Buscando La Llave Hacia Tu Corazón

Capitulo 71 - Su Amiga Paty

-Narra Dulce-

Camino de un lado a otro llena de rabia al llamarle una vez más sin obtener respuesta.

Furiosa lanzo el móvil contra la mesa y me alegro de que no haya nadie aquí porque en este momento lo único que quiero es gritarle lo mucho que lo odio y al menos lo hago aunque sea al teléfono.

Dulce: ¡te odiooo! ¡te odio Christopher! ¡tu padre es un idiota mi amor!

Le hablo a mi vientre y cuando miro el teléfono sin respuesta aún me hace enojar más.

Dulce: ¡imbécil! ¡eso es lo que eres Christopher Uckermann! ¡un idiota y un completo imbécil!

********: bueno... al parecer mi hermanito volvió a regarla contigo.

Me giro al escuchar su voz y enseguida se acerca sentándose pero yo no puedo hacerlo, estoy que ardo de la ira y no puedo sentarme.

Dulce: ¡exactamente! ¡la regó! ¡porque es un tarado! ¡un estúpido idiota!

Victoria: uy... ¿y ahora que hizo? Yo pensé que ya estaban muy bien, desde que terminaste con Mario andan muy juntos, que por cierto aún ni me cuentas porque terminaste con él.

Dulce: Victoria ahora lo que menos necesito es hablar de Mario.

Victoria: okey entiendo pero ya dime ¿Qué hizo mi hermanito esta vez?

Dulce: ¿Qué hizo? Hizo invitarme a comer y no hacerme ni caso por estar pegado al maldito teléfono ¡que ahora no atiende!

Alzo la voz y de verdad siento que mi rabia está al límite.

Victoria: bueno Dul de seguro andaba pendiente de algún asunto con sus empresas o algo así, ya sabes que ahora es todo un hombre de negocios.

Hace unos gestos y aunque me río mi rabia no baja ni un poco.

Dulce: no... es que no es por eso porque lo escuché, hablaba con una tal Paty, no te preocupes Paty puedes quedarte en mi casa, tranquila Paty que me desocupo y te recojo ¡ósea me desocupo! ¿te das cuenta Victoria?

Victoria: Dul tranquilízate igual es una compañera o una amiga, no sé.

Dulce: ¡una amiga! ¡una amiga por la que me deja plantada a mí! ¡a su mujer! ¡a la madre de su hijo!

Lo suelto de golpe sin pensarlo y la cara de Victoria al escucharme es un poema.

-Otro Narrador-

Mientras al otro lado del mundo, más concretamente en la ciudad italiana de Milán, Nuria Ferraño recibía emocionada a un importante detective que acababa de contratar.

Le había costado mucho aceptar la propuesta que su fiel empleada le hiciera semanas atrás pero por fin se había decidido y no iba a descansar hasta encontrarla.

Nuria: buenas noches detective, disculpe que lo haya hecho venir a estas horas pero el resto del día me la paso ocupada.

Xxx: no se preocupe señora Ferraño entiendo perfectamente, mi nombre es Julián Ríos.

Nuria: un placer señor Ríos, tome asiento por favor.

Nuria estrechó la mano del detective y enseguida tomó asiento haciéndole un ademán a él para que la siguiera.

Detective Ríos: bien, entonces dígame en que puedo ayudarla.

Nuria: verá yo me vine a vivir a Milán hace muchos años pero en realidad soy de México.

Detective Ríos: bien, entiendo.

Nuria: cuando dejé mi país no tenía ningún familiar cercano, sólo una sobrina pero a la que quería como una verdadera hija.