Capítulo 38

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POV' Verónica.

-¡Ay, mi niña, debió ser horrible- lamentó Sinu entregándome una taza de té.

Estábamos sentados en la pequeña sala cuando había terminado de narrar lo sucedido hace unas horas. Todos quedaron sorprendidos de cómo logré escaparme de las intensiones de ese tipo.

-¿Segura que no lograste verle la cara?- preguntó Alejandro. Negué con la cabeza frunciendo el ceño; no recordaba haberle visto el rostro -Bueno, tampoco es que hubiese cambiado algo si hubieras identificado el rostro; la policía por lo general no logra nada ya que es "común" los robos en esa zona-

-No tenía nada de valor en ese momento- dije -No podían robarme nada-

-Ni siquiera la virginidad- susurró Dinah, pero aún así, Normani le dio un zape.

-Bueno si- admití -Llegué a pensar en que apenas viera que no llevaba nada conmigo, me... me violaría- terminé diciendo.

-Y no solo eso- volvió a hablar la más alta -Te pudo haber violado, asesinado, robarte tus prendas y luego vender tus órganos en el mercado negro... Y no precisamente en ese orden-

Sinu la miró con cara de reproche, Camila se puso pálida... verde... de todos los colores «Esa es su cara de querer vomitar» afortunadamente no lo hizo. Normani negaba con la cabeza, pero en su boca había un abismo de sonrisa.

Yo sí reí por su comentario.

-¿Cómo puedes reírte de algo tan serio?- habló Lucy por primera vez desde que me encontraron -¿Piensas que lo que te pasó fue divertido?- su tono de voz era de regaño.

-Tu cállate, niña. No tienes derecho de hablarle así porque te recuerdo que si no hubieses sido tan imbécil con ella, mi hermana no habría salido corriendo del club y nos hubiéramos ahorrado todo este lío- objetó mi hermana dando un paso hacia el frente y señalando a Lucy con el dedo -Ni siquiera sé por qué acepté en ayudarte, dándote la dirección de donde estaba para que pudieras verla ¡já! que ingenua fui. Si tan sólo hubiera sabido que vendrías a lastimarla, porque eso es lo que siempre haces, hacerle daño, ¡jamás! te hubiese dado la dirección, mucho menos acompañarte- todos estábamos en silencio. Incluyéndome. De verdad quería defender a mi latina favorita, pero las palabras no salían de mi boca -¿Sabes? siempre pensé que Verónica era una idiota por no arriesgarse contigo, pero al parecer la idiota eres tu. Creí que mi hermana se había fijado en alguien que valía la pena, no en una casanova que lo único que hace es romperle el corazón cada vez que tiene oportunidad ¿te diviertes viéndola sufrir?, ¿por qué le das ilusiones? hablándole bonito y besándola sabiendo que tienes novia. No puedo creer que exista gente cómo tu- concluyó, escupiendo las palabras con rabia.

Al parecer, las palabras de Daniela le pegaron duro a Lucy porque sus hombros cayeron en derrota repentinamente, al igual que su cabeza; tenía los puños apretados y no hacía sonido alguno. Creo mi hermana había exagerado un poquito con sus palabras, no tenía porqué decirlas; al menos no de esa manera. La única que tiene la culpa aquí soy yo por imprudente, además, pienso que la que debería estar molesta soy yo y no Daniela.

Vi cómo Lucy suspiró, se dio vuelta y salió del departamento a pasos apresurados. También vi que Lauren salió tras ella.

-¡No debiste decirle esas cosas!- le hablé a mi hermana «Lucy no es mala persona. Ella no tiene la culpa... ¿o si?»

-Veo que el amor te tiene ciega, hermanita-

-¡Al menos se lo hubieses dicho con algo más de tacto!- mi corazón latía fuerte, él me decía que debía ir con mi ojicafé, pero la parte razonable de mi cerebro decía que es mejor darle su espacio.

¿Es normal sentir ésto? (Vercy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora