Déjame Sanarte

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Entro al cuarto de Keira y voy directamente a su baño para poder darme una ducha. Al salir me envuelvo en una toalla, salgo y veo a Keira sentada en la cama con el perrito en manos. 

-Utiliza crema, hay una nueva que compre, huele a frutos rojos 

-Sabes eres una cómplice de tu hermano muy buena 

-Si lo soy -dice orgullosa 

-Dime de que trata la sorpresa 

-No puedo -se queda callada un momento -¿Como le vas a poner? -dice mientras acaricia la cabecita del cachorro 

-Aún no lo sé -le digo con una sonrisa 

-Bueno te dejo para que termines de arreglarte, recuerda usar todo 

Sale del cuarto. 

Me pongo crema en todo el cuerpo, me coloco el traje de baño, encima el vestido, me pongo los tacones, pero me caigo a la cama al intentar caminar con ellos. 

-Rayos -digo 

Camino hasta el tocador con mucho trabajo, está vez me dejo el cabello suelto, cosa que nunca pasa pero  quiero que hoy sea diferente a todos los demás, hoy empezaba mi nueva vida. 

Me puse los aretes, el collar, las pulseras que me regalo Aarón. Llevaba todo lo que me habían regalado así que esa parte estaba lista. 

-¿Puedo pasar? -dice Keira afuera de la habitación 

-Claro 

Entra y me mira. 

-Estas bellísima -dice sorprendida 

-No es para tanto Keira 

-Claro que si, Owen quedara babeando por ti 

Sonrío por las locuras que dice. 

-Solo hay un problema -le digo nerviosa

-¿Qué ocurre? 

-No sé andar en tacones 

-Eso tiene solución -dice con una sonrisa -Ven yo te enseño 

Después de estar caminando 20 minutos por toda la habitación comenzaba a dominarlos. 

-Soy una maestra fabulosa -dice Keira orgullosa 

-De eso no hay duda 

-Dame un abrazo 

La abrazo con mucho cariño.

-Estás lista 

Me toma de la mano y comenzamos a caminar, bajamos por las escaleras y al primero que veo es a Owen con un elegante esmoquin, él se gira y me ve con una sonrisa en el rostro. 

Llego y me paro enfrente de él. 

-Wow, bonita, estas preciosa, no, creo que esa palabra se queda corta, estas perfecta 

Me sonrojo por su comentario. 

-Te ves espectacular -dice la señora Dalia 

-Gracias 

-Realmente linda -dice Aarón -Creí que moría antes de verte en un vestido  

-Que gracioso -le digo con una sonrisa 

-¿Nos vamos? -me dice Owen 

-Claro 

Salimos de la casa, Owen abre la puerta del copiloto y me ayuda a subir, cierra la puerta, rodea el auto y se sienta frente al volante