Detrás del delantal (2)

Capítulo 236

CAPÍTULO 236

*narra Martina*

"Don't leave me this way" de "The Communards" me encanta y me motiva un montón y eso me anima a pedirle a Mauro que baile conmigo. Al principio de la fiesta estaba bastante deprimida, porque joder, he tenido el premio de Masterchef tocándolo con la punta de mis dedos y se me ha escapado, encima me fastidia tanto que el que me lo haya arrebatado haya sido Manuel...

Todo va genial con Mauro, él intenta animarme, nos sonreímos, nos comunicamos con la mirada y sé que ya he olvidado a Manuel, que ahora lo único que necesito es el calor de este chico madrileño. Lo beso, presa de un impulso de querer que volvamos a la normalidad de una vez. Pero él se aparta bruscamente.

Mauro: Martina... - pero yo no quiero escucharlo, porque sé lo que va a venir después. Así que finjo que sigo bailando, no puedo mirarlo a los ojos. - Martina, escúchame. - pero sigo ignorándolo. Me agarra de las muñecas y me obliga a mirarlo. - ¿Quieres escucharme? - niego con la cabeza y mis ojos empiezan a anegarse de lágrimas. - Es importante. No quiero volver contigo.

Martina: Piénsatelo mejor... - consigo balbucear.

Mauro: Ya lo he hecho. Me has hecho mucho daño, quiero apartarme de ti durante un tiempo.

Martina: Eso no es de una persona valiente, ¡no tienes el valor de quedarte conmigo! - le grito, enfadada, soltándome de él.

Mauro: ¡Igual eres tú la que no tiene el valor para marcharse! ¡Yo paso de quedarme contigo y aguantar todo el dolor que me has causado!

Se marcha antes de que pueda decirle nada más. Así que ya no quiere volver, pues esto no va a quedar así, no le va a ser tan fácil olvidarse de mí.

*narra Rocío*

Me sorprende el giro que ha dado mi vida al entrar en Masterchef. Al principio no creí que me fuese a cambiar todo tanto, pero ahora que todo se ha terminado he de decir que me siento tan feliz de estar aquí... Y Lucas tiene gran parte de la culpa.

Me acerco a mi... ¿Mi chico? Ni siquiera sé qué somos, pero es igual. Pasamos toda la noche juntos, disfrutando de la compañía del otro, envueltos en mil y un besos. Mañana toca despedirnos y creo que va a ser la despedida más dura de todas, más que la de Martina... Necesito asegurarme que volveré a verlo pronto.

Rocío: ¿Qué haces este verano?

Lucas: Faltan tres meses todavía para eso... No tengo ni idea.

Rocío: Mi familia y yo hacemos un viaje cada verano. Este año toca Ámsterdam. ¿Te quieres apuntar?

Lucas: Eh... - su rostro empalidece, quizás he sido demasiado atrevida.

Rocío: Tú y yo. En verano. Alquilando bicicletas por Ámsterdam. Comiendo deliciosos helados. No sé, piénsalo.

Lucas: Me encantaría... Me encantaría vivir algo así a tu lado.

Rocío: ¿En serio? - asiente y me regala un largo y dulce beso. - Mientras tanto... - le digo, atontada, después del beso - Te cansarás de mí por Skype.

Lucas: Bueno, bueno, no te embales... - se hace el aturullado, yo me cruzo de brazos - Era broma. Sabes que voy a echarte mucho de menos.

Terminamos la noche abrazados, durmiendo juntos, temiendo el momento de la amarga despedida...