subo un capítulo más porque los/las amo xD

Espero que le guste este capítulo :3 poco a poco abra salseo 😏😏

Con cariño Nathy <3