A TI TE QUIERO EN MI

"DÉJÀ VU" 4

EN EL CAPITULO ANTERIOR

-Está bien, está bien... mira lo que tengo para ti – saca un pequeño paquete con una sustancia blanca – ya que volviste a tener vida, que mejor que esto para comenzar de nuevo – lo dice extendiéndole el paquete con las pupilas dilatadas.

-Sabes que ya no le voy a eso – aunque no quitaba la mirada a la mano estirada del tipo.

-Vamos, acéptala sabes que es lo que necesitas, recuerda como era, un poco de esto y estas en el mismo paraíso.

Indeciso toma el paquete, pensando que por María había dejado de hacerlo, porque ella lo salvo de la vida que llevaba, del caos que era su mundo, la soledad y la oscuridad en la que estaba sumido, pero María ya no estaba y no importaba nada, destapo el paquete e hizo lo que tantas veces había hecho y rápidamente fue sintiendo que el dolor abandonaba su alma.

CONTINUAMOS...

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MESA DE MARIA Y SUS AMIGOS

-María ese hombre que esta allá no es...

-Si, es Esteban – viendo que se estaba comportando de un modo diferente.

-Vaya, mira nada mas y parece que se lo esta pasando de lo mejor con sus amigos.

-Si pero... pero algo esta pasan... - de repente vio como su ex marido lanzaba un puño a otro que estaba al lado, eso basto para que todo fuera una confusión de golpes, palabras fuertes y vio como el hombre de su vida era estrellado contra la pared y caí al piso inconsciente -Esteban.. – dijo casi sin voz.

Sin perder tiempo corrió al lado de él, pero no reaccionaba, intentaba levantarlo golpeando su mejilla varias veces, mientras a su alrededor seguía el alboroto. Llamo a sus amigos para que la ayudaran, para cuando salieron del lugar María estaba echa un mar de lágrimas, le pidió a sus amigos que los llevaran a una clínica pero uno de sus amigos que afortunadamente era medico lo atendió...

-Rubén, dime que tiene Esteban – desesperada – dime porque no despierta? Por qué?

-María, Esteban esta drogado – María soltó un gemido de angustia.

-No... No... No es posible tenemos que llevarlo a un hospital por dios...

-No es necesario, poco a poco está volviendo en sí, no debió ser mucha la cantidad que consumió, lo que debe hacer es descansar y tomar mucha agua ¿sabes a quien podríamos llamar para que se encargue de el?

-Yo, yo lo haré- Dijo decidida.

-Maria, pero por que tú? Podrías decirle a alguno de sus amigos que..

-No, yo me encargare de él, ¿me puedes llevar a su departamento, Daniela?

-Ah! Si insistes-

Con ayuda de sus amigos montaron a Esteban al carro y fueron a ese lugar que por trece meses fue su refugio de amor, donde solo existían ellos dos. Por fortuna el portero la reconoció y les facilito la entrada, una vez en el departamento María se despidió de sus amigos y se centró en Esteban.

Verlo en ese estado le recordaba el tiempo en el que se conocieron, y le dolía, Maria creyó que Esteban había dejado las drogas en el pasado, y quería creer que durante el tiempo que estuvieron juntos fue asi...

-FLASH BACK-

Ya estaba hasta la madre con su vecino, creyó que mudándose a la capital, todo seria diferente, que viviendo alejada de su familia, destruiría esa burbuja de sobre-protección en la que vivía, aunque eso nunca le había impedido ser mas loca y atrevida de sus amigas porque siempre fue, pero constantemente tenia que estarse reprimiendo de decir cosas y actuar de manera correcta, delante de sus familiares, podría decirse que llevaba una doble vida, pues si ¿y qué? ella no cambiaría por nadie, asi que ahora estaba en viviendo por fin en el nuevo departamento con su gran amiga Daniela, juntas eran un desmadre.