Capítulo 21: Confusión

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-¿Entonces te dijo linda?

Y esa es mi pelirroja mejor amiga, resulta que lo de la amenaza de que le tendría que contar todo lo sucedido cuando regresara era cierta, apareció en mi casa sin avisar y hace 1 hora que está tratando de sacarme información.

-Técnicamente yo también le dije que era guapo.

-Oh, no, querida, tú me usaste vilmente como una excusa para admitir sutilmente que él es guapo, eso se llama cobardía.

Chasquea la lengua y cruza los brazos, se levanta de un salto del sofá para colocarse frente a mí con una ceja alzada para obtener toda mi atención.

-¿Crees que no me he dado cuenta de las miradas que le das? Es obvio que te parece guapo, yo sólo dije la verdad.

-Acaso no tengo libertad para apreciar la hermosa vista que él me ofrece? Y sí, es realmente guapo, tiene un trasero lindo, creo que incluso lo tiene más grande que tú, ¿cómo te sientes al respecto? -se burla.

Me río sarcásticamente, le muestro mi dedo medio y le lanzo lo primero que encuentro, pero ella lo esquiva y comienza a reír, al cabo de unos minutos se calma y seca algunas lágrimas que le saltaron.

-Pero, hablando en serio, todo el mundo sabe que James es guapo, él lo sabe también, ¿entonces por qué no pudiste ser directa y decirlo en voz alta? ¿A qué le tienes miedo?

Pienso la respuesta durante unos segundos, mi amiga me observa con impaciencia, pero finalmente termino encogiéndome de hombros.

-No lo sé, es que todo esto me confunde, realmente, es que un día James es lindo, el hombre perfecto, con quien puedo disfrutar hablando, y al siguiente no lo soporto, hace comentarios egocéntricos y estúpidos, y trata de seducirme cada que tiene oportunidad.

-¿Y eso es malo?

-Claro que no, bueno, sí lo es, porque se supone que cuando el mes termine ya no habrá nada entre nosotros, debería ser sencillo, sólo que todo esto se está volviendo demasiado confuso, ese es el problema.

-No, el problema lo crean ustedes, yo a estas alturas ya habría roto el acuerdo y comenzado de cero si es que en realidad quiero estar con él, ¿para qué complicarse tanto?

-Es que no lo comprendes, ha pasado muy poco tiempo, y tal vez James es así por experiencia, porque es un mujeriego, ¿qué tal si él no me quiere? Yo sólo... No quiero salir herida -digo lo último como un susurro.

Las lágrimas comienzan a llenar mis ojos, tengo la necesidad de sentarme y cerrar los ojos para tranquilizarme un poco, respiro profundo. Siento la mano de Leslie apretar suavemente la mía cuando llega a mi lado.

-No lo sabrás si no lo intentas.

-Es que eso es lo que no quiero, no quiero intentarlo, y después parecer una estúpida, ¿sabes? Es muy difícil que James cambie, y más cuando ha sido mujeriego toda su vida, por lo que prefiero evitar que me rompa el corazón, ya bastante tengo con lo de Steve.

-Pero Steve no quería romperte el corazón, y dudo que James quiera hacerlo, créeme, se ve demasiado interesado en ti.

-Pero lo hizo, y no estoy dispuesta a pasar por eso otra vez.

Y así di por terminada la conversación sobre ese tema. Leslie abrió la boca para tratar de decir otra cosa, pero suspiró y se dejó caer dramáticamente en el sofá.

Continuamos viendo una película, aunque mi pelirroja amiga no prestaba atención porque estaba muy atenta a su celular como de costumbre. Cuando terminé de limpiar toda la sala, regresé a sentarme al lado de Leslie, quien se encontraba hablando por teléfono, tenía cruzadas las piernas sobre el sofá como si fuera un vaquero, constantemente se mordía las uñas o el labio y rodaba los ojos, gruñó exasperadamente antes de seguir respondiendo con monosílabos, cuando terminó la llamada se giró hacia mí.

Planeando Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora