EN EL CAPÍTULO ANTERIOR...-¿Cómo están mi esposa y mi hijo doctor?
-Le sere sincero Sr., Su esposa tenía un cuadro de anemia que se fue complicando, así como también problemas con la tensión, con la cual anoche llego con esta muy elevada, eso ha complicado las intervenciones que le hemos hecho, aparte claro, del sangrado que sufrió... la vida de ambas peligra así que usted decidirá... llegado el caso, podremos salvar la vida de una... ¿Su mujer... o su hija?
<<Su mujer, su mujer... o su hija... hija... sería una niña... y ahora debía escoger a cual de las dos le salvarían la vida.>>
"Qué injusta, qué maldita, qué cabrona la muerte que no nos lleva a nosotros sino a los que amamos"
CONTINUAMOS...
-
-Esteban hacía mucho tiempo que no entraba a ese lugar... desde el momento en que enterró a su hermana, cualquier ser divino dejo de existir en su vida... porque era un prepotente... creía que no necesitaba de nadie, pero ahora estaba en la entrada de la capilla del hospital, con el rostro humildemente inclinado entró y se sentó en la primer banca, pidiendo a Dios una oportunidad de vida tanto para su mujer e hija como para él.
-Señor... sé... sé que toda mi vida he sido un ingrato contigo, que no merezco tu misericordia, pero por favor... no permitas que Maria ni nuestra bebe pagan por mis errores, tu deberías saber lo mucho que ya me odio por d-desearle la muerte a mi propia h-hija... no hay justificación para eso, y pagaré toda la vida por ello... haz conmigo lo que quieras... pero por piedad...- Decia desesperado, mientras las lágrimas resbalaban por sus mejillas.- No te las lleves... permite que vivan, que Maria encuentre un... un hombre que si la sepa amar, que nuestra bebe le diga "papá" a quien si se lo merezca, aunque mi corazón se rompa en mil pedazos al saber que yo tuve mi oportunidad y la eche a perder...- Para esos momentos su llanto ya era incontrolable, por su mente pasaban los recuerdos del hermoso rostro sonriente de Maria con su últimamente habitual postura, su mano bajo el vientre y cuando dormía...
*FLASH BACK*
Esteban estaba calmando su respiración, habian terminado de hacer el amor y Maria ya estaba profundamente dormida en su pecho, retiro su mano cuidadosamente y se levantó con un poco de dificultad, sus terapias estaban funcionando muy bien, pero no quería que Maria se enterara, quería que cuando lo viera pudiera llevarla en brazos y sería mayor su sorpresa.
Vio el cuerpo desnudo de su mujer y su mirada se centró en su redondeado vientre, de 23 semanas de embarazo lo sabía porqué habia investigado y leído algunos libros en su privacidad, y estaba maravillado... aunque lo negaba, estaba emocionado... su bebé... fruto del amor que Maria y el se tenían... acerco su mano y toco su suave vientre, y con los sentimientos a mil sintió un suave movimiento... su hijo... se inclinó y plantó sus labios en el lugar donde crecía poco a poco su bebe...
-¿Sabes que su papá, eh?- Susurro contra el vientre, sintiendo una patada mas fuerte. -No tan fuerte, tesoro... despertaras a mamá.- Dijo sonriendo y recosto suavemente su mejilla en el vientre de ella, escuchando y sintiendo lo mas hermoso del mundo... la vida de su hijo...
-Esteban...- Susurro Maria entre sueños.
Él se acomodó y Maria se volvió acurrucar en su pecho, entrelazando las manos de los dos en su vientre... protegiendo juntos su querido hijo.
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A TI TE QUIERO EN MI
De TodoEl amor puede llegar a ser tan fuerte que nos salva pero muchas veces termina destruyendo todo...