DISTANCIA (Ed Sheeran)

Capítulo 2: La tia Lili

-¡Dawn!-eran los gritos de mi abuela anunciando que habían llegado del aeropuerto-Ven a saludar a tu tia Lili.

-En un minuto bajo-advertí.

Me coloqué unos jeans gastados, las Stones que heredé de una de mis vecinas, y una remera blanca estampada con letras negras.

-Dawn, querida ¡Qué grande estas!-dijo Lili mientras me daba un fuerte abrazo y un pegajozo beso en la mejilla.

Mi tía era de esos familiares que esperas con ansias para que te visiten y cuentas los días que faltan para vokverlos a ver.

-Solo ha pasado un año tía no creo que haya crecido tanto-Si...soy algo petisa, pero me gusta ser así.

-Sí, la verdad que seguis igual de pequeña-dijo riendo-Ah!, lo olvidaba.-metió su mano en el gran bolso junto a ella y comenzó a revolverlo-Traje regalos.

-Siii!!! Regalos!!!-gritó Sophia saltando del sillon.

La tia Lili nunca se olvidaba de nosotras dos a la hora de traer regalos.

-Tranquila Sophia- dijo el abuelo Juan al ver la reacción de Sophia.

-Esta bien papá...Toma esto es para ti pimpollito-dijo entregándole un oso de peluche que decia "I ♥ u" y los ojos de mi hermana se iluminaron.

-¡Es precioso tia!-dijo estrujando el peluche y corriendo hacia la cocina-¡Mira abuela! ¡Mira lo que me trajo Lili!

- Y para ti Dawn, te traje esto-sacó una caja de color naranja con un moño color negro-Ábrelo, sé que lo amarás.

Desaté el moño y me encontré con un buzo color blanco, que decia "Ed Sheeran" dentro de la huella de una pata color naranja. Lili conocía muy bien mis gustos, mucho más que mis abuelos, por algo era tan especial para mí.

- Wow! Es...increíble-dije con los ojos como plato y una sonrisa en el rostro.-Gracias tía-y la abracé. Era uno de los mejores regalos que me habia hecho.

-Sabia que te iba a gustar.

- La cena está lista, ayuden a colocar la mesa-interrumpió Moira y nos dirigimos a la cocina.

Después de cenar nos dirijimos a la plaza que quedaba frente a la casa. Era como una tradición que tienen mis abuelos de sentarse a conversar con vecinos, amigos y familiares aquí, después de cenar en las noches de verano.

Allí estabamos la tía Lili, yo, Sophia, los abuelos, las vecinos de la esquina derecha, el vecinos de la otra esquina con su nieto de cinco años, el cual jugaba con Sophi, y un amigo de la tia Lili.

Platicaban sobre cosas que hicieron en el pasado (cosas de gente anciana), en "sus días".La esposa del vecino de la esquina derecha siempre contaba la misma anécdota de como se metió el gato de mi abuela a su ducha, cuando ella se estaba bañando. Ya ni gracia tenía, pero teniamos que escucharla todas las noches decur lo mismo. Pero más allá de todo eso, sus anécdotas eran interesantes. Todos sus años de experiencias vividas me hace creer qu

Ya era medianoche y solo quedábamos yo, la tia Lili y Sophi la cual se habia dormido en mi regaso.

-¿Has conocido algun famoso allá? -pregunté intrigada.

-Si, algunos, pero no es como piensas.-contestó Lili y frunso el ceño sin comprender-No son tan accesibles como parecen-dijo haciendo una cara graciosa y largué una pequeña carcajada-Siempre digo que los famosos no son como uno piensa.

-¿No?-interrumpí- Entonces, ¿cómo dices que son?-pregunté recostandome sobre el banco de la plaza.

-Son muy...como decirte-dijo mirando las estrellas-Ellos creen que teniendo un show de TV, una linda voz o una cara bonita lo tienen todo en el mundo.-suspira-la felicidad no se compra con dinero. Pero quien los entiende. Si tengo suerte conoceré a ese famoso que sea diferente a todos los demás.

-Me gustaria conocer alguno y hacerlo cambiar de parecer.

-Exacto...tendrian que haber más chicas así en el mundo.

-¿Por qué como yo?...digo, hay chicas mejores.

- No, tu eres especial y única. Eres hermosa por dentro y por fuera, ves virtud en todos y das más de lo que recibes... A veces, cuando te veo, veo a tu mamá-dijo tratando de aguantar el llanto, pero no pudo y una lágrima escapó de su rostro.-No entiendo como...

- No hablemos de esto tia-interrumpí secando las lágrimas con los pulgares-Lo pasado pisado ¿Recuerdas?-asintió-Hay muchos recuerdos lindos como para acordarse de los malos. No te lastimes.

-Tendrías que ser consejera-sonrió.

-Todo el mundo dice lo mismo y yo pienso que soy la menos indicada para dar consejos.

- Las personas mas fuentes y las que más dan son las que menos reciben. Verás que todo volverá y te aseguro que tus sueños se harán realidad.