Capítulo 14: No te ilusiones

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Salimos de la piscina y nos dirigimos a dentro para secarnos. Estaba oscureciendo y comenzó a hacer más frío.

-A si que eres Argentina-dijo después de escuchar una pequeña anécdota mía- Lo sospeche desde un principio- asentí riendo-¿Algun día me llevarás?

¡Claro que te llevaria!...Cálmate Dawn.

-Sí, cuando tu quieras-reí y el imitó el gesto.

Ya no quedaban rastros de marcador en ningun lado debido a que se limpiaron en la piscina, nadamos un rato después de que caímos.

Se estaba haciendo de noche y Lili aún no regresaba, eso significaba que podría quedarme con él un rato más sin que nadie nos interrumpiera.

-¿Necesitas más ropa?-pregunté al ver lo empapado que estaba.

-No, estoy bien-dijo y miró su camiseta-Te molesta si me la quito un rato para que se seque.

¡Se iba a sacar la camiseta! Tenia que parecer lo más tranquila posible.

- No, para nada-dije y el comenzo a sacársela. Recorrí con mi mirada el largo de sus brazos repasando cada uno de sus tatuajes. Debía haber estado pareciendo una babosa en ese momento.

-¿Quieres algo de comer?-pregunté para distraerme.

-Si por favor, estoy hambriento.

Traté de mantener la vista en la comida mientras Ed secaba su torso, pero ¡era imposible!. Es como decirle a un pájaro que no vuele.

-Mmm...-dijo saboreando la comida-cocinas muy bien.

-Gracias, tengo experiencia. No quiero alardear, pero sí, cocino bien. Mi abuela me enseñó a cocinar.

-Hay que agradecerle a tu abuela, está delicioso.-dijo colocándose la camiseta ya seca.

-Si, le debo muchas cosas. Vivo desde los doce con ella, es como si fuera mi madre.

-¿Y tu madre?- interrumpió serio y tenía ganas de tragarme mis palabras.

-Una larga historia-contesté borrando de a poco mi sonrisa y desvíe mi mirada.

-Oh...-dijo dejando el tenedor sobre la mesa y aguardó un rato para volver a hablar- ¿Puedo preguntar que pasó?...c

Claro, si no te molesta.

-No, para nada-dije viendo como me miraba piadosamente. Respiré ondo enredando mis manos sobre la mesa-Mamá ha estado ausente la mayor parte de mi vida y ha causado ciertos problemas en nuestra familia. Comenzó poco después de que yo naciera siendo la primer hija que ella tenía, mi padre nos abandonó y eso llevó a mamá años después a casarse con un idiota, al cual llamaremos Mike. Mike y mamá tuvieron a mi media hermana Sophia, ella es lo único que quiero de Mike. Mi vida se basa en su seguridad y tomé este trabajo aquí sólo por ella. Mike nos odiaba, era un maldito ebrio y me golpeba constantemente. Una noche mamá y él salieron a embriagarse como siempre, pero mamá no volvió y Mike nos abandonó con mis abuelos. Entré en una gran depresión después de eso.

Ed se acercó a mi, tomó mis manos para mirar mis muñecas y acarició mi piel con sus pulgares examinando si tenía cicatrices.

-Me alegra que no eres de esas chicas que se culpan de sus problemas lastimándose- dijo casi como un susurro.

-No me gustan ese tipo de cosas a mi. Prefiero escuchar musica o tocar la guitarra para desahogar penas.-dije mientras Ed clavaba su mirada en la mía.

-Eres fuerte. Nunca conocí a una chica así- confesó tomando mis manos.

-Mi tia siempre dice "Los que mas dan, son los que menos reciben".

-Pero son las mejores personas en el mundo-continuó y una lágrima brotó deslizándose sobre mi mejilla.

Ed tomó mi cara con sus dos manos y limpió la lágrima con su pulgar. Bajé la mirada, no quería que me viera llorar. Con una mano acomodó un mechon de pelo que caía sobre mi cara y la dejó descansar en mi mentón. Volví la mirada hacia él y me recibió con una suave sonrisa. Me sentía segura con él, algo que no sentía con nadie.

Un fuerte sonido hizo que nos exaltaramos e inmediatamente me separé de él. Ed se disculpó connla mirada, sacó su celular y deslizó el dedo por la pantalla para contestar

-¿Hola?-contestó y escuchó un rato al que llamaba-Entiendo...sí...voy para allá-cortó y me miró- Me encantaría quedarme un rato más pero tengo que irme.

-Me la pasé muy bien hoy contigo- confesé acompañándolo a la salida.

-Yo igual-dijo abriendo la puerta de entrada-Mañana vuelvo y empezamos a pintar.¿Te parece?

-Ok. Te espero.

Se despidió con un beso en la mejilla y cerré la puerta al verlo desaparecer.

Subí, busque algo de ropa y fui a bañarme al primer piso ya que el baño de segundo no funcionaba el agua caliente. Al cerrar el agua, envolví mi cuerpo en una toalla y agarré el cecador de pelo.

-¡Dawn!, volví-gritó Lili anunciando su llegada-¿Donde estás?

-Acá en el baño- respondí.

-¿Que quieres de comer?-dijo acercándose a la puerta.

-Ya comí, gracias.

Me vestí y salí del baño directo a la escalera.

-Allí está la caja que encargaste. ¿Qué es?

-Gracias. Son unas cosas que deje cuando trabajaba allí, nada más.-Dijo tomando la caja dejándola sobre la mesada. Luego notó el trozo de papel dibujado, lo tomó y luego lo examinó seria-¿Qué es esto?

-Es el diseño de la pared-dije bajando un escalón.

-Esta muy bonito, ¿Tu lo diseñaste?

-No, la verdad que tuve algo de ayuda.

-Ed Sheeran ¿Verdad?- levantó su mirada y no sabía que hacer ante su respuesta.

-¿Cómo lo supiste?

¿Cómo lo supo? Ni siquiera sabía que habia hablado con él, ni siquiera sabia que nos encontramos en lo Grammy's y tampoco sabía lo que pasó en el hotel. Es bruja o adivina.

-Te vi esa noche hablando con él-hablaba de la noche de los Grammy's-Sabía que iba a volverte a ver.

-Emmm...pues yo...emm..pues..

-No te voy a regañar- me interrumpió-Solo te pido que no te ilusiones.

Asentí con la cabeza. Sus palabras eran duras pero certeras.

-Buenas noches.

-Buenas noches.

DISTANCIA (Ed Sheeran)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora