Detrás del delantal (2)

Capítulo 208

CAPÍTULO 208

*narra Mendicuti*

Me asomo en mi tienda y me encuentro a Mauro aparentemente dormido. Lo zarandeo delicadamente y él se despierta, desubicado.

Mauro: ¿Pasa algo?

Mendicuti: Mauro... - señalo a Marta con la mirada. - ¿Te importa?

Mauro: ¿Estás seguro? - me susurra.

Mendicuti: Totalmente. - sé que a Mauro no le parece muy bien, pero me da igual.

Mauro: Pues nada, ya me habéis desvelado. Así que por vuestra culpa me voy a molestar a Manuel.

Marta: Esto... Manuel está durmiendo con Ana.

Mauro: ¿Ah, sí? ¿Entonces con quién duermo yo?

Mendicuti: Con Aina.

Mauro: Ah, bueno, pues espero que no me mande a freír espárragos por despertarla. Buenas noches, chicos.

Marta y yo nos tumbamos y la acurruco entre mis brazos.

Mendicuti: Me gusta empezar así el día de mi cumpleaños. - confieso.

Marta: Espero que lo termines todavía mejor. - me aprieta la mano con fuerza mientras yo le acaricio el pelo - Me gustaría que escucharas una canción. Valiente, de Vetusta Morla.

Saca su móvil y le da al play. Es un grupo con mucha personalidad y la voz del cantante me pone la piel de gallina. Retengo algunas frases. "Tras de mí una escena y diez mil frases que repetir. Ya ves, lo que es no es. Yo no voy a contar lo mejor, a ocultar lo peor. Me pongo el mejor chaqué. Porque ser valiente no es solo cuestión de suerte". Pero la que más me marca es esta "A veces no soy yo, busco un disfraz mejor".

Mendicuti: ¿Te identificas? - le pregunto a Marta.

Marta: Demasiado. Es una letra un poco ambigua, pero yo decido interpretarla como la siento.

Mendicuti: "A veces no soy yo, busco un disfraz mejor".

Marta: Exacto.

Mendicuti: ¿Intentas justificarte?

Marta: No es eso, intento explicarte por qué soy lo que soy. Sé que todo lo que he hecho no tiene justificación y no voy a negar que disfruto comportándome así, pero me he dado cuenta de que no me lleva a ningún lugar. Y menos al lugar que quiero llegar.

Mendicuti: ¿Cuál es ese lugar?

Marta: Tu corazón.

Mendicuti: Podría admitir que ya llegaste hace tiempo.

Marta: Pero no de la manera que a mí me gustaría. Sé que tienes miedo y que no confías en mí, eso es lo que te hace no decantar la balanza a mi favor. ¿Sabes qué pienso? Que en el fondo sabes a quién prefieres, pero que no te atreves a escoger por miedo a las consecuencias.

Mendicuti: Veo que has estado pensando mucho sobre este tema...

Marta: Como para no hacerlo... Marcos, esto significa un paréntesis en la guerra, pero no puedo sentirme totalmente a gusto contigo si sé que en tu cabeza también ronda el nombre de Aina. Porque ser valiente no es solo cuestión de verte. - cita una de las frases de la canción - Necesito más. Verte, quererte, que me quieras. Buenas noches, calamar. Y feliz cumpleaños.

Le doy un dulce beso en los labios y los dos nos sumimos en un profundo sueño. Yo me quedo dormido pensando en todo lo que me ha dicho Marta y en la situación que deben de estar pasando ellas dos, no pretendo justificar sendas actitudes, pero están luchando por mí... Quizás ya va siendo hora de que yo luche por una de las dos.

*narra Claudia*

Claudia: ¿No vas a pedirme disculpas?

Efrén: ¿Debería hacerlo? ¿Debería disculparme por decir lo que siento?

Claudia: ¡Deberías disculparte por tratarme de esta manera! ¡Después de lo que he hecho por ti!

Efrén: Nadie te ha puesto una pistola en la frente para que me ayudaras. Además, aquí nos beneficiábamos los dos. ¿Acaso no quieres recuperar a Víctor?

Claudia: Ya no me interesa.

Efrén: Pues enhorabuena. Ya te lo he dicho antes, si no quieres ayudarme, no lo hagas, pero entonces deja de incordiarme.

Dicho esto, se gira para un lado y ya no dice nada más hasta que por su profunda respiración sé que se ha dormido.

Me siento como una estúpida por sentir cosas por este... ¿cómo nombrarlo? ¿Primogénito de la mismísima Dolores Umbridge? ¿Aunque quién querría tener un hijo con ella? Repugnante. Eso es lo que es Efrén, un ser repugnante y egoísta que no le importa en absoluto los sentimientos de los demás.