- No te desanimes, tienes una muy buena habilidad y combinado a que sabras usar un arma, tendrás muchas posibilidades.- O eso creo
-Muchas gracias.- Me da una sonrisa.- ¿Ya llegamos?
Se levanta de su asiento y ve encantada al Capitolio, la primera vez es así, me recuerdo, los vitores y las porras de los ciudadanos comienzan. Todos estan emocionado por los juegos.
Bajamos del tren y unos agentes de la paz nos escoltan hacia el centro de entreamiento, una vez allí los tributos quedaran en manos de los estilistas para que los maquillen y los presenten oficialmente al publico del Capitolio.
Mientras yo, estaré en una sala junto a los demás vencedores. Será una experiencia interesante. Debería entablar amistades para una posible alianza de tributos.
Entro a la sala y lo primero que veo es que hay un bar. Yo no tomo bebidas alcolicas, pero me imagino que otros sí, hay pequeños grupos de vencedores conversando enérgicamente y otros que estan solos, viendo hacia la ventana, imito a estos ultimos ya que no tengo a nadie con quien hablar.
- Hola, vencedor.- Oigo una voz tras de mi.- ¿Como te sientes despues de ganar unos juegos que se volcaron contra tí?.- Es Finnick Odair.
- Bien, en especial cuando... ya sabes pude eliminar a tus tributos.- Digo sonriendo.
- ¿Con cuantas lo has hecho?.- Dice sin dar importancia a mi comentario.- ¿una? ¿dos?.
-Tres .- Corrijo.- ¿Eso es normal?.- No se por que le pregunto eso, símplemente salió de mi boca.
- Para empezar sí, pero deberás acostumbrarte, sera tu vida de hoy en adelante.- Es como un consejo sincero, bajo la guardia, debido a que no tengo nada en contra de Finnick.- Agradezco que ganaras, así me quitarás un poco de trabajo de encima, por que al parecer también eres algo deseado por la gente del Capitolio
- ¿Cómo estan? .- Es Gloss, el vencedor del distrito 1.- ¿Que tal Finnick? .- Se saludan con un abrazo, ellos ya se conocen, es más, tal vez unieron fuerzas para matarme el año pasado. Yo soy el nuevo aqui.
Siento como todas las miradas de los demas mentores se dirigen hacia nosotros, deben estar pensando que ya se reunió el grupo de profesionales.
Aprovecho la conversación de Finnick y Gloss para hacerme a un lado, junto a quien creo que es Johanna Mason, la vencedora del distrito 7. No hablo con ella, pero siento su indiferencia y estoy seguro de que preferiría no estar aquí, desde que ganó, hace un par de años, los tributos del 7 son vistos con otros ojos, como si todos ellos fueran máquinas de matar solo con un hacha.
En el balcón que nos encontramos se puede ver toda la calle por la que desfilarán los tributos, espero que este año Aura vista a los tributos de forma sensacional. La gente ya empieza con las vitores a los diferentes distritos, pero el que mas predomina es hacia mi distrito. Parece que aun faltan unos cuantos minutos para que de comienzo, asi que voy a la barra, pero al parecer estos vencedores solo se enfocan en beber, no hay nada de comer. Una risa tras de mi me hace voltear. Es el único vencedor del distrito 12.
- No me sorprende nada de ti.- de su boca sale un olor a licor.- Eres el típico profesional de los distrito ricos.
- No fui un profesional si no lo recuerdas.- respondo.
- Eso no cambia nada, ustedes viven para eso.- Se sienta en los sillones próximos a la barra.
- Mejor preocupáte por tus tributos.- añado.- que por tener un mentor como tu, pierden varias oportunidades.
Antes de que me conteste, veo que esta quedandosé dormido en la silla, asi que no le digo nada más, la gente empieza a gritar, por lo que me da la impresión de que el desfile comenzó.
Los primeros distritos en salir son los mas llamativos, la vestimenta no cambió mucho respecto a anteriores años, el distrito 10 y 12 estan completamente desnudos, pero lo que los diferencia es que unos estan pintados con manchas de vaca y los otros completamente de negro.
La gente rompe en risa al ver esto, me siento mal por ellos, tener un mentor ebrio y unos malos estilistas debe ser poco alentador para ellos.
Los carros dan una vuelta frente a la casa presidencial, nos ordenan que bajemos a recibir a los tributos y que los llevemos al centro de entrenamiento.
Lilie esta guapísima, la luz ilumina su maquillaje y su traje y la hacen ver imponente. Esto ayudara a que la vean mejor y se interesen en ella.
- Estuvieron muy bien.- digo, mas para Lia que para Kent. El parece creer que no necesita mis consejos ni ayuda. Lo veremos en los juegos.
- Los llevare hacia las habitaciones.- Nos comunica Ayleen.- Por cierto, quedaron fabulosos.- añade, deletreando la ultima palabra.
El centro de entrenamiento, se ha convertido prácticamente en mi segundo hogar, he pasado por varias cosas aqui.
- Bienvenidos, aqui pasaran hasta que comiencen los juegos.- explica Ayleen.
- Seria bueno que fuesen carismáticos con el público.- añado mientras nos sentamos a comer.
Por la televisión estan pasando mis juegos, al parecer, gustan mucho al Capitolio, estan en la parte en la que estoy oyendo todo desde la cueva.
- Pudiste haber matado a todos .- Dice Kent.- Que mediocre.
- Eso no cambia el resultado .- digo mientras me llevo un pedazo de carne a la boca
- Patético .- añade.- cuando gane estos juegos veras lo que es un verdadero vencedor.
- No te precipites, aun no conoces a los demas tributos .- Digo un poco irritado.
- Soy el mejor, solo mira a esta inutil.- comenta refiriéndose a Lilie.- No lo tomes a mal, pero te mataré.
- ¡Ya cállate! .- hablo un poco fuerte .- Es mejor que los dos estén juntos.
- No quiero hacerlo, no necesito tampoco tu ayuda cuando gane ya veras lo que pase.- dice levantándose de golpe de la mesa.
Esto no es un buen inicio como mentor, pero si el no quiere mi ayuda, solo me concentraré en Lilie, al fin y al cabo, los mentores siempre eligen al tributo mas fuerte para ayudarlo. En mi caso sera al menos idiota.
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72 Juegos del Hambre
FanfictionJay Ruess, originario del Distrito 2 está listo para convertirse en un Agente de la Paz y servir al Capitolio, pero todo cambia cuando es seleccionado como tributo para los Septuagésimo Segundos Juegos del Hambre.