Mini-serie: La casita de Natsu (14)

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— Vamos, no pierdas tiempo, quiero tenerte dentro de mí...

Mavis se puso de perrito, moviendo el trasero a los lados, queriendo llamar la atención de Natsu. Pero eso no hacía falta. Él no era Zeref. A Natsu le decía ''brinca'' y él preguntaba qué tan alto. Natsu si apreciaba el cuerpo de Mavis, sus cavidades húmedas y su casi ninfomanía. ¡Pensó seriamente en aceptar la propuesta! ¡Si su hermano no quería rubia, él sí! ¡Quería tres rubias: Una Lucy de desayuno, Dimaria en el almuerzo y Mavis en la cena! Y un bocadillo de media noche, con las tres juntas. ¡Ese era el tipo de vida genial, que se daba la gente de la televisión, aunque dijeran que no!

— ¡Ahora mismo! ¡Gracias por esto!

Natsu se acomodó tras ella, metiéndose entre sus piernas. Empujó su miembro adentro, adentrándolo todo en una estocada, que le sacó un par de gritos a Mavis; no de dolor, de puro placer. ¡La iba a romper! ¡Al fin! ¡Ya no estaba nada tímido por ser cuñados! ¡Qué bueno!

Él se movía fuerte y profundamente, haciendo un extraño sonido, al chocar contra el trasero de Mavis. Parecía que aplaudía. El cuerpo de Mavis, se movía de adelante atrás, por la fuerza aplicada; ella tenía la lengua de fuera y los ojos volteando en diferentes direcciones. Ya le daba igual el amor. ¿Una noche frente a la chimenea, sin hacer nada depravado, era mejor que esas penetraciones? No, para nada. Al menos, en ese momento, no lo veía de esa manera. Tal vez se sentiría un poco sucia después, pero ya le pediría a Natsu, que la ayudara a limpiarse en el baño.

— ¡Más! ¡Más! —Gritaba Mavis, empuñando las manos. — ¡No quiero seguir sufriendo por culpa de tu hermano! ¡Cuando tengas edad, tienes que casarte conmigo! ¡¿Entendiste?!

Natsu le tapó la boca con su mano.

¿Qué decía? ¿Matrimonio? Todavía ni terminaba la preparatoria, apenas estaba en pañales, necesitaba más resistencia para aguantarle el trote a Mavis. Por el momento, se iba a concentrar en dejarla satisfecha, al borde del desmayo y lo que sucediera después, pues sería después. Ya pensaría en cómo salir de la situación sin comprometerse a un amarre con Mavis.

Se pegó por completo a ella, moviendo su cadera en círculos, tocando cada rincón interno de Mavis. Continuó así por algunos minutos, hasta que se corrió dentro de ella, llenándola al grado de desbordar fuera de su vagina.

— ¡Sigamos! —Gritó.
— ¡¿Qué?! —Natsu se puso azul. — ¡Pero...!
— Nada de peros. Sigue el otro lado. Apúrate.

***

Ume reunió todas sus fuerzas, como Goku al hacer la genkidama y empujó a Acnologia, derribándolo de la cama. ¿Quién se creía para tocarla? ¿Natsu? ¡Por favor, Natsu era más guapo!... En su mente, claro. Sea como sea, no se iba a dejar profanar, por nadie que no fuera Natsu. Su querido Natsu, su amor imposible, el que le gustaba desde la primaria; cuando la salvó de aquel mocoso, que le quería quitar su almuerzo sólo para pisarlo.

— ¡Óyeme bien, animal! —Ume lo apuntó con su dedo. — ¡Me estoy reservando para Natsu! ¡Pero si tanto quieres jugar al cabroncito, pues te lo voy a dar, puñetas! ¡Y no quiero que estés chillando!

Las palabras ''cabroncito'' y ''puñetas'', dichas en español, no logró entenderlas; pero con el tono, se dio cuenta, que se trataba de algún insulto. Después buscaría en el traductor. Ume se le echó encima, jalándole las greñas con la mano izquierda y con la derecha, le apretó la anaconda.

— ¡Me haces daño, estúpida! —Acnologia se quejó, buscando con que darle un golpe en la boca. Eso la dejaría fuera de combate. — ¡Oye, no tan fuerte, no! ¡Para ya, bastarda! ¡Ya! ¡No estoy jugando!

Ume le jalaba el miembro, con tanta fuerza, que parecía querérselo arrancar de un tajo. Se puso duro. Una reacción común del cuerpo. En verdad, no hablaba en serio, cuando se ofreció a desvirgarla. ¡Era una broma, joder! ¿No aguantaba una bromita inocente? Tal vez se pasó un poco, al empujarla sobre la cama, estando casi desnudo; lo admitía, pero no era para arrancarle el pito.

— ¡Que...!

Qué humillante. Se había corrido en unos segundos.

La sonrisa de Ume, quien sabía muy bien lo que había hecho, le caló en lo más profundo de su alma. Se vengaría de eso. Él no andaba con tonterías, no le daría el más mínimo remordimiento, arruinarle toda su diversión. La iba a pagar muy caro por andar de dominante. 

***

Ume-chan violó a Acnologia. De alguna forma. ¿A qué no se lo esperaban? ¿Qué dijeron? ¿''R.I.P virginidad de Ume''? :v ¡Pues no! Por otro lado, Mavis quiere matrimoniarse con Natsu, esperemos a ver cómo lo toman las otras... ¡Espero les haya gustado! ¡Nos vemos en el próximo capítulo! ¡Gracias por leer! 

Tú y yo (Natsu Dragneel harem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora