En tu mirada. {Shiaris} {Failoh} {Faloh} {Sharis}

Trece.

Faris sonreía de esa manera boba que le hacía rodar los ojos más sin embargo le causaba demasiada revolución en su estómago.

No podía evitar mirarlo y sonrojarse y luego hacerse al desentendido.

Aunque los labios le dolieran por lo hinchados que se hallaban ante los muchos besos pequeños y grandes que se dieron la noche anterior cuando el rizado se coló un rato a su habitación para "desearle buenas noches", que se convirtió en un momento de varias horas.

Ahora desayunaban todos a gusto mientras suponían ellos, nadie se daba cuenta.

Ian tomaba su taza de café con tranquilidad mientras que Bear le platicaba de los muchos lugares que Faris y él habían investigado y decidido visitar.

El alfa asentía a él dándole la razón, sonriendo cuando veía esos mieles brillar con emoción. Sin duda, una muy grata imagen que sin darse cuenta, empezaba a disfrutar.

- Buenos días, chicos!, lamento la tardanza.- Todos salieron de sus asuntos mirando a ver entonces al tatuado.

Frank les sonrió sentándose frente a ellos, poco después siguiéndole Gerard que solo ejecutó un leve "buenos días", con una diminuta sonrisa:- Lamentamos no estar presentes en la cena de ayer, se nos presentaron unos cuantos problemas, ya saben. Pero nos alegra convivir un rato antes de que salgan a su aventura.

- Oh, no hay problema. Nosotros entendemos bien la situación.- Expresó Faris.

- Bueno. Y entonces, ya saben qué lugares visitar?- Los chicos asintieron.

- Aunque aún tenemos nuestras dudas sobre cómo irnos. No conocemos nada de aquí.

- Oh, yo podría ayudarlos!- Todos alzan la mirada hacia una bella chica que va entrando al comedor.

Con un elegante porte, poseedora de unos ojos verdes y el cabello azabache, algo ondulado. Esbelta y alta. Casi a la altura de Faris.

- Cariño, buenos días.- Habla Frank. Ella le sonríe y se acerca a besarle la mejilla y luego va hacia Gerard, abrazándole por la espalda y dándole un leve beso en su cabeza.

- Buenos días papas.

- Ella es mi hija, Bandit Way.- Anuncia el alfa. Todos sonríen y la saludan.

- Yo gustosa les acompaño.- Y como no les parece mala idea, aceptan enseguida.

El desayuno transcurre de manera tranquila y a simple vista Bandit Way parece una gran persona, con esa cantarina sonrisa y esos banales temas de conversación que mantienen a todos atentos.

Incluso llega a pasar desapercibido los ciertos contactos que la chica hace con Faris, quien ríe con ella sin darse cuenta de que había sido fichado.

Shiloh empieza entonces a estremecerse, y entonces los contactos se hacen más constantes, y no puede creerlo.

La esencia de la chica no es notable a simple vista, entonces, una pequeña motivación como lo es el rizado, y Boom!, la esencia suave de melón aparece, con inclinaciones nada lindas hacia él que lo distingue perfecto por ser de igual modo omega.

- Nos vamos?-

- Huh?- Sale de sus pensamientos notando que se había perdido. Frank y Gerard no están, Ian y Bear se han puesto de pie y Bandit, por suerte, también había desaparecido.

- Qué ocurre?- El rizado le mira preocupado y él niega instantáneo poniéndose de pie.

Aceptó actuar, ser él omega de Faris, y apenas su mente lo procesa, esto pasa.

Ahora se siente extraño, por qué ve como una amenaza lo que ocurre cuando no ve culpa, ya que la chica no sabe nada de ellos.

Que iba a saber!?, cree que son hermanos.

- Y los chicos?

- Se adelantaron con Bandit a buscar un auto donde quepamos todos. Seguro que estás bien, Shiloh?- Vuelve a preguntar. El interés que Faris le muestra le hace sonreír en un punto donde su omega se hincha de ternura.

- Lo estoy.- Susurra. El alfa repasa su pequeño cuerpo con detalle sonriéndole entonces cuando no ve amenaza, posando sus manos en su cintura y acercándolo a él de manera suave. Roza su nariz a la suya y asiente.

- Pasaremos unos días increíbles, ya lo verás.- Antes de capturar con lentitud uno de sus labios y así, tomar ambos de manera ágil para proceder a un beso que es tan delicado y a la vez tan profundo.

Se separan con dificultad respirando el aire del contrario, sonriéndose.

- Seguro que si.- Afirma el rubio. Vuelve a rozar su nariz a la de Faris y le besa casto antes de separarse por completo y tomar su mano para con una risa, llevarlo consigo a la salida del comedor donde ya no hay nadie, donde ya no se escucha nada.

Donde pueden ir entrelazados hasta la salida por qué son un alfa y su omega.

***
Hey babys!

Este capítulo es algo aburrido pero necesario so... (?)

Ya vienen lo "bueno" creo xD

Gracias por leer 💕