Bad Boy, Innocent Girl

16: Correr y huir

Capítulo dieciséis: Correr y huir

*Song Nih Nah*

Lunes 24 de junio, 2013

Cuando las cosas buenas suceden parece que todo es color de rosas, creo que tengo esa idea puesta en mi cabeza porque cuando comienza la semana y tengo un montón de cosas que hacer aun así pienso que todo es hermoso y no me voy a frustrar.

Tener a Jay a mi lado otra vez es un arma de doble filo, ambos sabemos que en cualquier momento nos podemos dañar, sabemos que tenemos las armas necesarias para cortar con esto y que estamos solo forzando la felicidad, pero... ¿Por qué aun así se siente tan real?

Jay tiene el tráfico de drogas por detrás, yo... tengo un pasado un tanto difícil, un hijo oculto y tal vez una familia difícil. Si tan solo nos hubiéremos conocidos 3 años atrás esto sería completamente diferente, quizás yo no tendría miedos a cada paso que doy, no estaría en constante crisis de retraerme o ser espontanea, tal vez sería un poco más efusiva o sería feliz de verdad.

-¿En qué piensas tanto? -pregunta Jay mientras caminamos hacia uno de los salones.

-En tantas cosas -suspiro observando al rededor. -A veces envidio tanto a las personas normales.

-Yo no las envidio, si lo piensas, cada uno tiene su secreto, su propio dolor que soportar... -responde Jay tomando mi mano.

Me retiro de golpe y me alejo unos pasos hacia el lado.

-¿Qué sucede? -pregunta sorprendido.

-No aquí -susurro mirando a mi alrededor.

-¿Por qué o qué?

-Mis padres podrían tener aliados aquí que puedan vigilarme, o tal vez hayan personas de mi pasado...

-Estás siendo paranoica, Nih Nah -me detiene.

-Lo siento.

Vuelvo a acercarme y lo tomo del brazo tratando de buscar sus ojos, me evita haciendo que me gire completa para terminar abrazándolo.

-Estamos llamando la atención -susurra bajando su mirada hacia mí. Le doy una sonrisa suave para apretarlo más fuerte.

-No quiero que esto termine.

-¿Por qué terminaría? -pregunta inclinándose hasta besar mi frente.

-Porque las cosas hermosas siempre terminan -susurro.

Jay me aprieta más contra su cuerpo y esconde su rostro en mi cuello.

-Pues esto no es hermoso, dos personas heridas jamás será algo hermoso, entonces... así nunca terminará...

-Eso es lo más triste y cursi que he podido escuchar.

Me separo de él sonriendo y tomando su mano.

-Vamos o llegaremos tarde.

Jay me da un último abrazo más un beso en la frente para caminar finalmente hacia nuestra clase.

*

Viernes 28 de junio, 2013

Durante lo que queda la semana nos mantenemos en un tira y afloja constante, entre mis "ligeros" cambios de humor de entre que lo quiero y no lo quiero, de entre que se aleje o se acerque, o que tal vez alguien que conoce a mis padres nos puede ver. Todos son constantes temores que me hacen ser voluble siempre entre una contradicción y otra.