Robándose los cacaitos

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La cita era para las 10:00 am en San Francisco y ya a las 8:00 am mi galán,  con dos de mis tios ya recogidos pasaba por nosotros.

En esta ocasión no en su BMW,  sino en una Hyundai Tucson plateada. Le deje el asiento de copiloto a papi para acomodarnos atrás. Y partimos a SFM.

Desayunamos en Turey a pesar de la insistencia en no de todos. Pero admito el queso estaba rico.

Y a las 10:05 am estabamos desmontándonos en casa de alto. De Pimentel. De una vez el fogón encendido y las gallinas corriendo,  pues ya sabian una de ellas seria el complemento del rico locrio que se planeaba.

Conversamos por horas y disfrutaba ver a Tony tan empapado con mi familia que definitivamente era el escenario que quería ver en mi vida.

Cuando un hombre logra conquistar la familia,  ya tiene mas de la mitad del trabajo hecho,  aunque la otra mitad se le complique.

Pasamos el dia entre comida, dominó,  y cuentos,  hasta que la hora apremió para retirarnos y asi lo hicimos.  Al llegar la dije a Tony que mañana bajaria a la universidad a resolver y luego al trabajo.

- Gracias por la velada,  fue shulo

- Gracias a ti,  ya casi eres un Ramos.

- o tu una Gomez ?

- no creo

Y con un tierno beso nos despedimos. Aunque eran solo las siete de la noche. Pero el dia habia sido agetreado.

Al entrar me escribe Justin con una hermosa foto de perfil de el y su esposa - mi tesoro - como frase de perfil. No dije nada, pero me sentí muy incómoda. 

- puedo pasar por ti,  necesitamos hablar

- ven cielo.

Entre me duché y salí a ver que tenia que decirme.

Deborah II - ConfesionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora