Jason

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Anoche vi a mis padres teniendo relaciones sexuales. No es que haya quedado traumatizado o algo así; sólo fue raro... Jamás he visto a un hombre y una mujer hacerlo; no pensé que la primera vez sería a dos hombres.

Mis padres.

—¿Estás listo? —pregunta Patrick, y asiento—. Entonces andando.

Luego de salir de casa arribamos su vehículo, para dirigirnos a la escuela.

—Hace mucho que no me llevabas tú... —comento.

—Bueno, no tengo asuntos importantes ahora y quise dejar a tu padre descansar. Por cierto, hijo, con respecto a lo de ayer...

—Ya le dije a papá que estaba bien, papá. S-Sólo estaban teniendo intimidad y... no tiene nada de malo... Estoy bien, descuida. Haré como que nada pasó.

—Pero sí pasó, Jason. Nos viste teniendo relaciones. Debemos al menos darte «la charla».

—Me darán clases de eso en la escuela. Ya olvídalo. Es incómodo que toquemos el tema.

—De acuerdo. Lo siento, en verdad. Pero si tienes dudas sobre eso no dudes en preguntarnos, ¿está bien?

—Sí, ya sé.

Llegamos a la escuela y me despido de él. Ya en clase, me paso toda la hora pensando en eso sin que yo lo quiera. Aún me siento extraño. No puedo evitar imaginarme en esa situación cuando sea grande. Pero... no me imagino con una mujer. No soy gay. O eso creo. Jamás he tenido novia ni novio. Pensé que me gustaban las niñas. ¿Estoy confundido por culpa de mis papás? ¿O es por ser criado por ellos? No sé nada sobre mujeres. ¿Cómo sé que me gustan?

El profesor me llama la atención y un vez más soy la burla de mis compañeros.

Al finalizar la clase e iniciar el receso, voy a mi lugar de siempre mientras sigo pensando. Si no me gustaran las niñas, ¿qué tipo de chicos me atraerían? ¿Más altos que yo? ¿Más pequeños? ¿Serios?

¿Será posible que me guste Terrance?
—Hola, Jason.

Doy un respingo cuando se manifiesta frente a mí.

—T-Terrance, ¡hola!

Los colores se me suben al rostro en cuanto se sienta a mi lado.

—Siempre me alegro de verte, pero no me agrada que siempre estés solo. —Suspira—. Quería escapar un rato de Lizzy. A veces llega a ser un completo dolor de cabeza.

—I-Insisto en que... si no te gusta, quizá lo mejor sea terminar con ella, ¿no?

—No es tan fácil. ¿Qué hay de tus padres? ¿Siguen enojados?

—Pues... últimamente ya no pelean tanto y eso es genial —abrazo mis piernas—. ¿P-Puedo preguntarte algo?

—Adelante.

—¿Sabes algo sobre el cuerpo femenino? ¿Cómo tiene sexo el hombre con la mujer?

—¿Qué?

—¡Lo siento! Es que... no sé nada de eso... Nací en un ambiente de puros hombres...

—Oh, pues... creo que el cuerpo femenino es más complejo que el nuestro, pero te diré lo que sé. El hombre penetra a la mujer por la vagina. Hay que usar anticonceptivos o pueden quedar embarazadas. Y la menstruación es algo que tienen al mes entre tres a cinco días. Es cuando las niñas sangran por ahí. Tienen cambios hormonales; por ende están muy sensibles. Les viene entre los once y quince años. Significa el gran paso a la pubertad. Ya pueden tener hijos desde ese entonces. También son propensas a infecciones cuando no tienen la higiene adecuada.

—Wow... ¿Cómo sabes todo eso? —agrando los ojos.

—Tengo mamá y novia. Además, Lizzy está en sus días; por eso ha estado insoportable.

—Entiendo...

¿Por qué me pongo tan nervioso estando junto a él? ¿En verdad me gusta? ¿O simplemente no estoy acostumbrado a esto de tener amigos?

—¿P-Puedo preguntarte otra cosa?... N-No quiero que vayas a tomarlo a mal. Y no respondas si no quieres.

—¿Ajá...?

—¿Te... gustan los hombres?

—¿Eso aparento?

—¡N-No! Perdón por la pregunta, sólo tenía curiosidad... —me llevo las manos a las sienes y bajo la mirada.

—Descuida. Amm, no. Hasta donde sé, no me atraen los hombres. Tengo novia. Aunque tampoco me emociono mucho por eso. No descarto la posibilidad en el futuro de experimentar con algún hombre. Igual lo que importa son los sentimientos, ¿no?

—Sí. Gracias por responder...

Charlamos un rato más hasta que regresamos a nuestras clases.

La eterna clase de Biología finaliza y, como cada día, espero a cualquiera de mis padres en la acera, rezando por que esto no vaya a terminar en discusión de nuevo. Ya tardaron y ni siquiera me atrevo a llamarles. Si me voy solo, quizá les ahorre las molestias. Aunque queda bastante lejos...

Escucho un auto estacionarse. Un chico de cabello negro y ojos azules, vestido con camisa blanca y chaleco y pantalón negros se baja y me mira.

—¿Jason? —pregunta.

—¿Quién eres...?

—Mi nombre es Niel. Tu papá me contrató para ser tu niñero —dice sonriente—. Andando.

Cohibido, arribo el auto. ¿Niñero? ¿Significa que ya no pelearán por mí? ¡Eso suena bien!

—¿Qué te gustaría cenar? Tus padres llegarán hasta tarde.

—¿Hamburguesas...?

—De acuerdo. Te advierto que me quedan deliciosas. Y mientras comemos podemos ver un maratón de Harry Potter.

—¡Asombroso!

¡Niel es genial! Es como el hermano mayor que siempre quise.

¡Niel es genial! Es como el hermano mayor que siempre quise

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Hola. Los quiero. Gracias por la paciencia. :)

Los invito a leer Los cuatro pétalos de Flor. Me enorgullece cómo la estoy dejando. xD

Dos enamorados en patrulla 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora