LOS MUNES

Capítulo 57

Nada más salir, pude apreciar que cada vez había menos gente. No sabía si era símbolo de que estábamos acabando con los del Brazo Derecho o que ellos estaban acabando con nosotros. De cualquier modo, no iba a rendirme.

En cuanto vi a los enemigos, comencé a luchar. Estaba lleno de ira, como si todo mi cuerpo estuviera lleno de adrenalina y necesitara liberarse de toda esa energía. Disparé, maté, luché en el cuerpo a cuerpo... Todo pasaba a una velocidad increíble. Apenas era capaz de pararme a pensar en lo que hacía, simplemente actuaba.

Hasta que hubo un momento que me encontré de cara con Minho. Me habría gustado descansar y hablar con él de todo lo que había pasado, de la muerte de Jorge y Sonya, de la amputación de Brenda, de la información de la ministra... Pero no. Ahora lo que tocaba era pelear. Él seguía enfadado conmigo, pero debía dejar eso a un lado, al menos hasta que todo acabara.

-¿Tienes balas para mí? - me volvió a pedir. Esta vez, pude notar que detrás de esas palabras, había un sentimiento de confianza. Era como si quisiera decir que teníamos que luchar juntos.

-Por supuesto - dije con una media sonrisa.

Le pasé parte de mi munición y nos colocamos espalda contra espalda, y comenzamos a luchar. Él me cubría a mí y yo a él, me sentía como si volviera a los viejos tiempos, cuando luchábamos juntos.

No sé durante cuanto tiempo estuvimos así, pero después de un rato sin parar de disparar y pelear, nos quedamos sin contrincantes. Estaba agotado, con la respiración entrecortada y la frente goteando por el sudor. Apoyé mis manos en las rodillas para intentar descansar unos segundos.

-¿Cómo vas? - me preguntó Minho.

-Bien. ¿Hemos ganado?- dije a la vez que levantaba la vista.

Descubrí a gente del valle asegurándose de que los muertos no se levantaran. También vi a otros transportando a más heridos a la cabaña de los curanderos. Pero no veía a nadie más del Brazo Derecho. Aún no me lo podía creer. Estaba en una nube.

-No cantes victoria tan pronto- interrumpió Minho mis pensamientos -¿Has visto a Vince?

Eso me hizo reaccionar. Hubo un breve momento en que me pareció verlo, pero no había vuelto a verlo. Y además, ¿dónde estaba Will? Él iba tras Vince, ¿lo habría encontrado? O aún peor, ¿Vince lo habría encontrado? Empecé a temerme lo peor.

Comencé a buscar el rostro de Will entre la gente superviviente y entre los cuerpos tirados en el suelo. Se me partió el alma al encontrarme caras conocidas. Habíamos ganados, pero con un alto precio. Luego habría que hacer recuento de víctimas, heridos y supervivientes. Tenía miedo de que el número de muertes superara al de vivos...

Escuché un grito muy fuerte. Me acerqué corriendo a ver que pasaba. Era Helen. Había encontrado el cuerpo inerte de Evelyn. Le habían disparado una bala en la cabeza. Habría muerto al instante, sin dolor. Pero sin oportunidad de despedirse de sus seres queridos. Además, todavía no había encontrado a su novio. Él seguía desaparecido, o lo más probable: muerto.

Mientras Helen sujetaba el cuerpo de su amiga y lloraba en su pecho desconsoladamente, vi a Luke quejándose de dolor en el suelo. Y a Jeremy con un golpe muy fuerte en la cabeza, y le estaba sangrando. Pero estaba vivo, y no pude evitar alegrarme, al fin y al cabo, era un buen tipo y me había ayudado mucho en esta batalla. De hecho, si no fuera por él, puede que estuviera muerto, así que estaba en deuda con él.

-¡Thomas!- me llamó Minho observando unos cuerpos.

Fui lo más rápido que pude. Cuando llegué, Minho me señaló con el dedo aquello que había llamado su atención. Me quedé sin habla al encontrarme a Vince. Pero más me sorprendí al comprobar que aún respiraba. Seguía con vida. Apenas se podía percibir su respiración, era muy leve. Eso podría significar que no le quedaría mucho tiempo de vida.

-¿Qué hacemos con él? - le pregunté.

-Está herido, morirá en unas horas, o puede que menos.

-¿Puedo acabar con él? - dijo una voz a mi espalda de repente.

Me giré y vi a Will. Estaba lleno de barro y sangre, aunque no parecía herido, por lo que supuse que no sería suya. Su mirada estaba fija el Vince.

-¿Estás seguro chico? - preguntó Minho con voz adulta.

-Sí. Por todos a los que ha hecho daño, incluido yo. Por Aris, porque aún no ha despertado y puede que nunca lo haga.

No podía estar más de acuerdo con sus razones.

-Toma- le dije soltando un cuchillo en su mano- ¿Sabes lo que tienes que hacer verdad?

El asintió con mucha seguridad y serenidad. Se acercó al cuerpo de Vince, se colocó encima de él. Vince parecía haber intuido lo que iba a pasar, ya que cambió su expresión. Pero no podía a penas moverse. Intentó decir algo, yo no conseguí entenderlo, pero al parecer Will sí. En cuanto lo escuchó, Will cambió su expresión de tranquilidad a una de ira. Y en menos de un segundo, le había clavado el cuchillo en el corazón. Había sido una puñalada limpia y directa. Vince ahogó un quejido, pero en seguido se calló.

Will se levantó, mirándolo con odio, como si no tuviera bastante. ¿Qué le habría dicho Vince para provocar esa actitud en Will?

-¿Qué te ha dicho? - le pregunté curioso, sin apartar la vista del cuchillo que aún sostenía.

-Me ha dicho que tendría que haberme matado cuando tuvo la ocasión- escupió con asco.

-Así es Vince, gilupullo hasta el último momento - comentó repentinamente Minho.

-Bueno, ¿y ahora qué?- preguntó Will.

Antes de contestarle, Minho se acercó a él y le quitó el cuchillo de la mano. Me lo devolvió, y me dedicó una mirada de circunstancias.

-No sé, por el momento, hay que buscar supervivientes, hay que contar las bajas, y los heridos tienen que recuperarse. Además, hay que comprobar los desperfectos y calcular cuanto tiempo nos llevará recuperarnos de todo lo que ha pasado- dijo con un tono cansado.

Y de golpe, me acordé de la conservación que había tenido hacia un par de horas con Ava Paige.

-No muy lejos de aquí, a unos 15 kilómetros hacia el oeste, se encuentra otro campamento de inmunes.

-¿Cómo sabes eso? - preguntaron los dos.

-Ava Paige me lo dijo. Durante la Batalla, se acercó y hablé con ella. Me ha informado de que las cosas están yendo bien, que los raros están desapareciendo. Puede que en un año, el planeta sea totalmente seguro. Sin signos del Destello, sin CRUEL de por medio, sin El Brazo Derecho... Solo inmunes.

Minho puso una cara de felicidad imposible de esconder. Y lo entendía. Si el mundo era seguro, Marie podría estar tranquila. Bueno, ella y su hijo. Parecía que al final, todo iba a acabar bien para la pareja.

Y entonces, me alejé corriendo de allí. Y me fui directo a las tiendas. Tenía que ver a Brenda.

N/A

Lo siento muchísimo de nuevo.

Realmente pensaba que al final subiría mañana, pero he conseguido un tiempo y bueno, aquí lo tenéis.

Estoy muy ocupada y agobiada con este curso. Tengo mil exámenes y me quita mucho tiempo. Pero bueno, seguiré intentado subir. Si no puedo el domingo, lo haré el lunes, no puedo hacer otra cosa.

Bueno, al capítulo. ¡Se acabó! O... ¿Puede qué no? Han habido muchos muertos, y heridos.

¿A quién más le ha gustado la muerte de Vince? Muy merecida, y lo ha hecho Will.

¿Cómo estará Brenda? Thomas está muy preocupado por ella.

Bueno, yo os aviso de que cada vez va quedando menos para el final.

Espero que os haya gustado, votad y comentad.

Y gracias por leer mi historia.

Chao!