Deborah II - Confesiones

La Romana

No volvimos a hablar del tema y cenamos en silencio... Pero no aguante mucho

- Tony lo siento, se que estas en una realidad que respeto pero lamentablemente no tengo un precio,  y siento que has querido comprarme.

- invierte en una fea me dijiste 😂😂

- recuerda anotarte en la lista de los que voy a mandar a matar 😂😂

Y ahí habiamos roto la capa superficial del hielo que acaba de crecer entre nosotros.

Y entre bromas terminamos de cenar,  al salir,  toco mi espalda como siempre, el jamás desaprovechaba una oportunidad y ya hasta me habia acostumbrado. Pero esta vez al llegar al carro,  por primera vez puso sus manos en mis piernas... Y lo mas extraño es que me sentí comoda y no se lo impedí. Tan cómoda que estiré mis manos y acaricie su cabello mientras conducia... Sentia las chispas volar en el ambiente.

Me dejó en casa y al despedirse me besó en la mejilla, pero de un modo tan intenso que sentí ese no era el objetivo del beso,  pero no dije nada.

- mañana el polo rojo por favor

- pero Tony...  es una reunión

- y yo soy tu jefe.

- sorry

- a las seis nos vemos. Descansa

- igual muñeco.

Y me acoste a chatear con Justin. Era el unico que tenia la magia de robarme el sueño,  y eso era mucho que decir.  Con el las horas volaban y hasta los jaja y los 😊😕😍 lograban hacerme reir... De verdad lo amaba.

Hablamos hasta que me quede dormida pero amaba eso pasara. Dormí relajada hasta que la alarma me despertó a las 5:20.

Me duché y vestí de prisa y a las seis rayando ya estaba Tony aqui. Luego pasamos por Richard y entre cuentos salimos a trabajar.

Nos detuvimos en tres tiendas que nos conocieron y en seis que ni nos atendieron bien.

El viaje fue agotador pero Richard alegraba cualquier dia. Lo amaba.  Llegamos a casa casi a las nueve de la noche. Le escribí a Justin que no respondió así que dormí plácidamente.