Dos extraños bailando bajo la luna
Se convierten en amantes al compás
De esa extraña melodía, que algunos llaman destino
Y otros prefieren llamar, casualidadCamila
—Necesito tu ayuda — mencioné con una sonrisa hacia Thiago mientras veía como él enarcaba la ceja por mi estado de ánimo, sin embargo, solo obtuve otra sonrisa compensatoria y su atención —Son los nuevos exámenes de Sofi y quiero que tú también me des tu opinión, eres el experto aquí —argumenté haciendo que él simplemente asintiera mientras le extendía la carpeta con los exámenes que le habían realizado hace tan solo dos días y que a pesar de que yo misma los había revisado infinitas veces quería la mirada de alguien que no fuera el médico de ella.
—Buen día para ti también Cami —sugirió haciendo que rodara los ojos —¿Cómo te ha ido en el turno Thiago?—volvió a preguntar haciendo que yo simplemente lo ignorara —Bastante bien, gracias por preguntar —refutó en un bufido que solo me hizo reír.
—Eres un idiota, ¿te lo han dicho?—pregunté haciendo que él riera de vuelta sin dejar de mirar los resultados que estaban en sus manos.
—Vaya —comentó con cierta emoción en su voz —El trasplante va bastante bien, Cami —mencionó haciendo que una sonrisa se posara totalmente en mis labios — Con esto es probable que pueda hacer ejercicio como cualquier persona en tres meses —argumentó mientras yo asentía presas de las lágrimas que invadían mi emoción.
—Lo sé, lo mismo me ha dicho de Rua por teléfono hace un par de días pero quería tener la opinión de otra persona—refuté sintiendo como mi pecho n0 podía dejar de llenarse de emoción frente a lo que estaba sucediendo, era la primera vez que tenía un diagnóstico tan prometedor para Sofi luego de casi quince años siendo operada constantemente al fin podía ser una chica normal —Entonces estamos bien —pregunté mordiendo mi labio ante la presión de que no podía estar más feliz.
—Felicitaciones señorita Cabello, su hermana está bastante sana — Thiago no tardó en pararse de la mesa para envolverme entre sus brazos mientras yo no dejaba de llorar frente a lo que estaba sucediendo —Al fin, una buena noticia para ti pequeña —me dijo animado mientras limpiaba con sus pulgares mis lágrimas — Eso merece una celebración, yo invito un par de cafés —afirmó entusiasmado y yo solo suspiré a ello sintiendo como sus brazos volvían a sentirse el lugar más seguro que podía tener cerca — ¿qué dices?.
—Me parece que necesito un poco de capuchino —sentencié haciendo que él riera por ello.
—Entonces hoy ha sido un buen día — agregó.
—Uno de los mejores de todos —respondí suavemente mientras tomaba la carpeta con los exámenes y volvía a ponerlos en orden, el brasileño no tardó en darme un pequeño beso en mi cabello mientras salíamos de la sala de estar hacia la cafetería que solo se encontraba a un par de metros de distancia. Sus ojos pardos se encontraban llenos de ilusión frente a lo que estaba sucediendo, él conocía a Sofi casi desde que era una bebé y también había estado atento a cada una de sus operaciones, a cada uno de esos exámenes, él adoraba a mi hermana de la misma forma que ella lo hacía con él.
Thiago había estado presente en todo el proceso que había sido la vida de la pequeña rubia desde que nació y era el único que podía entender la emoción que había tras mis labios ante los resultados positivos que tenía entre mis manos.

ESTÁS LEYENDO
Perfect
DiversosFue en aquel momento cuando el tiempo se detuvo y las manecillas del reloj no se atrevieron a seguir girando, cuando me di cuenta de que la perfección no estaba en sus ojos, ni tampoco en la curva más bonita que tenía, ni tampoco estaba en su mirada...