Sorry, but I won't give up [Kuroo Tetsurō x OC/Tú]

Capítulo 12: Reconciliación

Sentí como de repente sus brazos rodearon mi cuerpo por detrás y me atrajeron hacia a él con firmeza. No pude evitar pegar un pequeño brinco cuando sentí que una de sus labios rozaban mi hombro, y su respiración chocaba contra mi cuello. Suspiré de forma silenciosa y cerré los ojos.

El cosquilleo interno volvió después de haberse hecho presente aquella vez, y para colmo estaba tan pegada a él que tal vez estuviera sintiendo que me iba a dar un infarto en cualquier momento.

¿En qué momento había comenzado a pensar así?

— Rena — su voz me sacó de mis pensamientos. Me percaté de que ya no sentía ese calor en mi espalda por lo que me giré — Toma póntela — volvió a ofrecerme la chaqueta. Hasta ahora no me había fijado en que se había quedado en manga corta para que me la pusiera antes — Será mejor que vayamos dentro, aquí nos vamos a congelar — con una de sus manos me tomó del brazo para tirar de mí. El contacto de su piel con la mía hacia mucho contraste, yo estaba helada y sus manos eran tan cálidas...

Aún seguía pensando en lo que el azabache había dicho. Sus palabras seguían resonando en mi cabeza una y otra vez.

"¿Acaso tú estás teniendo en cuenta mis sentimientos ahora mismo?"

— ¿Te has quedado muda? — sus pupilas se clavaron en las mías — Parece mentira que estés tan callada.

— ¿Qué? N-no, no — froté mis manos para darles calor — Estaba pensando.

— ¿El qué? — me miró curioso.

— Si te lo contara dejaría de ser un pensamiento y se convertiría en simples palabras — sonreí — ¿No te parece romántico el concepto de "pensamiento"? Es algo tan íntimo que solo tú puedes ser dueño de ellos.

— No sabía que fueses tan filosófica — sonrió de medio lado.

— Pues ya lo sabes — solté una carcajada — Creo que es hora de que vuelva a la habitación, o las chicas se preocuparán.

— ¿Te acompaño? — levantó su cabeza mirando al cielo.

— No te preocupes, no me voy a perder de nuevo — bromeé.

Me removió el pelo con una gran sonrisa en el rostro.

— ¡Hasta mañana! — me despedí tras alejarme de él.

Escondí la mitad del rostro en la chaqueta, aunque me di cuenta de que fue una mala decisión segundos después,  porque olía jodidiamente bien a él, y eso me hacía querer que me abrazara de nuevo.

Mi teléfono vibró, había recibido un mensaje de Mei "¿Piensas quedarte toda la noche ahí? ¡Vuelve de una vez, vas a resfriarte! ಠ_ಠ" sonreí al leerlo y me envíe otro "Tranquila ya voy (>'-')>"

Entré al edificio y recorrí los pasillos hasta mi habitación. Toqué la puerta temerosa de recibir una regañina de nuevo, sin embargo fue la pelinegra quien me recibió.