Buscando La Llave Hacia Tu Corazón

Capitulo 94 - Quiero Cuidarte

-Narra Dulce-

Lo miro enfurecida y siento que la rabia me recorre, me suelto de su agarre y cuando intento irme para no seguir escuchando sus estupideces me vuelve a detener.

Chris: Dulce no te vayas.

Dulce: ¡me voy! ¡me voy porque no quiero seguir escuchando toda esta sarta de estupideces que estás diciendo!

Chris: chiquita por favor, tienes que...

Dulce: ¡que nada Christopher! ¡suéltame de una maldita vez!

Me suelto de su agarre y le miro cuando siento que la rabia me consume y sin poder creer que esté dudando de mí así.

Chris: Dulce...

Dulce: ¡ya basta Christopher! ¿quieres saber porque estaba vomitando? ¿de verdad quieres saberlo?

Chris: mi amor...

Dulce: ¡estaba vomitando porque me embarazaste otra vez idiota!

Camino hasta el sillón donde tengo mi bolso y rebusco hasta encontrar la prueba, enseguida que la tomo de nuevo me paro frente a él.

Dulce: ¡eres un imbécil Christopher! Y esto es para que veas que no te estoy mintiendo y no dudes de mí de nuevo ¡estúpido!

Le suelto una bofetada de la rabia que siento y le tiro la prueba de embarazo en la cara, salgo corriendo de ahí sin dejarlo decir nada más cuando las lágrimas ya salen de mis ojos, dolida porque haya dudado de mí de esta manera cuando yo sólo quería darle esta maravillosa noticia.

-Narra Christopher-

Me tira algo a la cara después de darme una bofetada y sale corriendo dejándome totalmente paralizado con lo que me acaba de decir.

Apenas me doy cuenta y salgo del shock en el que estoy recojo del suelo lo que me ha tirado a la cara y puedo ver que es una prueba de embarazo... una prueba...

Chris: positiva... ¡dios!

Siento que me falta el aire y no puedo creer que esto sea cierto, que haya sido tan estúpido de dudar de ella y no preguntarle primero.

Camino de un lado a otro frustrado y pasándome las manos por el pelo, mirando la prueba positiva una y otra vez sin poder creerlo. Sin poder creer que de nuevo voy a ser padre.

Intento encontrar la manera para ir tras ella pero en este momento sé que lo último que quiere es verme. Me siento en la cama intentando buscar una solución y una manera de pedirle perdón mientras asimilo todo esto.

Cuando logro tranquilizarme decido ir a buscarla, al llegar a la sala veo a Emilia salir de la cocina.

Emilia: señor...

Chris: Emilia ¿has visto a mi esposa?

Emilia: salió hace unos minutos hacia el jardín señor pero se la veía muy mal.

Chris: ¿Cómo que se la veía muy mal?

Emilia: iba llorando señor.

Me doy un golpe mental y enseguida asiento, cuando Emilia regresa a la cocina salgo hasta el jardín en su busca e intentando buscar las palabras adecuadas porque no sé ni que decirle.

Apenas atravieso la puerta que da al jardín oigo sus sollozos y se me hace un nudo en el pecho mientras a cada segundo que pasa no logro entender como he podido ser tan idiota y dudar de ella de esta manera, tomando aire me acerco a ella que está sentada frente al estanque de su jardín.

-Narra Dulce-

Me desahogo en el único lugar en el que ahora puedo sentir un poco de paz, desahogándome porque me siento una estúpida, una tonta que por querer sorprenderlo solo he terminado por hacerlo dudar de mí de esta manera. Siento que siempre va a ser así y que nunca podrán olvidar todo lo que pasó y que siempre, cada día del resto de mi vida, la sombra de mi enfermedad estará ahí porque tengo presente que lo estará y puedo soportar cualquier cosa pero que él... que precisamente él dude de mí así, eso me duele demasiado.