NARRA __(TN)
Continuaba golpeando al hombre encima de su regazo, observándolo encogerse de dolor mientras trataba de protegerse sin éxito. Había salido a la calle en la mañana tratando de despejar mi mente distrayéndome de las cosas que usualmente me rodean, hasta que vi a la rata chismosa de los barrios bajos, Víctor. Era muy cotilla y siempre se enteraba de los secretos más escondidos de todos lo que habitaban aquí, él fue la persona que aviso a todos de que mi hermana se había ido dejándome a mí en su lugar.
Ya me había dado información del Arcángel anteriormente pero ese es un tema de los pocos que no le gusta contar porque sabe que se meterá en grandes problemas, por lo que muchas veces tienes que sacarle información de una forma dolorosa, estaba pensando que este chico era masoquista ya que sabe que si no obtengo lo que quiero siempre tengo un par de puños que esperan descargarse en alguien, y en este momento, cuando siento el vacío de mi mejor amigo, es cuando necesito sacar mis frustración de una manera u otra.
Víctor: ¡Para, que me matas Tía! - Coloco sus brazos alrededor de su rostro en forma protectora - ¡No sé nada! ¡¿Cuantas veces tengo que decírtelo?! ¡¿Pero te importa?! ¡No!
__(TN): Mira maldito marica - Lo tome del cuello de la camisa acercándolo a mi rostro - Da la casualidad que nunca sabes nada, tengo demasiado tiempo así que puedo estar aquí todo el día esperando a que te dignes en hablar como el cotilla que eres.
Víctor: ¡Eres una maldita loca! - Grito de nuevo a lo que entrecerré los ojos y comencé a hacer presión en su cuello - Me dejas sin aire - Murmuro ahogadamente.
__(TN): ¡Oh vamos Víctor! Solo tienes que decir las palabras mágicas y saldrás vivo de aquí chillando como la rata que eres - Levante una ceja expectante - Me ha llegado el rumor de que sueltas la gran mentira de que estoy enamorada de ti y que por eso jamás te he matado cuando pones resistencia en estos casos - Reí suavemente - ¿Sientes mi amor Víctor?
Victor: Como no tienes idea - Comenzó a ponerse rojo, luego su rostro paso de distintos colores - De acuerdo, te diré lo que...quieras...pero...pero suéltame.
__(TN): Eso es lo que quería escuchar - Sonreí como maniática y lo tome del cuello - ¿Dónde está el Arcángel? Y no mientas o te castrare, y tendrás que quedarte en casa los fines de semana por que ya no podrás irte a revolcar con las putas ofrecidas de aquí.
Víctor: No lo sé, he escuchado que si no está en Londres su lugar favorito es Liverpool pero no puedo asegurarte de que se encuentre ahí - Se calló por un momento pero luego me miro sumisamente - ¿Es verdad que Niall murió por protegerte?
__(TN): ¿Eres un hijo de puta que quiere morir, verdad? - Levante el brazo para darle un codazo en la cara pero cuando cerró los ojos con fuerza e iba a golpearlo, pasos corriendo en mi dirección se escucharon.
XX: ¡¿Que carajos estás haciendo!? - El grito alterado de la persona más engreída del mundo resonó en mis tímpanos, rodando los ojos me separe de Víctor para mirarlo a la cara.
__(TN): ¿Que hace el príncipe rebelde de los Altos, aquí? - Levante una ceja con burla mientras me colocaba el filtro del cigarro entre mis labios y lo encendí con el mechero que estaba en mi chaqueta, cubriéndolo ya que la brisa impedía que pudiera encenderse correctamente, inhale unas cuantas veces antes de volver a mirar a Zayn.
Zayn: ¡Oh, nada! Estoy de paseo por el vecindario hasta que vi a una chica molesta golpeando a un pobre vagabundo - Escupió con todo es sarcasmo del mundo a lo que sonreí de lado mientras expulsaba el aire de la nicotina.
Víctor: ¡No soy un vagabundo! - Grito con indignación a lo que rodé los ojos. El auto de Zayn estaba estacionado de mala manera frente al callejón, lo que me hizo pensar que había detenido el auto tan apresuradamente.
