HUMANTALE "Mi Trabajo Es Protegerte" (FRANS) [COMPLETA]

Cap 7: Algo Salió Mal...

Me recosté en mi cama, mirando al pálido techo de aquella habitación. Ya era de noche y no podía dormirme, estaba ansiosa y a la vez nerviosa. Escuché a alguien tocar la puerta.

- ¡Hey hermana! ¿Puedo pasar? - Me preguntó la castaña a través de la puerta.

- Claro Chara. ¿Qué pasa? - entró.

- Tenemos que planear como nos sentaremos mañana, recuerda que Jenny está enojada con Sans, por lo que... Es tu oportunidad - comentó con una sonrisa.

- ¿Qué tal si hacemos que se siente con Monster Kid?

- Pero él se sienta con Asriel...

Sonreí de forma pícara.

- Oh. - ella se sonrojó - Está bien. Pero recuerda que somos hermanos, nada más.

- Eso no quiere decir que no puedas tener nada con él, Chara. Nosotras somos adoptadas y todo puede pasar.

- De acuerdo, Frisk, como tu digas. Buenas noches. - caminó hacia la puerta.

- ¡Buenas noches, Chara! - Volví a acostarme. Pero seguía sin poder dormir, me decidí a tomar mi celular. Sans estaba conectado.

-Heya Kiddo.

-¡Hey Sans!

-Oye niña, ¿es verdad lo que dijo Chara?

-¿Qué cosa?

-Pues, que le mostraron un mensaje falso a Jenny. Creo que ahora ella está enfadada conmigo.

-Sí, de eso quería hablarte, Sans. Realmente lo siento, no debí haber buscado venganza y mucho menos hacerte quedar mal con tu novia.

-Está bien Frisky, no te preocupes, mañana hablaré con ella, mientras tanto, ¿te sientas conmigo?

-Sí claro, risitas.

-¡Genial! ¿Y la cuchara soportará a Jennifer?

-¿Y tú soportarás a la Genocida?

-FRISK. ¿De nuevo?

-Hehe, era broma, Chara va a sentarse con Asriel.

-¿Los shippeas?

-Siii :D

-Heh, yo también. Pero, ¿Y Jenny?

-Bueno, hasta que todo se resuelva quedará con Monster Kid.

-Pffffft XD

-Jaja.. Hasta mañana Sansy.

-Descansa Kiddo.

*fin de la conversación*

Finalmente logré dormirme, se sentía bien haber sido perdonada por Sans luego de lo que había pasado. De repente, escuché como si un cajón estubiera siendo sacudido fuertemente, intentando abrirse. Me levanté de golpe, asustada. Efectivamente, uno de los cajones de mi escritorio estaba completamente abierto. Me acerqué, temblando. ¿Que había? Un cuchillo... No cualquier cuchillo, precisamente el que usé para asesinar a todos los monstruos en aquella ruta Genocida, que se me hacía imposible olvidar.
No sé por qué, pero por alguna razón, lo tomé. Se sentía bien. Claro, hasta que una secuencia rápida de recuerdos volvió a mi mente en ráfagas. Toriel, Papyrus, Undyne, Sans, Asgore, Flowey... Todos ellos estaban muertos por mi culpa. Intenté tranquilizarme, dejando suavemente el cuchillo donde estaba. Cerré el cajón y volví a mi cama.

Desperté más animada de lo normal. Mamá Toriel se extrañó ante mi comportamiento, pero se veía más alegre. Desayunamos, nos vestimos y salimos con más ánimos.
Llegamos al Instituto, no vimos a los hermanos por ningún lado. No le di tanta importancia, de seguro se quedaron dormidos, ya todos conocemos a Sans, pero lo único que contradecía mi teoría era Papyrus. Él siempre es muy puntual.

-¡¡NYE HE HE!!

-¡PAPS! - Me abalanzé hacia él, abrazándolo. Soy mucho más baja que él, por lo que me alzó y con entusiasmo me lanzó al aire un par de veces. Le di un beso en la mejilla y mientras caminábamos hacia nuestras aulas, esperando a que toque el timbre, le preguntamos.

-¿Y Sans? - preguntó Asriel.

- Suspiró - Jenny... Se lo llevó a alguna parte del Instituto.

- ¿Se lo llevó? qué es, ¿un perro? - agregó Chara.

-Ya no lo sé... - respondió Papyrus, un poco deprimido. Él y Sans se llevan muy bien, son muy buenos hermanos.

Tocó el timbre, así que nos dirigimos a nuestros salones de clases.

- ¡Hey! No pensaban irse sin mí, ¿verdad? - una voz familiar sonó por detrás nuestro. Se oía apagada. Nos volteamos y lo vimos, en la otra punta del pasillo. Era Sans. Su uniforme estaba roto, cubierto de barro, su sudadera azul se encontraba rasgada, su rostro y brazos estaban llenos de golpes y cortes. El chico comenzó a caminar medio cojo hacia nosotros, que lo mirábamos aterrados.

Grité su nombre y corrí hacia él, que aún en ese estado mantenía su sonrisa, esta vez, un poco forzada, como si estuviera ocultando el dolor.

- ¿Y ahora en qué líos te metiste? - preguntó Chara, asqueada.

- ¿Que pasó? - pregunté, tomando sus sonrojadas mejillas.

- ¿Fueron los amigos de Jenny, verdad? - preguntó Asriel, cubriendo los ojos de Papyrus, para que no vea a su hermano en ese estado tan deprimente.

- No importa -contestó terco. - Estoy bien. -aceptó mi abrazo y me levantó con sus pocas fuerzas, mientras caminaba hasta el salón de clases.

- Mejor, Sans, vámonos a la enfermería. - dijo Chara, tomando conciencia de la situación.

- No es necesario, cuchara- respondió el comediante.

- ¡OH DIOS! ¡¡SANS!! - gritó Papyrus al ver a su hermano.

- Mejor primero vamos a avisarle a la profesora que estaremos en la enfermería. - propuse, todos asintieron, mientras que Sans solo se limitó a suspirar. Acaricié suavemente sus mejillas y me bajé de sus brazos.

Hablamos con la profesora y nos dirigimos a la enfermería. Tuvimos que apresurar el paso, ya que descubrimos una nueva herida en su estómago, que Sans había intentado ocultar. Él no paraba de sangrar, ésta nueva herida era notablemente de un cuchillo. La sensual enfermera nos dijo que esperáramos afuera de la sala, y ella trataría de detener el desangrado. Aún así nos aseguró que Sans estaría bien, nos aliviamos. Pasaron un par de horas, que parecían eternas. Todos los demás tuvieron que volver al aula, sin embargo, yo decidí quedarme esperando. Estaba dispuesta a ser sancionada si era para verlo en cuanto estuviera mejor.

- Frisk... -me tomó de los hombros.

- ¿Sans? ¿No deberías aún estar en la enfermería? - pregunté intrigada.

- Heh, debería.

- Idiota... - me crucé de brazos.

- Seré idiota, pero en ese caso... Soy tu idiota... - Nos unimos en un cálido abrazo, del que correspondí sin pensarlo dos veces. Pasó un tiempo de silencio, sin soltarnos, hasta que alguien entró a escena.

- Hey chicos, ¿Qué hacen aquí? - preguntó ella, abriendo la puerta en donde estábamos.