(Por: Kyle)
El cumpleaños de James empezó de una forma totalmente a su estilo.—Hay un tipo en las duchas que lleva encerrado en un baño cantando Cumpleaños Feliz desde que empezaron los turnos —gruñó Jose cuando volvió de bañarse—. Los amigos de Víctor están a punto de tirar la puerta abajo.
No quería meterme en problemas pero era el cumpleaños del idiota de mi mejor amigo y si mi regalo era un ojo morado, sería mejor que nada. Fui a bañarme rápidamente y me cambié sin prisa, rogando que James se callara pronto. Sin embargo, su perfecta voz de chico del coro podía oírse claramente desde el pasillo.
Cinco tipos que reconocí de la pandilla de Víctor aporreaban la puerta por turnos gritándole que se callara.
Había mucha gente mirando, esperando el momento en el que la puerta cedería a los golpes.
—...Feliz, cumpleaños feliz, te deseamos todos....
Me abrí paso entre ellos e ignoré las miradas de los amigos de Víctor.
Golpeé la puerta como si nadie me estuviera mirando.
—Oye, James, feliz cumpleaños. ¿Bajarás a desayunar?
—¡Buen día Kyle! —Gritó desde el interior—. Canta conmigo, vamos, cumpleaños feliz, cumpleaños feliz...
—No voy a cantar —protesté—, las puertas de este lugar ya apestan, no voy a destruir también los vidrios.
James se rio y pude oír que varios de los espectadores también contenían algunas carcajadas. Los amigos de Víctor me mostraron los dientes como perros rabiosos.
—Aplaude mientras me rindo homenaje —volvió a gritar James—. Cumpleaños feliz...
Alguien me separó de la puerta con tanta violencia que dejé de respirar.
—Quítate —gruñó un tipo alto y delgado—, a menos que quieras servir de entrada. ¿Qué dices, Joey?
Uno de sus amigos se acercó y yo lo miré con altivez. Era evidente que ambos eran menores, tal vez de tercer o cuarto año.
—Te lo dejo, Zack. Yo quiero destrozar al tipo que me arruinó el baño —gruñó el mencionado mientras hacía temblar la puerta con otra patada.
El mencionado Zack me dirigió una mirada altiva que me recordó a alguien, solo que no estaba seguro de a quien.
—Happy Birthday to me, Happy Birthday...
Puse los ojos en blanco cuando James empezó a cantar en inglés pero eso solo hizo que los tipos que rodeaban la puerta hicieran mayores esfuerzos por tirarla abajo. Me sorprendía que siguiera en pie
Zack intentó lanzarme un puñetazo que esquivé con facilidad. Giré a tiempo para golpearlo entre los hombros y tropezó hasta chocar con la pared. Sus amigos empezaron a prestarnos atención pero él hizo un gesto que indicaba que lo dejaran solo. Tenía que estar bromeando. Este niño no podía competir contra mí. Aunque tal vez él no lo sabía, probablemente nadie en Beckendorf iba a arriesgarse a darle una paliza a alguien de la pandilla de Víctor.
Cuando logró estabilizarse, volvió a intentar golpearme. No era un mal luchador, pero no fue difícil esquivarlo y con un hábil empujón, dejar que se estrellara contra la pared de enfrente.
Los chicos empezaron a silbar. Sin embargo, el chico aún no renunciaba. Se pasó una mano por el cabello y gruñó. Vi su puño alzarse al mismo tiempo que una voz gruesa gritó:
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La señal del vampiro (Igereth #2)
FantasyÉl: La sigue persiguiendo. Ella: Lo sigue evitando....creo. Sus amigos: Están planteándose seriamente fingir que no los conocen. Lo que los une: El contenido de las malditas cartas. (Sinopsis mejorada....en proceso).