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A alguien como Owen no podía gustarle yo. Él merecía una chica que lo mereciera, pero yo, ¿Yo qué podría ofrecerle? Solo sufrimiento, mi vida prácticamente es sufrimiento y dolor, no le puedo gustar a Owen, no puedo y no debo de gustarle.

Es un gran chico y yo no soy nadie.

Las lágrimas no dejaban de salir, sufría porque sabía que él sufriría a mi lado. Escucho que tocan el timbre de la casa. Solo espero que no sea Owen, no puedo verlo.

-Savanna te buscan -me dice Olivia

-No quiero verlo -le digo

-Soy yo -me dice Keira

Levanto mi vista y la miro con mis ojos llenos de lágrimas. 

-Yo las dejo -dice Olivia y se va

-¿Qué ocurrió? -me pregunta preocupada

-Tu hermano... -se me quiebra la voz y no puedo seguir 

-¿Qué te hizo? Te juro que si te lastimó lo voy a golpear -dice enojada

-Me dijo que le gustaba -le digo llorando

-¿Enserio? -pregunta feliz

Asiento con las lágrimas brotando de mis ojos

-¿Y por qué lloras? -camina hasta mi y delicadamente me abraza

Lo cuál agradezco porque sigo adolorida y que tenga cuidado es algo que nadie hace, es pequeño el detalle pero muy significante para mi. 

-Owen es un buen chico, no es mujeriego, es tierno, comprensible, amoroso, muy estudioso...

-Ya lo sé -le digo y lloro más fuerte

El que me diga más cualidades de él, hace más profundo el dolor y esa sensación de que no lo merezco. 

-¿Y entonces cuál es el problema?

La miro y ella me mira sin entender, sé que puedo confiar en ella, ella dice que es mi amiga, quizá me juzgué pero necesito sacarlo, quizá me entienda y así pueda ayudarme para alejar a Owen de mi.

-Júrame por lo más sagrado que tienes que no le dirás nada a nadie, júralo

-Te lo juro -me dice viéndome a los ojos

-Yo no soy una buena chica para tu hermano...

-No digas eso Savanna...

-Lo digo porque es la verdad

Comienzo a quitarme el suéter, Keira me mira muy confundida, me quito la blusa también y es cuando Keira abre sus ojos realmente sorprendida, tapa su boca y sus ojos se llenan de lágrimas en cuestión de segundos. 

-Mi vida a sido sufrimiento, siempre ha sido sufrimiento y dolor, Owen no merece esto, merece una chica, no este cuerpo lleno de cicatrices y heridas -le digo más calmada 

Esta vez la que lloraba a mar de lágrimas era Keira, se sienta en mi cama y cubre su rostro con sus manos temblorosas. 

-¿Quién te hace eso? -pregunta llorando

-Eso no importa Keira, necesito que me ayudes a alejar a Owen de mi, soy mala para él

-¿Tú eres capaz de lastimarte a ti misma?

-No, no, no soy ese tipo de chica

-¿Entonces quién puede ser tan bestia, monstruo, inhumano, desgraciado para lastimarte de esa manera tan cruel? -me dice mientras me mira y suelta el llanto más profundo

Déjame SanarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora