Entre dos mundos

21. Desconfianza y reencuentro

Cuando se reúnen todos en el salón, un grupo de policías aparece en la casa. Niall los abre, intentando disimular su nerviosismo:

-Buenos días, ¿qué pasa?

-Policía. Queremos ver la casa.

-¿Por qué?-pregunta Louis, vacilante.

-Alguien nos ha dicho que hay actividades sospechosas por esa zona. Sólo queremos hacerles unas preguntas y ver el hogar.

Los policías no esperan a que los jóvenes respondan, entran directamente en la casa y examinan el salón atentamente. Niall, Louis, Robert, Harry y Vi no dicen nada, sólo se miran intentando disimular sus nervios. Sólo desean que las chicas estén bien y no hagan ningún ruido.

Jenn está muy confundida. Menudos días que está llevando. No puede entender por qué la policía los está buscando. Incluso tiene dudas. ¿Y si tiene un localizador diminuto? Quizá cuando estuvo en casa de Elisa se lo pusieron sin que ella se diera cuenta. Enseguida descarta la idea, ya que cuando despertó lavó toda su ropa y se dio una ducha antes de que Louis le curara las heridas. Si hubiera un localizador, los chicos lo habrían encontrado y destruido. Tiene frío. Coge una de las mantas que Niall le ha dado y se la echa encima, mientras espera a que la vayan a buscar.

Anny está sentada en una de las sillas. No se atreve a salir, Robert le ha ordenado que no salga hasta que él vuelva a por ella, así que no le queda más remedio que esperar. Aburrida, coge una tiza y empieza a escribir en la pizarra. Le gusta escribir para desahogarse, para expresar sus sentimientos, ya que en persona no es capaz de decir según qué cosas con ciertas personas. De repente, Erick aparece en su mente. No, no quiere pensar en él. No ahora. Está preocupada y asustada por la redada, sólo desea que termine pronto y pueda salir, ya que ese sitio no le agrada demasiado.

Emily es la que más asustada está de todas. Odia ese sitio, no hay absolutamente nada: ni una ventana, ni una mesa, ni siquiera una simple botella de agua. Tiene un calor abrasante, siente una sensación de claustrofobia que la está martirizando. Está confundida, no sabe por qué está allí, por qué tiene que esconderse y tampoco sabe qué hacer. Harry dijo que vendría a buscarla, pero ha pasado tiempo y no hay rastro de él. La chica aún se preocupa más, ¿y si la policía se ha llevado a sus amigos y no sale nunca de ese oscuro y siniestro sótano? ¿Y qué hay de Jenn y Anny? ¿Cómo estarían ellas? Tanto estrés la supera, cayendo bruscamente al suelo.

De repente, los policías oyen un ruido, como un golpe, providente de la parte baja de la casa. Todos se quedan atónitos, y los jóvenes se asustan, pero intentan esconder su preocupación.

-¿Qué fue eso?

-Debe de ser algún animal afuera.-miente Harry, quien se percató de que ese ruido venía del refugio de Emily.

-¿Tienen ustedes un sótano en esa casa?-pregunta el inspector.

-No. Ya lo han visto sus agentes, no hay.-dice rápidamente Vi.

-¿Y sobre qué actividades sospechosas se supone que se nos acusa?-pregunta Niall.

-Bueno, no son ustedes concretamente, es la gente de esa zona. Una chica llamó diciendo que se había dado cuenta de que había pisadas raras y el tiempo cambiaba bruscamente.

-Bueno, en esa época del año es normal que haya tiempo irregular.-replica Robert, quien no se había dado cuenta de la presencia de alguien.

-Quizá las pisadas son de animales, vete a saber. Es un bosque, puede haber de todo.

-Puede ser. ¿Ustedes tienen posesión de poderes?-preguntó una chica policía.

-¡Poderes! ¡Ojalá tuviéramos poderes! ¿Os imagináis?

Harry se ríe mientras pronuncia esas frases, haciéndose el inocente. Los policías parecen creerle. Pero en el fondo, está angustiado. A Emily le ha pasado algo y no puede ir a verla, eso lo corrompe por dentro. Quiere verla y saber cómo se encuentra, al igual que Niall con las demás chicas. No podría soportar poner a su hermana en peligro otra vez, y más ahora que se han vuelto a encontrar después de tanto tiempo. Y Anny... Bueno, no quiere ver a Anny mal, le dolería demasiado, aunque no quiera exteriorizarlo.

La joven policía que acompaña el inspector tiene la mirada fija en alguien. Después de tanto tiempo, al fin lo vuelve a ver. ¿Cómo estará? ¿Tendría novia? ¿Se acordará de ella? Mira fijamente a su ex novio. Él sigue sin enterarse de nada, como siempre. Entonces ella clava su mirada en la chica. La conoce, él le ha hablado de ella varias veces cuando salían juntos. Es su mejor amiga, se conocen des de que eran niños. Un día la vio, por pura casualidad, pero no estableció contacto con ella. Ahora la tiene delante. Duda de que a él le guste ella, si se conocen desde hace tanto tiempo. Además, de gustarle esa chica, no habría salido con ella. La muchacha piensa que la amiga de su ex debe de estar saliendo con alguno de los otros chicos.

De repente, alguien interrumpe sus pensamientos:

-Agente Preston, ¿está tomando apuntes de todo lo que están diciendo?

-Eh, sí, sí, inspector Nick.

-¿Cuántas veces tengo que repetirte que no me llames por mi nombre? Soy tu jefe, por tanto debes llamarme inspector Earnshaw. Yo te llamo por tu apellido, no te voy llamando Isabella como si fuéramos amigos de toda la vida.-dice el inspector, enfadado, y de repente, él se da cuenta de todo.

-Lo siento, inspector Earnshaw.

-Disculpen la señorita, es nueva en el cuerpo de agentes y aún no tiene las cosas claras.

-Isabella Preston, dice?-la chica asiente, emocionada, a la pregunta de su ex. ¡Al fin la ha reconocido!

Él está sorprendido. Al fin la chica ha cumplido su sueño de ser policía. Cuando estuvieron saliendo, ambos aún iban en el instituto y, mientras él aún no tenía claro qué estudiar, ella ya sabía de sobra que trabajaría de policía. Recuerda los momentos que vivieron juntos. Pero esto fue hace muchos años.

Los demás los miran, sorprendidos. ¿Acaso Robert y esa chica se conocían de antes? No le hace ninguna gracia a Vi, quien recuerda perfectamente a la "famosa Preston". Robert siempre hablaba de ella a todas horas. Nunca llegó a conocerla en persona, pero la odiaba.

-¿Os conocéis?-pregunta Louis, sorprendido.

-Sí, ella y yo estuvimos saliendo cuando íbamos al instituto. ¡Cuánto tiempo! ¿Cómo va todo?

-Bastante bien, ¿y a ti?

-¡Igual!

-¿Así se conocen, agente Preston?

-Sí, inspector. Él no haría nunca nada malo, ni él ni sus amigos. No se preocupe de nada, ellos no son los que hacen actividades sospechosas.-el policía parece convencido.

-Ya veo. De acuerdo, pues nos vamos. Sentimos haberles molestado.

-No pasa nada. –sonríe Louis, satisfecho de haberse librado de los policías.

-Robert, cuando quieras quedamos y nos ponemos al día.-propone la chica policía antes de salir.

-De acuerdo.-sonríe Robert. Vi pone los ojos en blanco.

Una vez los policías se han marchado, los chicos van en busca de Emily, Jenn y Anny. Vi y Louis se quedan en el salón.

-¿Quién crees que ha denunciado nuestras actividades?-pregunta ella, alterada por todo lo sucedido con los policías y con Robert.

-No lo sé, Vi. ¿Crees que habrá sido una de las chicas? El policía dijo que era una chica quien les avisó.-cuestiona Louis, sorprendiendo a Vi.

-No debemos desconfiar de Anny, Emi y Jenn. Ahora son de nuestro equipo. Aún así, igualmente les explicaremos qué ha pasado y les preguntaremos si saben algo al respecto.

En menos de cinco minutos, Niall y Robert aparecen con Anny y Jenn, pero Harry tarda un poco más. Cuando aparece, poco después, lleva a Emily cargada en brazos.