Narrador
En un laboratorio de máxima seguridad, dirigido por Katzuki Hará un doctor especializado en genética molecular, capaz de lograr la manipulación de estos genes, se encontraba reunido con varios científicos especializados en está rama de la ciencia en una sala de manipulación de genes, las luces estaban encendidas y todo estaba en completo silencio.El sudor corría por la frente de todos, el pulso de Katzuki Hará no podía temblar, ni podía fallar y dañar al experimento. Un mínimo error y sería su fin, ya que los experimentos anteriores habían sido un completo fracasado y no habían logrado terminar el periodo de gestación.
Estos humanos jugaban a ser Dios, alterando la genética molecular de un ser vivo mezclándola con otros genes no necesariamente humanos. Su único objetivo era la creación de una nueva raza, un humano creado a base de mutación genética.
Los científicos del laboratorio sonreían, habían logrado su objetivo. De ahora en adelante solo tenían una prioridad que esa nueva célula creciera y se desarrollará para formarse en un humano. Lo mantenían en observación, viendo su rápido desarrollo, en un mes ya se podía ver la silueta de un bebé y a los dos meses ya sabían que era un varón. El periodo de gestación solo fue de cinco meses.
El veinticinco de diciembre, ese nuevo ser vivo abrió sus ojos al nuevo mundo, un hermoso varón de cabellos rojos, ojos color cobre y piel blanca. Lo alimentaban y le daban todos los cuidados necesarios, monitoreaban sus signos vitales para evitar cualquier complicación. A los dieciséis años llegaría a su edad adulta y reproductiva con lo rápido que evolucionaba eso sería en cuatro años.
Con solo un año pudieron notar que el experimento presentaba ciertos problemas por llamarlo de algún modo. El niño era muy rebelde, no lograban controlarlo, era un gran pesar pues había desarrollado el sentido de gusto y el olfato superior a un humano normal. En muchas ocasiones se comportaba como un animalito, haciendo muy difícil el poder conocer todas las habilidades que su cuerpo había desarrollado, así que decidieron mantenerlo aislado y en confinamiento, practicando constantemente toda clase de pruebas y exámenes en su cuerpo.
En el área de confinamiento completamente rodeada por vidrio de alta seguridad, se encontraba el experimento. En ese lugar solo existían tres habitaciones, la primera donde estaba la cama, el baño, un pequeño closet para guardar la ropa y una mesa de noche. La segunda habitación solo constaba de un sillón, además del televisor y la última sala era un depósito del laboratorio. Siempre era monitoreado por cámaras, menos en el baño, ese lugar era el único donde el gozaba de privacidad.
Tan aislado lo mantenían, que nunca le enseñaron a leer ni escribir, lo poco que conocía y sabía del mundo exterior era a través de la televisión o por lo poco que le compartían las enfermeras del laboratorio que cuidaban de él. Sin embargo ellas no podían educarlo correctamente, ya que estaba prohibido y violarían una regla del laboratorio.
Ellas le llamaban "Demonio Rojo" de cariño, por el rebelde comportamiento que mostró desde pequeño y por el color de su cabello. Pero la triste verdad era que no tenía nombre, los científicos no consideraron necesario ponerle uno, solo lo llamaban #13 - 12-25.
#13 - 12 -25 (Karma) POV
Llevaba despierto hace varios minutos atrás, odiaba esté lugar y a mis creadores también. La oscuridad aún llenaba el lugar, me cubría con las sábanas para evitar el frío.Sabía que era un error, un organismo defectuoso, no entendía porque no me destruían. Ellos se librarían de mí por completo y yo de ellos.
El reloj despertador empezó a sonar y la luz hizo su aparición. Por más que tratará de ver el exterior, la ventana era muy alta. El sistema era por completo mecanizado las luces se encendían cuando eran tocadas por la luz del sol y todo quedaba en completa oscuridad a las ocho de la noche.
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Atracción (Asano x Karma) Pausada
FanfictionUn experimento molecular creado en un laboratorio de máxima seguridad. Encerrado desde su creación sin ninguna interacción con el mundo exterior por considerarlo peligroso. "Demonio rojo" era llamado, por el cabello de color fuego que lo caracteriz...