En el mar

Sina

Eren abrió los ojos lentamente, sentía su cuerpo cansado y pesado, no quería levantarse de la cama, miro a través del ventanal dándose cuenta sin mucho esfuerzo que el barco iba considerablemente lento, se intentó sentar en la cama pero un dolor punzante en su espalda baja lo devolvió a su posición anterior, haciendo que recordara todo lo ocurrido en la noche anterior, sonrojo hasta las orejas ocultándose debajo de las sabanas conteniendo un gritito que quería escapar de su garganta, sentía mucha vergüenza en ese momento.

Aunque se sintió bien estar con Levi le molestaba un poco no verlo a su lado al despertar, miro nuevamente por el ventanal notando esta vez las formaciones rocosas que el barco dejaba atrás era extraño pensado que el día anterior estaban en altamar, mirando la posición del sol noto que era tarde, seguramente durmió de más, se levanto lo más rápido que el cuerpo lo dejo, percatándose de la comida dispuesta en una mesa y su ropa bien doblada y limpia, comió sentado bastante incomodo, se vistió lentamente y camino un rato en el camarote para acostumbrase al dolor, que se fue calmando a medida que sus músculos se calentaban.

Caminaba raro eso era innegable, podía sentir sus piernas temblar como el flan y sentarse era la muerte, no sabría si podría subir al mástil es esas condiciones, pero por otro lado no quería salir sabia bien que los demás marineros se burlarían de él por su estado actual, al pasar la noche con el capitán, pero no tendría muchas opciones quedarse encerrado siendo la mujer del capitán era lo que menos quería, llenándose de valor fue a cubierta.

Al poner un pie en la cubierta pudo sentir las miradas de todos los marineros sobre él, ignorando las risas burlonas y uno que otro murmullo en su contra siguió su camino, busco a Levi con la mirada encontrándolo en el timón dirigiendo lentamente su barco, solo una vela hondeaba al aire, mientras la tripulación hacia turnos para cambiarlas de dirección usando las cuerdas, busco a sus amigos pero no los encontró por ningún lado supuso que seguían encerrados, hasta que callo al suelo de culo, con un terrible dolor solo por un abrazo de alguien.

- ¿eren te encuentras bien? – reconoció la voz de Mikasa toda preocupada.

- Estaría mucho mejor si te quitaras de encima – dijo conteniendo el dolor como podía.

- Yo lo ciento – dijo levantándose de golpe y ayudando a eren

- Déjame aquí un momento que aun duele – dijo rechazándola.

- Mocosa no tienes algo mejor que hacer que estar fastidiando a mi mujer – hablo Levi calmado como siempre – y tu mocoso ve a descansar un rato más, si te necesito te mando a buscar.

- Si capitán – Eren se levanto y volvió a la cama, después de todo ya tenia permiso de quedarse de vago.

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En otra parte del mar

Ya se podía ver tierra firme, la orilla de Sina, el barco de comercio Ágata ya estaba llegando por fin a su destino, Erwin sintió esperanza de volver a ver a Eren si conseguía la ayuda del Rey de Sina más la del propio reino tendrían más probabilidades de dar con el príncipe en un mar tan basto, después de todo era un príncipe había que recuperarlo por el bien de ambos reinos.

- Bueno capitán Erwin aquí estamos – dijo el capitán de la nave – espero que pueda encontrar lo que busca, por si le interesa saldremos de regreso a la isla en una semana.

- No creo que será necesario, pero gracias – contesto sonriente Erwin.

- Solo por si acaso - Alrededor de dos horas para poder tocar puerto y atracar en tierra firme.