DISTANCIA (Ed Sheeran)

Capítulo 5: Cher y Sebastian

Tomamos un taxi hacia el teatro, porque el auto estaba en reparación y nos tomó alrededor de 15 minutos en llegar. Por la ventanilla admiraba la ciudad, era odo tan diferente. El teatro era enorme por fuera y por dentro. La decoración recién estaba siendo colocada, sólo estaban puestas las pantallas. Habían muchísimas personas trabajando y todo alrededor era cables y herramientas. Lili me guió hasta el escenario donde se encontraban varias personas reunidas que hablaban y reían.

-¡A trabajar!-advirtió mi tia con gritos-Exepto ustedes Sebastian y Cher, quiero que vengan un rato aquí.

-Si, ¿Qué necesitas Lili?-advirtió Sebastian con confianza, se conocían bastante por la forma en que el chico se dirigió a ella. Admito que era un chico muy guapo. Tenia el pelo castaño oscuro peinado hacia arriba, estaba muy bien vestido, usaba unos jeans ajustados y una remera negra con inscripciones de una banda de rock, al parecer fue a un concierto. La chica tenia rasgos latinos muy marcados. Alta, pelo color chocolate xon muchos rizos, ojos café y piel morena pero no tanto.

- Ella es Dawn-dijo tomándome de los hombros- Dawn va a trabajar con ustedes y quiero que la guíen.

-No hay problema-añadió Cher.

Al retirarse mi tía los dos se acercaron a mi con sonrosas amigables.

-Gusto en conocerte Dawn, tu tía siempre habla de ti-dijo Cher e hice una pequeña sonrisa para simpatizar.

- Ven, ahora tenemos que descargar los adornos y varias cosas para mañana empezar a decorar-dijo Sebastian señalando al gran portón a la izquierda.

-¿Hace cuánto trabajan con mi tía?-pregunté mientras bajábamos cosas del camión.

-Yo desde hace un año y Seba desde hace unos meses-dijo Cher arremangando su camisa.

- ¿Donde vives Dawn?-dijo Sebastian-Tu tía no nos ha hablado de eso.

- En Buenos Aires, Argentina-respondí-¿Y ustedes?

-Se nota en tu acento. Yo soy de aquí-respondió Sebastian.

-Y yo de Brasil-¡lo sabia!- Y vine aqui a trabajar por sólo un mes, y me gustó tanto que me quedé-largó una carcajada contagiándome la alegría. Creo que terminaré como ella.

Seguimos hablando toda la tarde como si nos conociéramos de toda la vida, como mejores amigos. Reíamos y hacíamos bromas, la tía Lili nos regañó cinco veces, pero Sebastian no paraba de hacer bromas.

Al final de la jornada Lili y yo nos sentamos en la vereda a esperar el taxi que llamamos.

- ¡Dawn!¡Liliana!-eran los gritos de Cher que venía corriendo junto a Sebastian.

- ¿Que pasó? -preguntó mi tia exaltada.

- No, no pasó nada malo-dijo Cher deteniendo su paso-Sólo queriamos saber si Dawn quiere acompañarnos a dar una vuelta por la ciudad ahora.

-Si por favor tía...por favor-dije con ojos de cachorrito. Me encantaría recorrer la ciudad con ellos.

-¿No estás cansada?

- No, para nada- respondo inmediatamente- Me la pasé genial con los chicos hoy.

Despues de un rato de mirarla con ojos de cachorro suspiró-Está bien.

- ¡Si!- gritaron Cher y Sebastian al mismo tiempo.

-Pero te quiero en casa antes de la medianoche-dijo Lili.

- Como digas hada madrina- grité alejandome con los chicos.

Caminamos un poco por el centro, pasamos por los lugares más importantes y parecía un sueño. Todo el tiempo había visto estos lugares a través de fotos.

-¿A dónde vamos?-pregunté y Cher le dio una mirada rápida a Sebastian y volvió la mirada hacia mi-¿Qué?

-Te enseñaremos lo que es una noche ameriacana para nosotros-dijo Sebastian.

- ¿Cómo es eso?-pregunté. Realmente no entendía nada de lo que hablaban.

-Ven conmigo-dijo Cher tomándome de la mano y llevándome hacia una gasolinera. Al entrar fuimos directamente al baño, el cual estaba muy poco higiénico. Abrió su mochila y sacó un bulto negro y un par de tacones del mismo color.

-Toma ponte esto-mostró un vestido negro ajustado.

- ¿Por que te....?

- Solo póntelo y luego te explico-tomó los tacones y me los entregó empujándome dentro de uno de los baños.

El vestido negro era señido al cuerpo, con la espalda descubierta, y algo corto. Me coloqué los tacones y salí para encontrar una respuesta a todo. Al salir me encontré con una Cher con un vestido color rojo, aun mas corto que el mío y tacones plateados.

- Ya me puse el vestido, ahora ¿me podes decir para que carajo nos vestimos asi?

- Vamos a una fiesta- dijo sacando de la mochila un labial colorado-Tengo un amigo que nos hará entrar a la fiesta de una persona famosa.

- ¿Y quién es?- aún estaba perdida.

-No lo sé.

-¿¡Qué?! Vamos a entrar a la fiesta en la que no estamos invitados de un famoso que no conoces...-dije confundida.

-¡Vamos Dawn!-dijo cerrando la tapa de la sombra para ojos-Será divertido, yo y Seba lo hacemos todo el tiempo-luego me entregó un labial-Maquíllate, tienes que estar linda.

- Está bien-sonreí y comencé a maquillarme.

Salimos del baño y fuimos donde estaba Sebastian sentado fumando un cigarro. Estaba bien vestido con camisa y pantalones negros ajustados.

- Wow! Dawn, estas bien guapa-dijo Sebastian mirándome de arriba a abajo.

-Gracias Seba, fue gracias a Cher-luego pensé un poco- Cher... ¿Siempre traes dos prendas de ropa en tu mochila?-eso era extraño.

-Sip...Uno es por si salimos con Seba a alguna fiesta y el otro por emergencia si le pasa algo al primero-aclaró

-Es muy ingenioso-largué una pequeña carcajada - Pero aún pienso que es extraño-los tres reímos.

Llegamos a la fiesta. Había una gran fila para entrar y al final había dos grandotes con fichas en las manos. Sebastian dio un silbido llamando la atención de uno de los grandotes e hizo una seña con las manos. Tan solo en cuestión de segundos nos encontrábamos dentro. La gente allí era mucho mayor que yo, con dieciocho años era la más pequeña allí.