Capítulo 15

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.....

Doctor: Estuvimos revisando tus exámenes, tu cuerpo esta rechazando a tu corazón nuevamente. Tenemos que intervenir lo antes posible porque si no lo hacemos tu corazón podría fallar y no habría nada que hacer

Gaby: ¿Me...me voy a...a morir?

Arely, que estaba sentada a su lado de inmediato tomo su mano por debajo de la mesa y entrelazaron los dedos

Anabel: No digas eso Gabriela

Doctor: Con el trasplante, las cosas van a cambiar. Necesitamos que te sometas a la cirugía lo antes posible

Gaby: Y el...

Anabel: No se diga más doctor. ¿Cuándo es?

Doctor: En 3 semanas...las espero aquí mismo, y ya yo me encargo de llevarla a quirófano

Anabel: Perfecto doctor. Entonces...

Antes de que Anabel pudiera terminar Gaby salió del consultorio y Arely la siguió

Anabel: Disculpe doctor, pero aquí nos vemos entonces ese día

Doctor: Necesito mostrarle unos estudios. No tardo mucho

....

Arely: ¡Gaby por favor espérame!

Gaby: Mi mamá nunca me deja tomar decisiones

Arely: Gaby...solo...solo hace lo que cree mejor para ti

Gaby: ¡Ni siquiera sabe si quiero hacerlo!

Arely: ¿No quieres?

Gaby: No...

Arely: Pero...pero ya escuchaste lo que dijo el doctor, si no lo haces...

Gaby: Igual si lo hago, mi maldito cuerpo puede volver a rechazarlo, y entonces otro trasplante...no...no tiene caso

Arely: Deja de hablar así de tu cuerpo Gabriela. Además nadie te asegura que tu cuerpo rechace este nuevo trasplante

Gaby: Tampoco nadie me garantiza que no lo hará. Mi cuerpo ha rechazado 3 trasplantes. ¿Por qué sería diferente esté?

Arely: No lo sé. Pero ¿para que pensar en que será lo mismo? Solo...solo inténtalo. Por...por ti y si no quieres hacerlo por ti. Hazlo por nosotros. Por tus papás, tus hermanos. Hazlo por mí. Ya te lo dije, no quiero una vida en la que tú no estés

Gaby: Lo haré solo porque no me queda otra opción. Ella ya lo decidió. Y...perdóname pero realmente no quiero hacer esto

Amabas subieron al coche y esperaron en silencio para que Anabel saliera. No tardo mucho en hacerlo. Encendió el coche y se dirigieron a casa. Gaby subió a su habitación después de asegurarse que Arely no se iría, por lo menos no hasta que comiera con ella.

Y ahí nuevamente estaba él. Ese chico que la había hecho sonreír de nuevo estaba frente a su ventana. Como siempre fue él quien comenzó la "conversación"...

"No mucho. ¿Tú? ¿Vas a la escuela?" Podía llegar a ser una pregunta tonta. Después de todo siempre lo había visto llegar con una mochila, lo había visto sacar sus libretas y hacer lo que ella suponía eran tareas. Pero aun así quería estar segura. No confiaba mucho en sus suposiciones.

"Sí. ¿Tú no?" No había mucho que se pudiera contestar a eso, tendría que explicar el porqué no. Y realmente era muy largo como para explicarlo por medio de una hoja. Sonrió y elevo los hombros pensando que así el chico lograría entender lo que intentaba decirle. Vio como cambiaba de página y seguía escribiendo, frunció el seño como de costumbre, era algo que hacia cuando estaba confundida o no lograba entender algo. "¿Puedo saber tu nombre?"

Abrió los ojos de inmediato, pensando si estaría bien darle su nombre a un extraño. Después de todo el no saber su nombre lo convertía en uno...pero si no se lo decía, ella también sería una...

Cambio de página y comenzó a escribir su nombre sobre ella para aquel chico, "Gabriela Ramírez"...

XX: ¡Tu mamá tiene gritándote como 5 minutos Gabriela!

Gaby: Are...Are...yo...bueno...es que...

Arely: Si, ya lo entendí. Pero tu mamá está dispuesta a venir por ti...así es que vamos, ahorita sigues hablando con él

Gaby temía que su madre subiera y lograra ver a aquel chico. De igual forma para ninguna madre es normal ver a su hija platicando con el vecino por medio de hojas ¿Cierto? Dejo la libreta sobre la cama y salió de inmediato cuando escucho pasos acercándose a su habitación.

Anabel: Llevo llamándote desde hace rato y no bajabas. ¿Qué hacías? Me preocupas Gabriela ¿Cuándo lo vas a entender?

Gaby: Estaba leyendo y no te escuche. No me va a pasar nada por estar en mi maldita habitación leyendo mamá ¿Cuándo vas a entender eso tú?

Gaby bajo y se sentó entre sus dos hermanos. Aun que no platicaba mucho con ellos, los quería, los quería tanto como cualquier hermana pequeña quiere a sus hermanos mayores. Los quería porque siempre intentaban ayudarla hasta con las cosas más sencillas como llegar a su habitación, bajar algunas cosas que ella no alcanzara, e incluso la acompañaban a sus citas solo para que su mamá la dejara opinar acerca de cualquier cosa que tuviera que hacerse.

Jorge: ¿Cómo les fue con el cardiólogo Gaby?

Anabel: Haremos el trasplante

Jorge: ¿Enserio?

Dijo dirigiéndose a Gaby quien solo asintió con la cabeza agachada

Luis: No pareces muy contenta hermanita

Gaby: Nadie...nadie dijo que lo estuviera

Luis: ¿Qué paso?

Anabel: Nada, no paso nada. Ahora terminen de comer, para que alguno lleve a Arely a su casa

Arely: No es necesario señora, puedo irme yo sola

Gaby: ¿No te quedaras?

Anabel: Se quedo ayer. Ella también necesita su espacio Gabriela

Jorge: Yo puedo llevarte si quieres

Gaby: Quédate

Anabel: Ya dije que no

Gaby: A ti no te lo estoy pidiendo

Anabel: ¡Basta Gabriela! Arely se irá a su casa y punto

Gaby: ¿Y que si ella...si ella no quiere?

Anabel: Bien...entonces que lo diga ella y no tú

La Chica De La VentanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora