-Narra Christopher-
Me deja con la palabra en la boca y se va casi corriendo. Regreso a la cocina y me quedo en shock cuando veo a Marina en medio de la cocina y llena de lo que iba a ser la masa de las tortitas de nuestro desayuno.
Chris: Marina... princesa ¿Qué hiciste?
Marina: quelia hacel mi desayuno tío polque te taldaste mucho.
Chris: ay Marina... anda vamos a bañarte y después preparamos tu desayuno ¿si?
Marina: ¡no! ¡quielo mi desayuno!
Se cruza de brazos enojada, tomo aire y busco las palabras indicadas para poder convencerla.
Chris: a ver mi amor... mírate como estás... vamos a bañarte primero, te pones ropa limpia y después venimos y desayunamos.
Marina: ¡que no! ¡quielo desayunal! ¡quielo desayunal ahola!
Comienza a hacer berrinche y aunque intento convencerla al final accedo.
Chris: okey ya... está bien, está bien, primero desayunamos y después vamos a bañarte ¿de acuerdo?
Marina: ¡siiii!
Salta emocionada y la cargo para sentarla junto a la barra de desayuno.
Chris: aquí quédate quietecita mientras preparo tu desayuno ¿si?
Marina: pelo me abulo tío.
Chris: van a ser dos minutos Marina, por favor quédate aquí ¿si?
Marina: está bien...
Dice resignada y por fin puedo convencerla de algo, me giro para comenzar a preparar su desayuno y mientras lo hago ella no para quieta en el asiento y habla sin parar.
-Narra Dulce-
Por fin llego a la clínica en Toluca y entro rápidamente hasta el puesto de enfermeras.
Dulce: disculpe señorita...
Xxx: sí dígame ¿en qué puedo ayudarla?
Dulce: trajeron a mi abuelo con una crisis diabética.
Xxx: dígame el nombre de su abuelo.
Dulce: Bernardo Saviñón.
Xxx: un momento por favor.
Teclea algo en el ordenador y busca algo por algunos segundos que me parecen eternos.
Xxx: su abuelo se encuentra en la habitación 212, es por ese pasillo y luego a la derecha.
Dulce: muchas gracias.
Casi corro por el pasillo hasta llegar a la puerta donde veo el numero 212, abro despacio y la sangre vuelve a correr por mis venas cuando veo a Soledad y a mi abuelo hablando bastante animados.
Dulce: abuelo...
Bernardo: hola mi florecita.
Dulce: ay lalito que susto me pegaste.
Corro para llegar a su lado, me siento y lo abrazo fuerte dejando escapar algunas lagrimas de alivio, de alivio porque está bien... si algo le pasa a mi abuelo, yo no sé qué haría.
Bernardo: no llores mi amor si ya estoy bien, no llores mi florecita.
Dulce: me pegaste un buen susto, es que abuelo como no te controlas tu azúcar, de verdad te pasas.
Bernardo: pero bueno ¿tú me estás regañando a mí?
Dulce: ¡pues claro! Alguien tiene que hacerlo.
ESTÁS LEYENDO
Buscando La Llave Hacia Tu Corazón
FanfictionDulce Espinosa nació en una cuna de oro... siempre ha tenido todo lo que ha querido en la vida, la única hija del matrimonio de dos personas obligadas a estar juntas pero que poco a poco aprendieron a convivir. Pero a pesar del lujo y de las comodid...