Mio (Kookmin) ~corrigiendo~

Cambios

Han pasado tres años desde que Jimin comenzó a tener citas, pero aun no ha tenido un novio y no es por falta de pretendientes, sino a los 4 alfas sobreprotectores que cuidan al omega, estos de manera sutil - y a veces no tanto- alejaban a los alfas que no creían merecedores de su pequeño, es decir, a todos, ya que si lograban superar a los dos mas jóvenes, los dos mayores los hacían desistir, claro si apreciaban su vida.

Justo ahora Jimin se encuentra en una cafetería hablando con Taehyung de su mala suerte en el amor, porque el omega no esta consciente de lo que pasa a su al rededor.

— ¡Taeeee! Moriré solo y sin haber amado — se quejó el omega mas bajito.

— Y virgen — respondió el otro dando un sorbo a su malteada.

— Por favor, Tae, no enfatices lo obvio — volvió a quejarse recargando la frente en la mesa con resignación — Te burlas de mi porque tu ya tienes tu marca de unión — El moreno frente a el parecía inflarse como pavorreal orgulloso al escuchar a cerca de su reciente marca.

— La verdad ni es tan genial como parece, solo puedes sentir sus emociones, es como si fueran una sola persona y... — Tae hablaba tan entusiasmado hasta que notó el rostro decaído de su amigo — es decir, ¿dónde queda tu individualidad?, ves no es tan bueno.

Jimin lo miraba escéptico, era obvio que a Tae le encantaba ahora estar unido a Hoseok.

— ¿Me estas jodiendo verdad? —  soltó con tono molesto — desde que tienes esa cosa en tu cuello no dejas de decir lo bueno que es.

Inconscientemente Tae tocó su cuello delineando la reciente cicatriz mientras sonreía.

— Esta bien, si es genial, pero todo llega en su debido momento — poso una de sus manos en el hombro del mas bajito — tu no sabes si tu pareja destinada aparecerá en este momento por esa puerta — señaló hacia la puerta de la cafetería y ambos voltearon en esa dirección.

Justo en el momento en que ambos miraban hacia la puerta, una pareja entraba a la cafetería, eran un alfa muy alto y guapo acompañado de un lindo omega, se veían muy enamorados.

— Olvídalo, tal vez no por esa puerta, tal vez en...

—No hay prisa Tae, tengo toda una vida por delante — Intentó sonreír ante sus propias palabras, tantas veces había escuchado esas mismas palabras de la gente a su alrededor que ya comenzaba a creerlas —.

— Ya se que hay que hacer, toma tus cosas y vayámonos — dio un último sorbo a su malteada, dejaron dinero sobre la mesa y salieron de la cafetería.

Jimin seguía a su amigo sin preguntar a donde, iban corriendo al parecer sin rumbo, dieron unas cuantas vueltas hasta toparse con un salón de belleza frente a ellos.

— He aquí la solución a tus problemas — Sonrió ampliamente mirándolo.

— No Tae, debes estar jodiéndome, no veo como un cambio de look pueda ayudar en algo —Jimin estaba obviamente molesto.

—¿Donde quedo el dulce omega?, yo no te crié así — Tae comentó con un fingido tono dolido — lo que tú necesitas es un cambio de actitud pero eso no lo puedo lograr en un día, así que empezaremos por el cabello — decía con diversión mientras empujaba a Jimin al local.

Al entrar al local un par de señoritas los atendieron, preguntando que clase de servicio requerían.

— Sólo él — lo señaló — necesitamos un cambio de imagen que diga "soy un omega dulce y soltero".

Las estilistas que los atendían asintieron con una ligera risilla, por un momento Jimin pensó que esta sería una mala idea pero aun así no se resistió, pues pensó "es cabello, vuelve a crecer".