Detrás del delantal (2)

Capítulo 207

CAPÍTULO 207

*narra Manuel*

Ana: No me apetece dormir con Aina después de lo que ha pasado y...

Manuel: Y yo me muero de ganas de dormir contigo.

Ana: ¡Pues ya está todo dicho! ¡Vamos a tu tienda!

Manuel: ¿Seguro que no quieres ir a dormir a un árbol?

Ana: Eso podemos hacerlo en la residencia, pero dormir en una tienda de campaña no.

Manuel: Oh, puedo plantar una tienda en medio del jardín de la residencia JAJAJA.

Ana: Anda, tira, bacalao.

Llegamos a la tienda y nos metemos los dos en un mismo saco, la verdad es que refresca, pero cuando estoy con Ana nunca padezco frío. Me pongo el frontal y me dispongo a leerle en voz alta a Ana uno de mis libros favoritos: Peter Pan. El pequeño recinto se inunda de mi voz y de la respiración de Ana. Ella me acaricia la pierna y eso hace que me estremezca contínuamente.

Peter irrumpe en la habitación de Wendy en el mismo momento que Marta irrumpe en nuestra tienda.

Marta: ¡Manuel! Ay, si estás con Ana...

Manuel: Sí, eso quería decirte, si no te importa que durmamos juntos...

Marta: ¡Me parece genial! Iba a decirte que yo duermo con Marcos.

Manuel: ¡Eso es una muy buena noticia! ¡Ya hablaremos! - Marta nos sonríe.

Marta: Buenas noches, Manuel. Buenas noches, Ana.

Marta se va y Ana murmura algo. Decido no preguntarle el qué.

Manuel: ¿Tú crees que valemos para esto? - un repentino, loco y casi imposible deseo se apodera de mí - Las mochilas, dormir en el suelo, caminar mucho...

Ana: El calor, el autostop, la poca comida, las pruebas físicas, la compenetración... ¿ESTÁS PENSANDO LO MISMO QUE YO?

Manuel: Oh, sí, ¡lo estoy haciendo! PEKÍN EXPRESS.

Ana: PEKÍN EXPRESS. UN CAMINO EXTENUANTE DE 3500 KILÓMETROS Y UN FASCINANTE VIAJE INTERIOR PARA 16 VALIENTES...

Manuel: QUE DESCUBRIRÁN QUE CONOCERSE A UNO MISMO ES EL INICIO DE UNA AVENTURA QUE DURA TODA LA VIDA.

Ana: Qué programa tan fascinante...

Manuel: Cuando tengamos dieciocho años nos presentamos. - le propongo. Participar en una aventura así con Ana nos uniría todavía más.

Ana: ¿EN SERIO? TE TOMO LA PALABRA.

Manuel: Totalmente. Ana y Manuel. Seremos invencibles.

Hay muchas promesas que se las lleva el viento, espero que esta se mantenga, porque claro, todavía nos faltan siete años para cumplir los dieciocho... ¿Seguiré estando con Ana a mis dieciocho años? Es algo en lo que no prefiero pensar, y menos en qué pasará cuándo todo esto acabe y Ana se tenga que ir a Galicia y yo a Valencia... Prefiero disfrutar del espectacular ahora y cuando eso ocurra ya lo afrontaremos. Juntos. Invencibles.

Manuel: Ana.

Ana: Dime.

Manuel: ¿Sabes que te quiero?

Me besa lentamente, disfrutando al máximo, sin querer que esto nunca se acabe. Y así pasamos la noche, entre besos y caricias.

*narra Víctor*

Lo que me faltaba ya, tener que dormir con la pequeñaja. Aunque todavía tengo curiosidad por lo de la carta de Eva. Recuerdo que Daniel está colgado por Eva (no sabe dónde se ha metido) y que Lucía y él son muy amigos, así que decido averiguar sobre el asunto.

Víctor: Oye, Lucía, ¿es posible que Daniel le haya dejado una carta anónima a Eva?

Lucía: ¿Cómo sabes eso?

Víctor: Eva se cree que no es para ella, me ha preguntado si se la había escrito yo a Marta...

Lucía: ¿Qué vas a hacer con Marta?

Víctor: Eso es algo que no te incumbe...

Lucía: Qué simpático eres. - dice sarcásticamente - Pues que sepas que yo apuesto por ti y por ella.

Víctor: ¿De veras? Ojalá Marta se dé cuenta de que soy el único que la quiere de verdad y desinteresadamente.

Lucía: Lo hará.