Capítulo 24: Terminemos con esto

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Esa noche no pude dormir, seguro que mis ojeras no podrían estar peor, ya tengo varios días sin poder dormir bien, y últimamente me ocurre muy seguido que no puedo pegar los ojos en toda la noche, pero ayer, fue diferente, me dormí llorando, supongo que el cansancio acumulado de toda la semana me cobró factura, pero sabía que debía llorar porque tenía que liberar todo los sentimientos que se encontraban acumulados dentro de mí, y esa fue la mejor forma que encontré.

La semana había transcurrido sin problemas, había evitado a James, muy maduro de mi parte, lo sé, solamente hablamos de cosas del trabajo. Él decidió darme mi espacio, cosa que agradecí, porque habíamos quedado en salir a cenar para hablar, y no lo hicimos, sabía que llegaría el momento en que tendríamos que hacerlo, pero aún no estaba preparada para conocer la versión de James, ni siquiera estaba segura de haber asimilado lo que me contó Zach.

Observo mi reflejo en el espejo, mis ojos están rojos e hinchados, y tengo unas enormes manchas oscuras debajo de ellos, estoy pálida y mis labios están partidos de tanto que los estuve mordiendo.

Me recojo el pelo en una coleta alta y me lavo el rostro y los dientes, este día he decidido que estaré en pijama, ahí frente al espejo. Regreso a mi habitación para buscar mis pantuflas de perrito, que combinan a la perfección con mi pijama, sí, hoy no me importa si me veo infantil o no, es sábado y no tengo ningún plan en mente. Ni siquiera mi madre ha hecho el esfuerzo por hablarme, seguramente ha estado muy ocupada con Zach, así que voy a poder descansar al fin.

Hago desayuno con lo primero que encuentro, a veces preparo cosas muy extrañas y combino ingredientes que nadie combinaría, y aún así obtengo comidas muy buenas, o por lo menos no me he intoxicado o he tenido indigestión después de comer mis interesantes platillos.

Terminé de comer y me dispuse a lavar los platos, pero antes de hacerlo, me dirigí al modular para poner un poco de música, y así comencé a limpiar todo el lugar, bailando mientras lavaba los platos, usando como micrófono el trapeador y la escoba, cantando a todo pulmón aunque sabía que lo hacía muy desafinado, pero me servía para distraerme.

James

Me sentía extraño, realmente extraño, no pude descansar después de esa noche, sabía que Chloe estaba decepcionada, después de todo Zach le había contado su parte de la historia, esa donde yo quedo como un idiota en el que no debes confiar, y sabía que eso podría pasar, pero tengo la sensación de que Chloe siente algo por mí, que hubiera reaccionado de esa manera me lo demuestra. Entendía que a Chloe le costaba mostrar sus sentimientos, ahora después de esto, creo que ya no lo hará, por lo que debía apresurarme en contarle mi versión de la historia, sólo espero que no continúe con su actitud intransigente de siempre.

Con ese objetivo me había despertado esta mañana, hablaría con ella, si quería escucharme, perfecto, si no de todas formas lo haría, porque a pesar de que apenas he pasado con ella dos semanas, siento que si me aleja de su vida ya no seré el mismo, y sí, tal vez soy demasiado dramático, pero es la verdad.

Por primera vez desde hace mucho tiempo estaba nervioso, desde hacía años que ya nada me importaba porque sabía que con un poco de confianza se podía realizar lo que sea, pero esta vez no, esta vez es diferente, lo ha sido desde que acepté el ridículo trato con Chloe, sigo sin entender por completo la razón por la que acepté participar en este ridículo juego de niños, porque la verdad eso era. Si no me hubiera involucrado tanto con Chloe, nada de esto estaría pasando.

Respiro profundo antes de salir del auto, había salido a dar una vuelta, necesitaba aclarar un poco la mente y el aire fresco me venía muy bien en esos momentos, pero sin darme cuenta había conducido hasta su casa. Me escabullí con cuidado por el jardín principal hasta llegar a la ventana de la cocina, se escuchaba la música a todo volumen, incluso pude sentir la vibración en la ventana. Tragué saliva una vez más contra la pared antes de levantarme y observar por la ventana.

Planeando Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora