Mar de confusiones

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El beso crecio hasta hacerse intenso, pero hoy no tenia ganas de mas nada y por suerte el lo entendió.

Salimos a casa y esa noche casi no dormi. Amar con el alma y querer con la mente me ponia entre la espada y la pared entre lo que era correcto y lo que me convenia.

Y admito que tenia la cabeza hecha un mar de confusiones y no me agradaba para nada. Y recordé la psicologa de Leni,  asi que le daria la vuelta.

Desperte algo cansada,  y me preparé rapido,  baje a la universidad a ver que conseguía,  pero fui en vano,  no conseguí nada,  asi que cursaría un semestre con dos materias,  que no era bueno,  pero peor era nada.

Al salir pase por el consultorio de la doctora fuentes,  pero vendría en la tarde hoy,  asi que hice una cita para las cuatro. Porque a las dos ya estaba ocupada.

Al llegar a la oficina,  estaba muy sonriente sentada en las piernas de Tony la bella Esther. Entre y saludé con hipocresía nivel Dios y sali a mi oficina hirviendo de rabia.

Y aunque quise trabajar no pude por mas que quise. Asi que salí, y fui a McDonald por un McFlurry de caramelo y oreo,  pero aun asi,  no lograba calmarme.

No se por que me molestaba.  O quizás si,  pero es que si Tony sabia que no me tomaría en serio para que se molestó en enamorarme.  Y justo con ella,  no podia ser otra.

Seria que yo no encontraria quien me ame de verdad,  que le baste conmigo.  Me sentia tan deprimida que senti mis lagrimas me traicionarían.

Acaso no merecia la oportunidad de ser feliz,  o estaba destinada a ser maltratada toda la vida, porque todos los que amaban solo eso hacian conmigo.

Llegué a la oficina y me tranque.  Tony me tocó insistentemente.

- que quieres ?

- que tienes ?

- en serio Tony ?

- te hice algo ?

- no,  tu no,  yo de estúpida por pensar que si,  pero solo te voy a pedir que si vas a jugar conmigo bien, pero mi familia no es un juguete, para que te presentaste como mi novio,  si era solo una broma ?

- mmmm... O sea que aceptas ser mi novia.

- ya no quiero.

Y sali a toda prisa al baño y me tanque a llorar,  que mal me sentia,  que estúpida era. Tony no insistió aquí.

Salí como en media hora y fui directo a mi oficina,  tome mis cosas y le avisé a Richard no volvería.

Aunque eran apenas las 2:45 pm fui rodando despacito hasta al consultorio de la Dra. Fuentes. Y ya a las 3:20 estaba sentada en la sala de espera y por suerte el paciente salió a las y treinta y aproveché y pasé.

- Buenas tardes Doctora.

- Hola corazón - me dijo con su hermosa sonrisa y su carácter tan dulce. - que te trae por acá -

- me estoy volviendo loca ya no se que hacer -

y comencé a llorar,  lloré con tanto gusto y tanto ánimo que senti me liberaba. Mientras la Dra. Fuentes anotaba en su libreta. La miré fijamente. Seguro ella no pasaba por este tipo de situaciones era Hermosa y se notaba muy enamorada.

- Disculpe doctora -

- no te preocupes,  es bueno liberar,  y llorar libera.

- usted ha sufrido por amor alguna vez ?

Me miró fijamente y recogió su larga cabellera.

- todos hemos sufrido por amor Deborah en algun momento,  pero nadie aprende por experiencia ajena.

- Pero quizás su experiencia me ayude.

- quizas tenemos mas en común de lo que piensas... Todo es el enfoque... Pero hablame de ti,  que perturba tu mente princesa.

Y ahi estaba yo hecha un mar de lágrimas de nuevo. Ante la vista comoda de la Dra. Fuentes.

Deborah II - ConfesionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora